CAPÍTULO 9*

3.3K 181 2
                                    

[ E D I T A N D O ]

Lucía POV:

Este idiota estaba frente a mi puerta tocando como un loco desquiciado. Y está como que si no paso nada.

- ¿Ahora que quieres? - pregunté tajante. -

Se me quedó viendo como que si se le hubiera perdido algo.

-Quería decirte que... Bajes a cenar - el chico respondió titubeante -

Rode los ojos y busqué mis audífonos.

-¿Solo para eso tocaste la puerta desesperado? -pregunté de manera sarcástica.

Rió ante mi pregunta. Imbécil.

-Es que tenías los parlantes a todo volumen -respondió gracioso -

Hice una mueca de desagrado.

-Para ya, no quiero escucharte - exclame molesta. -

Volvió a reír, pero luego volvió a tener su actitud pedante y grosera.

-Solo baja a cenar, o te quedas sin comer - refutó tajante. -

¿Que creían?

¿Que me iba a confesar que le gusto? Este chico es raro , al primero que me trata con cariño y ahora me trata horrible.

*Que estúpida eres*

Bajé a cenar, literalmente molesta porque Christopher no es serio.

*Que comedor mas vacío*

-Tengo que hacer tareas, comeré en mi habitación, buen provecho - dijo tomando sus cosas y levantándose del comedor.

Caminó con su plato de comida, todo serio sin mostrar su sonrisa.

-¿Comeré sola? - pregunté molesta mientras me sentaba en la mesa. -

Hizo una mueca de desagrado.

-Si me quieres acompañar, no hay problema. - hizo un ademán con sus hombros-

-Baja las cosas, comeremos en el patio trasero - propuse, ya que era una manera de arreglar las cosas y aclarar todo esto.

-Está bien - asintió no muy convencido.

*Aquí aprovecharé para confesarle lo que siento*

Bajó con sus cuadernos, la guitarra y evidentemente su cena. Come ligero, pan con mantequilla y un vaso de leche.

-Déjame, te ayudo con esto - dije tomando sus cosas y caminando hacia el patio.

-Gracias, eres amable - dio una sonrisa ladina.

*Esa Sonrisa*

-Nos sentamos en el pasto? - pregunté dudosa y con las cosas en la mano, en parte me sentía muy nerviosa.

- Tu tendrás que lavar este pantalón, es mi favorito - rió gracioso y sentándose en el pasto.

¿Qué? ¿Lavar su pantalón?

Reí. De todas maneras él termina lavando su pantalón. Me daría vergüenza lavar su ropa, quien sabe que cosas se puede encontrar uno en los pantalones o en los calzones.

Comió y nos pusimos a hablar de puras payasadas y osea, es muy divertido. Luego de un par de minutos, sentia que ya era el momento de hablar con el de ese tema.

-Christopher, necesito decirte algo - interrumpí mientras apuntaba algo en su cuaderno de notas.

Dejó su cuaderno y me miró fijo.

-¿Qué pasa Lucía ? - preguntó serio y mirándome fijamente.

La estaba pensando en decirle, pensaba en su posible reacción, lo que dirá, pero aquí estoy, vamos Lucía, ten los pantalones.

-Es que quería decirte que...

Silencio.

-Que... ¿Te gusto verdad? - pregunte seria y sin hacer ningún gesto. - Creo que en alguien como tú es fácil notar eso. - terminé de hablar y sentía tranquilidad.

*Eso no me lo esperaba*

- ¿Tanto se nota? - respondió tajante de nuevo- En mi es difícil a veces lograr identificar si me atrae alguien o no.

Silencio.

-Que vergüenza - sonreí apenada.

Sentía mis mejillas arder, este chico me miraba como mi padre me mira cuando le digo que choqué el vehículo.

-No, tranquila, es normal en las personas, solo que... -pausó-

Silencio.

- ¿Qué?

Un silencio incómodo inundó el ambiente.

-Estoy confundido -respondió serio, tomó sus cosas y se puso de pie.

-Entonces, ¿Qué pasa? - pregunté

Me miró enojado, enfadado. ¿Acaso mi corazonada es correcta?.

-Me retiro, prefiero estar solo ahora.- dio la vuelta con sus cosas y dejó el plato y el vaso en el que había comido.

En parte, cuando el se molesta es cuando descubren su verdad. Pero no quería hacerme ilusiones.

-Christopher, no puedes escapar de lo que sientes - dije enfadada

Se detuvo en seco.

- ¿Pretendiendo saber todo no? - sonrió irónico - No Lucía, no es lo que piensas, ya dejame en paz con eso.

Me quedé inmóvil, no me quería ir. Así que, al ver que no me levantaba de donde estaba, se enfadó más y se retiró del jardín. Ay Lucía, que tonta.

Me acosté en el pasto, realmente mal, porque me enamoré de alguien que está confundido con sus sentimientos.

Ahora... ¿Qué va a ser de Christopher con esta confesión? ¿Cambiará conmigo? Dios, que tonta soy. Me levanté del pasto, abrumada, mi cabeza daba vueltas que ni sabia que hacer.


Capítulo Modificado el 2022.03.10

Aquí esta otro capítulo de esta sensual historia, tengo que actualizar dos mas así que actualizaré el viernes.

MI NIÑERO® [1] [TRILOGÍA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora