Eternos Rivales (Splatoon).

Capítulo 1. Primer encuentro.

**DISCLAIMER**

Es importante aclarar que esta historia es basada en el pequeño ship que surgió a partir de simples bromas entre el OC del usuario BluMasquerade (Bruno) y el mío (André).

Cómo mencioné anteriormente, Bruno no es de mi propiedad pero tuve el permiso para usarlo.

Otros OC's serán añadidos, tal y como la Inkling de otro usuario de aquí;  Jazminjo.

Créditos a las personas de respectivos personajes.

Contiene Chico x Chico. Si no es de tu agrado, no creo que sea necesario el leer esta historia.

>Lemon en futuros capítulos. (CHICO x CHICO)
>Yaoi

Capítulo 1.

Posiblemente este era uno de los pocos días en que cierto Francotirador podía liberarse del estrés continúo sobre aquel horrible rechazo por parte de la Inkling de quien estaba estúpidamente enamorado.

Tan sólo recordar el rostro de disgusto de la muchacha cada vez que este se acercaba para saludar y demás, sentía su corazón romperse en mil pedazos.

¿Qué era lo que hacía mal? Él sabía respetar su espacio, incluso le parecía extraño la reacción de esta cada vez que no recibía la atención por parte de él.

Simplemente lo traía como un gusano; arrastrándolo a su gusto.
Aún sabiendo lo mucho que jugaba con sus sentimientos, André tenía la esperanza de que algo pudiese ocurrir entre ambos.

Tristemente, aquella Inkling tuvo el descaro de restregarle en la cara miles de veces, ya sea directa e indirectamente el ya haber encontrado pareja.

Eso fue suficiente para causarle al pretendiente caer rendido, sin olvidar también una depresión gigantesca que lo dejó sin ánimos durante meses.

Sin embargo, estos ya mencionados combates eran el único factor que lo mantenía en pie y lo hacía olvidar por breves momentos tal amargo recuerdo.
Podrá ser un chico temperamental en cuanto se trate de combates, pero el que sea un ángel fuera de estos deja mucho qué decir.

Estaba listo para combatir.

Ocho calamares fueron quienes ingresaron a la sala, esperando a ser seleccionados para la formación de equipos al azar.
Sería una pena jugar contra Inklings mucho más experimentados, y más ahora que optó por utilizar su tan amado Cargatintas.

André, más que nadie sabía sobre cuán pésima idea era usar esta arma.
¿Pero qué más da? Son sólo batallas amistosas, no afectan el rango en que estés.

Por ahora, de su mochila comenzó a sacar las piezas del Cargatintas. Notaba desde su hombro como unos cuantos participantes se le quedaban viendo algo extrañados.

¿Será su corte de tentáculos? ¿Su ropa? ¿Tal vez su estatura?

El moreno suspiró, mirándose un poco justo antes de al fin analizar la situación y darse cuenta de lo que pasaba.

Ya sabía a donde esto iría.

ㅡ No les voy a robar nada. No soy esa clase de criatura. Si fuera así, creo que ya no tendrían nada en sus bolsillos.