-Jimin. ¿Por qué no deseas ser mi amigo?
El pequeño de los Kim observaba fijamente al enano frente a él, cabe decir que tenía un nudo en la garganta. Pero, como todo ser humano, solo deseas escuchar lo que tú realmente quieres oír, pero, no, Taehyung es un chico muy diferente, el, en su caso, quería oír con exactitud las palabras de su amigo, el cual, amaba con todo su pequeño, frágil y lindo corazón.
Kim Taehyung solo quería volver a ser amigo de Park Jimin.
-Por qué eres raro, apestoso, y todos me ven raro por tu culpa. Mejor toma una ducha.
Respondió firmemente el más bajo.
Era cierto, Kim Taehyung era un niño que todo el tiempo olía mal, razón por la cual nunca nadie se acercaba a él.Kim Taehyung vive a las afueras de la ciudad, en un pueblo, en este solo habitan pocas personas, personas de bajos recursos, Kim Taehyung junto a su hermano, Kim SeokJin fueron abandonados ahí mismo hace ya varios años, El mayor de los dos, SeokJin, es el encargado de cuidar de Taehyung desde el momento donde sus padres los dejaron, Taehyung con solo 4 años, SeokJin con 10.
Sus condiciones no son las mejores, pues su forma de vida tampoco, ni siquiera queda cerca. Cuando Kim Taehyung tenía 10 años, era un niño muy diferente, inteligente pero a la vez sensible y de cierta forma, era un chico inocente, a esta edad un día decidió apagar su gran duda buscando una respuesta de su Hyung, entonces este le pregunto a SeokJin sobre su madre, y su padre.
Desde este punto, todo se volvió un poco más confuso para Taehyung, el aún recuerda a su hermano como un ser fuerte, lleno de vida, pero, actualmente, Kim SeokJin simplemente se había convertido en una completa mierda.
Su hermano, le contestó con un simple
"Eres un mocoso desagradecido, no existe ningún padre, menos madre para ti, ni para mí, madura Taehyung. Creí que lo entendías ¿lo haces? Si es así, controla tus preguntas."Taehyung solo asintió.
Taehyung llegó a casa con las manos en los bolsillos, tenía mucho apetito, necesitaba alimentarse, pero como siempre, debía esperar a su hermano mayor para poder comer su única comida al día.
Patético.
Esa era la palabra con la que él se describía. Un jodido y estupido patético.
Estaba sentado en la esquina de su única cama, mientras en su mano sostenía una Banana, la cual por suerte encontró, sin más ni menos dio un mordisco, sintiendo placer en su cuerpo, decidió salir a caminar, igual, no era como si le importara a los demás o más bien, no era como si a Jin le importara.
Taehyung caminaba aún con su banana en su mano, aún no llevaba ni la mitad, pues, quería aguardarla para seguir comiendo en un rato más.
Un cachorro inútilmente se paró frente a él, ladraba y movía su larga cola. Taehyung sonrió.
Sin siquiera dudarlo, Taehyung le dio de su banana al cachorro.
-¡Te encontré!
Escucho un grito a lo lejos lo cual hizo que fijará su vista hacia el pelinegro de piel pálida que se acercaba con respiración agitada.
-VEN ACÁ NAMJOON
Hablo el pálido haciendo que el cachorro fuese a los brazos de este.
-Te extrañe mucho, no vuelvas a hacer algo así nunca más, ¿entendiste? Espera.. ¿Qué tienes aquí?
Min Yoongi frunció el ceño encontrando pedazos de Banana aún en el hocico del cachorro. Giró su vista mirando al chico que se encontraba mirando al suelo.
-¿qué mierdas le diste a mi perro?
Gruño el pálido hacia el más pequeño.
Este mordió su labio inferior fuertemente, estaba nervioso.-¿Acaso eres mudo?
Taehyung negó rápidamente con la cabeza.
-Dime, ¿qué mierdas le diste?
Taehyung carraspeó.
-Yo.. Yo le he dado de mi banana.
Un leve sonrojo cruzó por sus mejillas.
-No te acerques a el ni a mi, ¿entiendes?
Taehyung ni siquiera se tomó la molestia de intentar explicar, así que asintió finalmente.
Min Yoongi, era un jodido terco, por eso, en esos momentos, nosotros, los que le observamos desde lejos, no sabemos como explicarle que aquel pequeño frente a el, se convertiría en lo mas importante para el.