100...101...102...103...104 y mi mano resbala por el sudor. Frustrado pego una patada al sillón que está más cerca y logro volcarlo "Mierda", odio ser interrumpido cuando estoy practicando mi sesión de flexiones y al parecer el sudor es algo que no puedo controlar. Pero más que eso odio no poder controlar lo que pasa a mi alrededor.
Mientras estiro las piernas oigo como llaman a la puerta de la habitación, "¿que coño querrá a estas horas?".
-Pasa-no es una petición es una orden, me gusta ordenar y que me obedezcan.
Veo como asoma medio cuerpo solamente, y me mira con temor y tristeza, pero ni me imuto hace tiempo que todo me ha dejado importar.
-Daniel... hijo perdona por...- no dejo que termine de hablar porque me levanto de un salto hacia ella, y observo como se encoge en su sitio.
-usted no es mi madre ¿no le entiende?, ¿cuantas veces tengo que decirte lo mismo? Que me hayas sacado de ese horrible lugar no te convierte en mi madre, tu bien sabes que para mi no eres mas que una de esas piezas que uso para mi bien- le espeto a la cara.
Estoy furioso con esta mujer, nunca se da por vencida. Me mira alza la cabeza y cuadra los hombros para tratar transmitir una confianza que yo se que no tiene.
-Vengo a invitarte a mi boda, yo y Samuel nos vamos a casar-"mierda ¿Que?".
- ¿y a mi que? Todo seguirá igual- me encojo de hombros, tampoco es para tanto. Me mira durante un largo rato y suelta un suspiro.
-También quiero decirte que te he inscrito en el Instituto, se que no son de tu edad-"¿que cojones dice?".
-¿¡Que has echo que?!- le grito mientras doy un golpe a la pared y siento como un poco de pintura se desprende y cae al suelo.
La veo mirar con horror mi puño después me mira, está furiosa y lose.
-¡No me grites! ¡Este es el único trato al que hemos podido llegar con el juez para que no te mande a la cárcel, y es que tengas un titulo!- veo como su respiración se vuelve entrecortada por los gritos que está dando.
Sin decir nada más se da la vuelta y me deja parado en medio de la habitación. ¿es de coña no?...
La observo salir sin poder articular ninguna palabra. Mi vista viaja de mi puño a la pared y está vez el golpe esta destinado al espejo.
Observo mi reflejo en mil pedazos y grito por la frustración.
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Olvida Todo Conmigo
De TodoAveces las diferencias son más fuertes que los sentimientos... Y ellos dos lo saben. Son polos opuestos que se niegan a ser atraídos el uno por el otro. Los dos están destrozados, pero ninguno quiere sanar. Los dos tienen sus propios demonios a los...
