MI PERFECTO EXTRAÑO

CAPITULO 13

Cap. 13

Madison por su parte, fue a su oficina y se esforzó al máximo por concentrarse en el trabajo; pero su ángel, su perfecto extraño; quien había resultado ser el hombre importante que ella creía, y lo peor era que estaba justo allí en el mismo lugar que ella; además él parecía muy interesado en ella, y ella realmente lo amaba, jamás se volvería a entregar a otro hombre, estaba segura que no existía ninguno como él; pero ella lo seguía viendo como inalcanzable, alguien lejos de sus posibilidades.

Ninguno de los dos fue a comer a medio día, cada uno permanecía encerrado en su oficina; él sumergido en el licor; ella haciendo cosas innecesarias para distraer su mente. Dave y Doug conocedores de lo que estaba sucediendo, entraron al despacho de Spencer pero este les dejó claro que no quería ver a nadie. Al finalizar el día, los dos amigos entraron a la oficina de Madison y se sentaron frente a ella dándose cuenta de que la chica vivía su propio infierno

- tú y Spencer son un par de tercos, orgullos y estúpidos – soltó Doug enojado

- ¿perdón...? ¡Señor McDonnell!

- y un cuerno Madison – espetó el más joven de los 3 amigos – se aman como pocas persona he visto que lo hacen, pero te niegas a que estén juntos por ideas que ni tu misma entiendes ¿en qué mundo vives?

- Doug tiene razón Madison – apoyó Finley – Spencer está bebiendo desde la mañana y hace poco que fuimos a verle, nos echó; dijo que va a donar todo su dinero a la caridad si a cambio de eso puede tenerte ¿en serio quieres eso? ¿Por qué te niegas a estar con él? ¿Acaso no le amas?

- por supuesto que lo amo, eso no pueden dudarlo – las lágrimas amenazaron con salir haciendo que sus ojos brillaran con intensidad – no sé qué hacer ¿ustedes creen que alguien tan insignificante como yo, pueda salir con alguien como él?

- tú no eres insignificante; en cuanto te conocimos entendimos el interés de Scott en ti, eres una mujer que vale mucho la pena; mi amigo tiene suerte de tenerte; por favor, no lo hagas más difícil para todos

- ¿para todos? – los vio perpleja

- sí, Spencer se está echando a la pena por ti, a nosotros nos preocupa lo que pueda hacer en su afán de quitar los obstáculos para poder estar contigo; además que de verdad queremos verle feliz, y por supuesto que contigo lo será, y tú también con él

- ¿dicen que aún está en su despacho? – ellos asintieron – quiero... voy a subir a verle – se levantaron de inmediato y salieron rumbo al ascensor privado; cuando llegaron al despacho abrieron con cuidado; dentro estaba Spencer sentado con el rostro inclinado y una joven inclinada ante él, intentando hacer que el hombre la besara, estaba tocándolo y provocándolo – ¿Qué cree que está haciendo? – preguntó Madison belicosa; podía ver que en este caso, él era inocente; la muchacha fue a responder con arrogancia, pero cuando se fijó en los acompañantes de Madison, guardó silencio; reconocía que se había metido en problemas

- ¿Qué hace aquí Leah? – Era una de las secretarias de presidencia, estaba al servicio de Dave – vamos salga de una vez, espero que tenga una buena explicación cuando se la pida – la joven salió y Madison dijo

- al parecer ustedes mantienen todo tipo de bestias hambrientas rondándolos; me quedaré a solas con él

- necesitarás ayuda para moverlo; como puedes ver, él está totalmente perdido

- está bien, ayúdenme, pero ¿A dónde lo llevamos?

- al pent-house de él; solo lo llevaremos al ascensor y de ahí será muy sencillo te lo aseguro – explicó Doug