Capitulo 14

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Capitulo 14

Era una mañana soleada la del día siguiente en Rosewood, no más de las 9:30, las dos chicas que al final lograron aclarar gran parte de todo el mal entendido por parte de su odio por años fue algo que las hizo sentirse en paz con cada una, no solo por como comenzarían ahora a tener una mejor relación y con todo el grupo de sus amigas estarían más que feliz de verlas bien y poder todas disfrutar a la par en las actividades que se disponían a hacer siempre que había oportunidad, sino también en su corazón, ahora podía estar libre de ese sentimiento que tanto tiempo las tuvo presas de demostrarse en serio como sentían, y lo mejores que pudieron ser.

Las dos vivieron un engaño, Alison por Paige que supo cómo jugar con ella por medio ese miedo que hasta el día de hoy le afectaba, y Emily al no ver realmente a Alison, y como su mirada pudo esconder tan linda forma de sentir.

Aquella mañana la primera en despertar fue la morena, no podía ver si el sol estaba posado en aquel cielo o si seguía sin salir por ser temprano, hecho un ojo al teléfono que estaba en la mesita de luz al lado de cama dándose cuenta que no era tan temprano como pensaba, fue al tratar de agarrar su teléfono cuando recordó que no estaba sola en aquella cama, en su habitación, lo primero que vio esa mañana fue el rostro de una relajada Alison, dormía apaciblemente, su respiración estaba un poco agitada por el resfriado que la noche anterior le había comenzado, vio sus pequeños cortes en la cara y recordó todo lo acontecido.

Tenía pequeñas cicatrices, no eran grandes pero eran notables, tenía un pequeño corte en la comisura de sus labios, pero con todo y sus cortes, con los cabellos esparcidos, algunos mechones en su cara la cual se encontraba a un lado, por lo que la rubia dormía abrazada a la morena, se veía linda, porque ella en si era linda siempre, miraba sus labios, no podía creerlo había besado a esa chica la cual le había gustado desde que la conoció prácticamente, había besado esos labios color rosa que le llamaban a hacerlo; a besarlos cada que la miraba, esos labios que jamás pensó después todo lo sucedido podría volver a besar, tenía sus labios un poco separados y sus mejillas con un toque rosa, su respiración era suave, y su corazón latía de una forma tan pacífico que te generaría paz al escuchar sus latidos.

La sonrisa en el rostro de Emily surgió de pronto después de unos segundos de mirar a la rubia, no, esta no era la primera vez despertando al lado de la rubia, siempre hicieron fiestas de pijamas con las chicas y muchas veces les tocaba juntas, pero la diferencia aquí es que despertarían sin tener que separarse porque no querían pensar que se aceptaban después de todo, una pelea no sería lo primero en ocurrir esa mañana.

Mas sin embargo esta sería la primera vez que despertaba a su lado con la paz de tenerla así por el tiempo que fuera necesario hasta la que la rubia despertara, era su primera vez en armonía mirando a la rubia dormir con una sonrisa en su rostro, y entonces pensaba ¿Cómo puede estar tan bonita dormida? , Tomo un mechón de su pelo que estaba en su cara y lo movió delicadamente colocándolo detrás de su oreja, acaricio su mejilla y tomo la mano con la que la rubia tenia abrazada su cintura para darle un tierno beso en ella.

Alison dio un movimiento suave, y Emily sintió nervios, al verla despertar no sabía en si como reaccionaria la rubia, era nueva para todo esto, su corazón latía muy rápido, la cabeza de la rubia estaba acomodada en el pecho de la morena, su brazo extendido en la cintura de esta y no saben de qué manera sus piernas terminaron enredadas con las de la otra.

Para Emily le fue imposible no volver a sonreír al ver aquel juego de tonos en la mezcla de pieles que en aquel profundo sueño se había formado, porque el tono de su piel con el de la rubia eran para ella la mejor mixtura del mundo, miraba el brazo que tenía abrazando a Alison por su espalda, y el brazo de Alison de nuevo posado en su cintura, se atrevió a volver a mirar a la cara a la rubia que tanto le gustaba y sintió que el corazón por un segundo se le detuvo, Alison tenía sus ojos abiertos, aun mezclados con un poco de sueño que al parecer aun poseía el cuerpo de aquella rubia con mirada angelical, entonces la sonrisa en la cara de Emily solo pudo darle una cosa: serenidad.

Tenias  que ser tu (EMISON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora