Lo prohibido

capitulo 42

Me giro y lo veo,mi corazón palpita con fuerza y rapidez, está en frente de mí. con esa sonrisa que tanto me gusta.
No lo pienso dos veces y corro a abrazarlo, un año, un maldito año deseando tocarlo, abrazarlo!
El me abraza con fuerza.
-no puedo creer que estás aquí!
Dice el.

Nos separamos, me mira de una forma muy especial a los ojos, noto que una lágrima corre por su mejilla.

-no llores.-digo mientras le limpio las lágrimas.

-me haz echo tanta falta!
Vuelve a abrazarme.
Perdóname por todo por favor, no puedo estar sin ti.

Me mira y toma mi cabeza entre sus manos.
-te amo, no te vuelvas a ir jamás.

-poncho, yyo...-como le digo que estoy con alguien más?-.

-que pasa?

-nnada.

No tengo corazón para verlo sufrir, sé que le tengo que decir pero no quiero arruinar este momento.

Salimos del aeropuerto y el me ayuda con mi mini maleta, nos subimos a su auto, me encanta verlo cuando maneja, su expresión de concentración me encanta.

-que me ves?.-dice riendo.

-te extrañaba.-oh por dios eso salió de mi?

El sonríe y me mira por un segundo antes de volver a poner su vista al volante.

-tambien yo, y mucho.
Acaricia mi mano izquierda, extrañaba sus manos calidas, se complementan perfecto con mis manos frias, creando una contacto perfecto.

-donde me llevas?.-le pregunto.

-a mi casa.

-anahi me ofreció quedarme en su casa.

-no es necesario.- dice en un tono suave.

No digo nada, el resto del camino es tranquilo en una hora llegamos a casa de poncho.
El se estacióna y yo me dispongo a salir.

-espera, no salgas dice el.

-por qué?

El sale del auto y me abre la puerta, tiene un pañuelo de tela en sus manos.

-antes de entrar tienes que taparte los ojos.

Me pone el pañuelo de tela delicadamente cubriendo mis ojos, huele a el.

-ves algo? No me mientas.-dice el de una forma divertida.

-no, no veo nada, ahora que harás? Me vas a asesinar?

El rie, siento que se posa detrás de mí ayudandome a caminar, me abre la puerta y con cuidado me hace entrar.

-listo.
Me saca el pañuelo.
Enciende la luz.

-oh por dios, que lindo!!

Tiene puesta la mesa, en esta hay un salmón entero, y mucha comida, también hay vino, y jugo.
Tiene adornado con pétalos de rosa todo el suelo, un montón de globos de helio en forma de corazónes que llevan mi nombre y el de el.

-por qué hiciste esto?.-estoy apunto de llorar..

-porque te amo.

Me lanzo hacia el abrazandolo, el me toma entre sus brazos, no puedo evitar llorar, nunca nadie había echo esto por mí.

-tranquila, ya estamos juntos.-me dice el.

El sonido de mi celular nos separa, busco entre mi bolso y lo encuentro.

Es Richard, dudo en si contestarle o no, pero si no le contesto seguirá llamando, limpio mis lágrimas.

-bueno?.- Respondo tratando de parecer normal.