Los recuerdos son de agua; y a veces, estos nos salen por los ojos.
Para de llorar pequeño Nam, que en el pecado siempre te hundirás, ¿de que sirve lamentar?
Kim Namjoon llora, Kim Namjoon peca, Kim Namjoon, ¿eres tu quien lee esto?
Irónico, pero cierto ¿No? Kim Namjoon se encontraba completamente enamorado de Taehyung, su pequeño y dulce pecado. ¿Cómo podría cambiar esos ojos color miel por otra absurda y obstante mirada?
Kim Namjoon recordaba cada instante, momento y cada mínimo detalle de sus tantos pecados con Kim Taehyung, Namjoon le extrañaba, Taehyung le odiaba, Namjoon lo necesitaba, Taehyung lo apartaba.
Se sentía completamente abandonado, pero, ¿Cómo nosotros siendo cómplices y testigos de los pecados de Kim Namjoon podríamos explicarte que él siempre estuvo al fondo del abismo? ¿Cómo le explicaríamos que es un asco y que Kim Taehyung solo era otro amorío absurdo del joven con mucha historia por contar?
Kim Namjoon se caracterizaba por necio, y terco.
Por eso mismo, me parece difícil contar su historia, tiene miles de trabas, miles de desvíos, nadie sabe a dónde se dirige, ni el mismo, se enamoró de su hermano menor, violo sus propias ideologías, jugo a ser el infierno en llamas en un lugar donde solo existía la inocencia, y pureza.
Namjoon también era alguien muy inteligente, cabe destacar que ama la poesía, la mayoría de cosas que observa las contempla como obras de arte, cualquier cosa siempre intenta sacar su significado, nosotros, como testigos, te admiramos Kim Namjoon.
La caja de música toca miles de tragedias, ¿deseas escuchar o parar toda esa mierda? Recuerda, tu, eres el protagonista de esto, tu creaste tu propio mundo de pecados, desvíos y malos caminos, míralo a el, tan débil, tirado en esa cama, sonriendo, creyendo que todo lo que le haces sentir esta bien, que es lo correcto.
Cómo le explicarías a ese chico que eres una jodida mierda, que lo que haces esta mal, que la manera en que lo ves y lo tocas es un completo error, que estas cayendo en tu propia maldición, y que te estas hundiendo en tu propia canción, que ante los oídos de dios, solo eres un jodido pecador, que no te puedes controlar, que eres un monstruo, que en su mirada aprendiste lo que significaba el amar, y que ahora ya no puedes parar.