El dueño de mi vida JB.

Capítulo 7

Estos días han sido raros, y aunque Justin y yo no hemos vuelto a tener relaciones igual siguen siendo raros.

-¿Cuál es tu postura favorita en la cama?

-Cerca de la pared porque ahí está en el enchufe donde puedo contestar el celular

El me quedo mirando serio pero en su cara se notaba que trataba de aguantar la risa, nosotros hemos seguido hablando normal, aunque no hemos vuelto a interactuar de manera romántica, aun asi seguimos hablando como si nada.

-¿Sabes Justin?, he notado que no tienes fotos de tu familia –dije mientras recorría con mi mirada cada detalle de la sala de su apartamento

Era viernes por la noche, acabamos de llegar del trabajo y como yo ayer hice la cena, hoy le tocaba a él, asi que yo me encontraba sentada en uno de los muros de balcón de su apartamento mientras lo veía cocinar.

-No soy muy cercano a mi familia

-Hasta tu familia le debes caer mal –no me miro solo guio su mano hacia a mí y levanto su dedo del medio lo cual me hizo reír-, eres una persona solitaria Justin

-No lo soy, muchas personas se preocupan por mí

- No importa cuántas personas se preocupen por ti... si no puedes hablar abiertamente con ellos sobre quién eres o que quieres en realidad, todavía estás solo

-¿Ahora eres mi psicóloga o que pasa?

-Quiero saber de tu familia

-¿Para qué?

-Somos esposos, debo saber algo –volteo a verme mientras me miraba mal al ver que me estaba aprovechando de la situación-

-Dime tu primero

-Está bien, mi familia es muy pequeña, mis padres están separados lo cual es malo, pero me dan dos regalos en navidad y en cumpleaños –dije sonriendo-, no tengo hermanos, ni primos, ya que mis padres son hijos únicos los dos, mis abuelo murieron, solo me queda mi abuela de parte de mi padre que es una loca total, ya tiene ochenta años pero en su alma fácilmente podría tener unos veinticinco –Justin camino hacia a mi completamente entretenido por lo que le decía- ella es como mi mejor amiga, a fin de cuenta me crie con ella ya que no viví con mis padres

-¿Y cuándo conociste a Sebastián? –Pregunto una vez que se colocó al frente mío entre mis piernas-

-Bueno Sebastián estudio conmigo todos mis años de colegio, pero ahí no fuimos nada

-¿Por qué?

-Él era el típico chico popular de la escuela y yo era la típica nerd –el me miro frunciendo el ceño-, ¿Por qué me miras asi?

-Doy lo que quieras pero eres parte de una apuesta para el

-¡Justin!

-¿Qué?, ¡oh vamos!, eso del chico popular y la chica nerd solo se da en libros o en el películas, y si se da en la vida es porque era una apuesta o solo quería quitarte tu virginidad, créeme, no te quiere

- Un día eres un amor y al otro el imbécil más grande de este planeta –el me sonrió-, y no, no soy una apuesta y si me quiere, nos hicimos novios mucho después de salir de la escuela, un día nos encontramos en un centro comercial y él se le veía algo cambiado, me conto que su madre murió y que gracias a eso le toco enfrentarse a algunas cosas que lo hicieron cambiar para bien, nos juntamos unas veces más y bueno, aún seguimos