Harry Potter y la magia libre

Severus Snape y la carta

Severus suspiró cuando vio al gordo que se dirigía hacía él con esa maldita arma de muggles

-¿ Quien es eres?¿Qué estás estás haciendo en mi casa?¿ Qué es lo has hecho mi a petunia y a Dudley? no queremos tener nada que ver con gente como vosotros, así que marchate de esta casa por donde ha venido, AHORA MISMOOO - exigió Vernon intentando sonar firme e imponente.

Severus, no disimulo el desdenque se dibujó en sus ojos ante el patético hombre, no quería perder más tiempo del necesario, maldito Dumbledore mira que enviarlo a él, podía haber enviado a cualquier otro, no dudaba que para este caso tuviera demasiados problemas muchos estarían deseosos de conocer al estúpido chico que vivió, el hijo de ese pedazo de zoquete que era James potter, quería irse cuanto antes y no discutir con los tíos del maldito mocoso, sin mediar palabra desmayo al adulto que cayó al piso haciendo un gran estruendo, que muy posiblemente se oiría en casi todo el vecindario, sin perder más tiempo se dirigió rápidamente a la cocina pero era tarde, Harry Potter había desaparecido.

Harry corría,corría como nunca en su vida lo había hecho antes, no sabía quién era ese hombre y no quería saberlo, se suponía que vendría a por él la policía no un loco enviado por vete tú a saber quien, no tenía problemas con ninguna mafia o banda peligrosa,ni secta, al menos que el supiera, con concentrado estaba en su huida que no vio cuando el hombre que había irrumpido en su casa minutos antes de apareció justo delante de él y tomando lo de un brazo de desapareció con el de regreso a la cocina de la casa de sus tíos, cosa que hizo que entrará en pánico, era imposible, no podía escapar de ese hombre.

- ¿Quién es usted?¿Qué quiere y cómo ha hecho eso?¿para quién trabaja? Y no intente decirme que es un agente de la policía que no le creo, desde ya le informo que yo no hago " trabajitos" a nadie, y no estoy interesado en la salvación de mi alma inmortal - Harry miró de mala manera al hombre que estaba delante de él, mientras este lo ignoraba grosemente y se sentaba tranquilamente comiéndose las tostadas con mermelada de tío Vernon y lo apuntaba con un extraño palo.

- petrificus totalus, bien ahora que estás más calmado, soy el profesor Severus Snape, intento enseñar pociones a gusamocos como tú, trabajo para Albus Dumbledore, Director del colegio Hogwarts de magia y hechizeria y vengo para decirle que usted cuenta con una plaza en dicho colegio, finite incantament ¿alguna duda?- una vez dicho esto le tendió la carta y Harry la cogió con cuidado, como si fuera a explotar, tras leerla 3 veces,no pudo evitar echarse a reír.

- ¿De magia y hechicería?¿De quien ha sido la idea?le felicito, muy elaborada la broma, de verdad- respondió Harry mientras hacía trizas la carta.

- yo no bromeó Potter, ¿Cómo piensa que lo traje desde la calle hasta su casa? Al igual que yo es usted mago, aunque no espero nada de usted, es tan cabeza hueca como me imaginaba que sería- dijo mientras arreglabla la carta con un pase de varita, si por el fuera dejaba al mocoso hay mismo ,una vez rota la carta podía haber alegado que el chico se rehusaba a ir, pero Albus estaba obsesionado con maldito chico.

Harry impresionado mirando como la carta estaba como nueva como si hace unos segundos no la hubiera roto en pedazos.

- Vale, vale, vale... vale... vale. Pero yo no tengo dinero para comprar nada de esto, y mis tíos dudo que me lo paguen, ellos odian todo lo que salga de su definición de normal- comentó Harry sintiéndose mal de repente.

- No se preocupe por eso Potter, sus padres le dejaron dinero de sobra y yo lo llevaré al callejón Diagon, si usted lo desea- rezaba a Merlín que el chico no quisiera que lo acompañara, no queria estar mas del tiempo necesario con el calco del idiota, digamos, que no le había caído muy en gracia.

- No se preocupepor mi, puedo ir yo sólo- tras esto Severus dio las explicación, con alegría sin duda el último de los Potter era más tonto que sus padre y el no tendría que acompañarlo a por sus utiles, sin duda pasar un día completo con el hubiera sido insufrible, una vez dada la información necesaria a Harry para que pudiera ir al callejón Diagon y poder comprar lo necesario sin perderse,  una vez dejado todo en claro, Snape se desapareció dejando a Harry solo rodeado de familiares desmayados, que no sabía cuando hiban a despertar.

Aprovechando la situación Harry tomó la carta y la metió en uno de los bolsillos del pantalón y subió corriendo las escaleras, entró rápidamente en la habitación de sus tíos y tomó el dinero que tenían guardado para las emergencias, dejando a sus familiares tirados en el piso y sin importarle lo que pensaría policía cuándo llegara, sin pensarlo dos veces, salto el inmenso cuerpo de su primo y salió de la casa para tomar el taxi que lo llevaría a londres, quería conocer ese nuevo mundo cuanto antes, su mundo.