Me Enamore de Él •[Zabdiel de Jesús]• TERMINADA

• CAPITULO 32•

  Narra Sabrina

Después de casi una semana en el hospital era la hora de volver a casa, aún sigo ciega pero es increíble como mis otros sentidos se han desarrollado en tan poco tiempo. La relación con Sam ha mejorado muchísimo ya no tenemos secretos que esconder y esto nos ha ayudado a unirnos más con mis amigas y con los chicos, por lo que tendré muchos ojos que me van ayudar mientras los míos vuelven a funcionar.

Estaba en mi cuarto escribiendo mis aventuras ahora que me falta un un sentido cuando alguien interrumpió mi momento de inspiración y toco la puerta.

-hola, hola, -dijo Zabdiel entrando-

-¡Hola Boricua!, -respondí-

-te vengo a llevar a un picnic

-¿un picnic?

-si pues muchacha uno en la playa

-pues vamo' alla, -le dije y el rió-

-se te da pésimo imitarme Sabrina

-lo sé, -le respondí riendo, me tomo por la cintura y me cargo- ¡hey! estoy ciega no invalida, puedo caminar, -el solo rió, salimos de la casa y  cuando llegamos a la playa me bajo, sentir la arena me hizo sentir tan bien que no pude evitar suspirar de la mano de Zabdiel camine hasta el lugar donde había preparado el picnic-

-¡Llegamos!, -dijo él- hay una manta en la arena, cojines y mucha comida, también flores, -se quedó en silenció-

-¿Qué?

-no sé cuáles son tus flores favoritas, en realidad no sé mucho de ti, -me ayudo a sentarme-

-eso se puede solucionar, amo los tulipanes y los girasoles

-bien, ¿gato o perro?

-gato,sin duda  -sonreí-

-amo cuando sonríes, -sonreí apenada y el me acarició el rostro- eres tan bella Sabri

-¡Ya basta! me lo voy a creer

-créetelo porque estoy completamente enamorado de ti desde que te vi por primera vez, -sonreí- Sabri casi te pierdo una vez por eso es que no quiero arriesgarme más a estar sin ti, quiero que estemos juntos siempre, cada minuto, que tus besos sean míos y los míos tuyos, quiero enamorarte cada día más hasta que estemos muy viejitos, quiero caminar por la vida tomado de tu mano, -mientras Zabdiel hablaba yo lo único que hacía era llorar-

-¿Qué hice para merecerte?, -le pregunte entre sollozos él me dio un beso muy leve-

-Sabrina Alcázar ¿me harías el inmenso honor de ser mi novia, mi amante, mi confidente, mi todo? 

-Zabdi, -dije lanzándome sobre él- ¡claro que si mi amor!  si quiero ser tú novia, tú amante, tú confidente, tú todo y quiero serlo porque para mí tú te convertiste en mi mundo entero, te amo

-te amo más mi Sabri, -tomo mi rostro entre sus manos y me beso, me beso como aquella noche, en la que me enamoré de él, cuando el beso termino, abrí suavemente los ojos...

-Zabdi

-¿Qué?

-puedo verte ¡PUEDO VERTE! -grite, podía verlo, sus ojos hermosos, su sonrisa perfecta, sus rulos, podía verlo y nunca había estado más feliz en la vida