capítulo 5

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Más o menos 20 minutos después llegamos, aparcamos afuera de una casa inmensamente grande, era realmente linda, un poco profesional para mi gusto, bajo del auto y me encuentro con mi mamá.
- hija, aquí nos quedaremos mientras se hacen los últimos arreglos de nuestra casa. Dice mi mamá
-pero está casa de quien es?
- mía.
-Que! *Fingía molestia, pero la verdad me encantaba la idea.
Al entrar me di cuenta que era aún más hermosa, es tan elegante que da miedo. La recorrí toda, y me fijé que en la sala habían muchos cuadros y fotos, una me llamo la atención, era un niño pequeño con una señora ya de edad, se veían realmente felices, una voz m saco de mis pensamientos. -es mi abuela y yo.
- Ah, buen yo iré a guardar mis cosas, con permiso. *Con permiso?, Pero que coño me pasa!?.
Camino rápidamente hacia la entrada de la casa, dios qué vergüenza me pilló chismeando sus cosas!, Cojo mi maleta y subo al cuarto, Alfonso me indico en cual me quedaría, asiento y entro, era muy lindo más grande que el que tenía en los Ángeles, tenía baño propio, cama de 2 plazas, y algo me llamo la atención del techo, iba a ver cuando entra mi papá.
-hija, se que no es lo que esperabas, pero no te lo quise decir, temia que te pusieras como loca.
-descuida, esto no está tan mal.
Mi papá asintió y salió, realmente estoy muy cansada, y ya era bien tarde.
Haci pasan los días, poncho se comporta de unamanera nuy profesional conmigo pero se que caerá  varias  veces lo eh pillado observandome, ya llevamos casi dos  semanas viviendo aquí , no se que pasa con la nueva casa, y en verdad no me importa mucho, poncho ya tiene  todo listo para que vuelva a clases, en unos dias iré.
Poncho tiene algo que me atrae de el, se que puedo seducirlo.
Ya es de noche y bien tarde decido darme una ducha, saco mis cosas para el baño y una pijama, entro al baño, muy bonito por cierto, igual de elegante que toda la casa.
Me saco la ropa y me meto a bañar.
Estaba realmente relajada, me puse a pensar en Alfonso, como es que siendo tan joven sea director de una escuela? Quizá sea esposo de alguna viejecita con mando ahí. Luego de 30 minutos salgo y me pongo la pijama, desde pequeña que no uso ropa interior para dormir, a algunas personas les parece sucio a mi al contrario. Busco una revista porno, la verdad me entretienen, siempre se las saco a mi hermana, maldita pervertida. Ya eran la 1am y me dio hambre, dejo la revista aún lado y decido ir en busca de algo para comer, salgo del cuarto y una luz capta mi atención, venia de un cuarto al lado del mío. ¿será de ponchito?, Camino lo mas despacio posible, me asomo cuidadosamente, para mi desgracia era el, pero no estaba solo.
Me asomé y estaba con una tipa, típica rubia, alta quizás medía unos tres metros, bien flaca, tenía un aspecto más como modelo, se estaban besando intensamente, pues claro, era obvio que ese bombón no podría estar solo! Rápidamente se me ocurre algo, retrocedo varios pasos atrás y me tiro al suelo comienzo a gritar como si me estuvieran degollando, el sale del cuarto algo asustado y agitado. Maldito.
- mierda! Estás bien? Que paso! Atrás por la puerta vi a la rubia de 3 metros asomándose media molesta. Lo siento si arruine tu cita con tu cliente.
-venia de la cocina y no se como me tropecé, dios como duele, digo casi llorando.
Me mira algo afligido y me ayuda a pararme. Era hora de hacerlo aún más dramático.
-Ay no, no puedo pararme me duele demasiado. *Digo señalando mi pierna.
Alfonso me mira con algo de comprensión. Creo que esto está resultando. Me coje en sus brazos, por dios esto es el cielo!
- lo siento Brittany, si quieres mañana te llamo.
Ella asiente enojada y me mira con odio, como lo disfruto.

Lo prohibido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora