MI NIÑERO® [1] [TRILOGÍA]

CAPÍTULO 5*

[ E D I T A N D O ]

Narra Lucía.

Miré a Christopher tirado en el suelo, con golpes y ensangrentado, me preocupé y pensé: ¿Tiene enemigos en Morelos?

Salí de la casa de Yoandri en busca de Christopher quien estaba tirado en medio del jardín.

—¡Christopher! ¡Despierta ya! ¿Que te pasó? — grité con mis fuertes— Dios mío... ¿Que te hicieron?

Yoandri estaba estático.

—Llama a una ambulancia ya, Christopher no reacciona. ¡Apúrate joder! — grité desesperadamente

— Lucía. ¡Pará de gritar.! — gritó Yoandri — Tranquilizate Lucía, ya llame a la ambulancia.

(...)

—¿Los familiares de Christopher Vélez? — preguntó el médico

—Si, soy su... — me detuve para no decir la palabra.

— ¿Novia? — preguntó el doctor

Di una sonrisa falsa.

—No, pero le sonará ridículo pero el es mi niñero — respondí burlona.

El médico dio una sonrisa ladina. Luego bufó.

—Señorita, el joven Vélez esta grave, tiene muchos golpes y esta inconsciente... — pausó — Se recuperará pronto, no desespere.

(...)

Al Día Siguiente...

Pasé toda la noche en vela, el chico no despertaba. Una voz inundó mis oídos, era el doctor.

—Pase señorita, el joven quiere verla — anunció el doctor.

—Ya despertó? — pregunté

—Sí. —asintió el doctor

Entré al cuarto en donde estaba Christopher, realmente me dolía verlo golpeado, con moretones en todos lados, sus ojos hinchados y acostado ahí en esa cama.

—Christopher. ¿Quien te hizo esto? Por favor responde sincero — pregunté preocupada

—Fue un tal Adrián, creo que te conoce... — se quejó de dolor — Y no me explico como obtuvo mi número, fui hasta su residencia y ahí me amenazó y unos matones me golpearon.

—¿Qué pasa? — preguntó confundido

—Adrián fue mi novio, y es muy peligroso — respondí furiosa

Sonrió ampliamente.

—¿Te gusta el peligro? — preguntó gracioso.

—Me gusta la adrenalina y las personas como tú, curiosas. — respondí en un tono gracioso.

Se quejo de dolor, me acerque a recostarlo, porque tenía dos costillas fracturadas.

—¿Te gustan las personas como yo? — se rió — Vaya nunca pensé que dirías eso.

—Que modesto eres — reí — Al principio eras un grano en el culo, pero hay cosas que me gustan de ti.

—En serio, wow jamás creí que...

La puerta de la habitación empezó a abrirse, era el médico.

—El joven, tiene que descansar —interrumpió el doctor

—Luego seguimos, descansa Christopher, yo estaré para cuidarte — me despedí dulcemente para salir de la habitación.

—Gracias  — dijo amable

Este hijo de puta pagará lo que le hizo a Christopher, lo juro por mi vida. Me fui a casa, a buscar el arma, a este estúpido lo mato por que lo mato.

Salí a mi casa, realmente estaba furiosa porque este pedazo de imbécil había tocado a Christopher y casi lo mata.

Llegué a casa de Adrián, que por cierto esta igual que antes.

Tome el arma y suspiré.

Bajé del auto y toque el timbre del portón. Y el hijo de puta abrió y mostró su sonrisa que me daba asco.

—Mira hijo de tu puta madre, haz sido un grano en el culo, deja a las personas que están cerca mío o te vuelo las bolas de un plomazo — advertí apuntando con el arma.

—Deténte preciosa, no le haré daño a tu «niñero». — rió cínicamente

— Imbécil — dije acercándome a él — tengo los ovarios bien puestos para jalar el gatillo y arrancarte las bolas. Así que ya sabes Adrián, te alejas no te hago nada o si no te mato a plomazos — escupí furiosa
 
Fue lo último que dije y me fui en mi carro.

(..)

Gracias a

Candeeell

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