capítulo 38

155 18 3
                                    

Dan la última llamada para abordar el avión.
Voy y me subo, no tengo idea cuántas horas tengo de vuelo, y en verdad no me importa, necesito pensar, aclarar mi mente, realmente este fue un día horrible para mí, no entiendo cómo es que Catalina se atrevió a buscarme después de todo, no niego que me gustaría llevarme bien con ella pero ni modo me toca salir adelante sola.
Busco mi asiento y me tocó en el pasillo, fantástico! (Sarcasmo)
Acomodo mi bolso y me siento.
En un par de largos minutos el avión cierra sus puertas y dan las instrucciones de siempre, que te pongas el cinturón bla, bla ,bla.
Cierro mis ojos y el avión despega, odio volar.

Sumida en mis pensamientos llevo al rededor de una hora de vuelo, una voz completamente desconocida para mi me saca de mis horribles pensamientos.

-un mal día eh?
Dice el extraño, abro mis ojos y veo al chico que está sentado al lado mío.

-disculpa?
Le digo.

-mi nombre es Richard y el tuyo?

Es rubio, ojos azules y se ve de cómo 18 años más o menos.

-dulce.
Le digo seca, no tengo ganas de hablarle con nadie.

-debio pasarte algo horrible.
Dice mirandome, me pone algo nerviosa.

-tanto se nota?
Le respondo.

-si, un poco.

-la verdad es que si, fue un día horrible.
Ni sé por qué le sigo hablando, me causa confianza.

-Quieres contarme?

-contarle mis triste vida a un desconocido?
Río

-tienes que desahogarte no crees?
Dice el.

-encontre al hombre que se supone me amaba, y estaba enamorado de mi, con otra, mi papá murió hace un par de semanas, mi mamá viene a buscarme para llevarme con ella nueva York, y realmente la veo como cualquier cosa menos como una mamá.
Debería ir a lo que callamos las mujeres?

-uf, eso sí es malo, y cuantos años tienes?

-15, y justamente mañana cumplo 16.

-y por que vas a Alemania?

-para escapar? No lo sé, simplemente no podía seguir ahí.

-sabes, se ve que eres muy fuerte, y que podrás salir de esto y mucho más, estoy seguro que el tipo que te engaño se va a arrepentir.

-gracias, y tú cuántos años tienes?
Le pregunto, de verdad me causa curiosidad saber su edad.

-17

-y por que vas a Alemania?

-solo a visitar, y creo que no fue un error venir.
Me mira

No le respondo nada, pasa un rato y me quedo profundamente dormida.

Pasan 7 horas y 30 minutos y despegamos, despierto de golpe, me quedé dormida en los brazos del desconocido.

-lo siento.
Le digo apenada.

-no te preocupes, yo estaba cómodo.
Ríe.

Finalmente bajamos del avión.

Camino a buscar mi maleta y no veo más al chico del avión.

Salgo del aeropuerto, algo pérdida.

-necesitas ayuda?
Dice Richard.

-tu?

-el destino nos quiere juntos.
Ríe.

Tomamos un taxi hasta un hotel.

Nos registramos, obviamente en habitaciónes separadas, el hotel es muy lujoso, bien lindo la verdad.
Llegó a mi habítacion y me tiró en la cáma, duermo profundamente son alrededor de las 12 de la madrugada, me quedo profundamente dormida.

Despierto a las 1 de la tarde, y por mi seguiría durmiendo me levanto y pido desayuno, mientras me doy una ducha para relajarme un poco.
Me visto muy casual y dejo mi cabello secar al aire libre.
Me miró al espejo y tengo unas ojeras feisimas, tengo mi cara muy demacrada, les juro que ya ni ganas tengo de llorar.
Tengo pensado salir a buscar algún apartamento pienso quedarme a vivir aquí, tengo visa de turista pero no me cuesta nada sacar una de estadia permanente ya que mi papá tenía amigos muy influyentes aquí, en mi celular tengo el número de ellos.
Cómo mi desayuno viendo televisión, no entiendo así que mejor pongo una película en inglés.
Termino de comer y me quedo nuevamente acostada.
Me siento tan desprotegida, no puedo evitar llorar al recordar lo de ayer.
Sumida en un mar de llanto siento que alguien golpea la puerta de mi habitación.
Me seco un poco las lágrimas y voy a abrir la puerta.

-Happy birthday to You
happy birthday to You
happy birthday dear dulce!
happy birthday to You.
Es Richard y trae un pastel y un peluche.

Ni siquiera había recordado que hoy es mi cumpleaños.
El deja el pastel en la mesa y me entra el peluche.
Yo corro y lo abrazo. Las lágrimas corren nuevamente por mis mejillas y el me abraza fuerte. Necesitaba tanto un abrazo.

-muchas gracias.
Le digo llorando.

-tranquila, todo va a estar bien.

Pasa un buen rato y Al fin nos separamos.

-comamos pastel?

Asiento.

Nos servimos el pastel y comemos, el me cuenta su vida entera y yo la mía, me cuenta de que tiene una hermana melliza, por eso me habló, ya que le recuerdo a su hermana. Es muy simpático, es de Italia pero vive en londres, se graduó con honores y piensa estudiar en Harvard, pero primero quiere recorrer el mundo.

-no haz pensado en emanciparte?
Dice el.

-no lo había considerado.

Tiene razón! Como no lo pensé Antes!!

Terminamos de comer.

-que harás ahora?
Dice el

- pensaba ir a ver departamentos.

-yo voy contigo.

Nos alistamos y salimos.
Al final no vemos ningún apartamento y pasamos el día comprando ropa y comiendo.
Quizás este no sea el país mejor para vivir, por el idioma, soy completamente inútil en eso, si no fuera por Richard que habla alemán me moriría de hambre.

Nos tomamos una cuántas fotos, Alemania es muy hermoso.

Ya cansados y de noche decidimos volver al hotel, en taxi suena mi celular, es un mensaje de poncho

Dulce por favor dime dónde estás, tengo que explicarte cómo fueron las cosas! Tienes que escucharme por favor, yo te amo.

-es el idiota?
Dice Richard.

-si.

-no le contestes, hazlo sufrir un poco.

Tiene razón.
Le dejo el visto.
Llegamos al hotel y subo a mi cuarto me pongo mi pijama y me quedo dormida.

El sonido de mi celular me despierta, veo la hora y son las 3 de la mañana.
Es poncho que me envió un audio.

-dulce porfavor respóndeme, dime dónde estás, estoy muy preocupado, no puedo vivir sin tii!

Lo ignoro, y apagó mi celular.




Lo prohibido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora