6. Nuevo...amigo?

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Eran las 7:00 am, de seguro era un lindo día y lo más seguro se preguntaban cómo la ciega sabe la hora? Fácil, si tu no tienes un despertador que suene a las 7 de la mañana todos los días, sin importar que sea fin de semana, quiero tu vida, a sinceridad, desearía levantarme tarde, pero siempre hay algo que hacer en este lugar. Luego de pensar lo triste que es mi vida, me levanté de golpe y me dirigí al baño para darme una ducha y lavar mis dientes, y sip, la ciega puede hacer de todo, durante 9 años sin ver la luz,  ya tenía que imponerme a todo.

Después de un largo baño salí de la ducha y me lavé los dientes, luego salí a vestirme, no se que ponerme, no se que clase de ropa tengo porque no veo nada, yo solo me lo pongo sin importar que convine, pero como viene una visita super "especial" debo de estar bien vestida, por eso llamé a mi tía de la forma más delicada que existe en la faz de la tierra para que todos vengan de forma rápida.

-Tía michiiiiiiii- grité a todo pulmón provocando que la casa completa gritara.

-Kenzie- todos gritaron al unisonido desde abajo y yo solo pegué mi mano en la frente.

-Necesito a la tía michi- suspiré para volver a gritar- es para vestirme- dije bien fuerte pero apenada a la vez y de repente se escuchó que tiraron mi puerta de golpe al instante de abrirla.

-Yo sé lo que te voy a poner- se escuchaba entusiasmada y si venia de la cocina debía de estar toda sucia y con una cuchara a mano, desde que tengo uso de razón ella hace eso.

-Será lo que me vaz a buscar, porque yo se vestirme sola y sea lo que sea, será ropa y es para mi "niñero" que me estoy vistiendo bien no para el rey de roma.

-Listo, ya está en tu cama, ahora voy hacer con los pancakes, te espero abajo cariño- se escuchó que me lanzó un beso y yo simplemente me abracé a mi misma en señal de que lo había atrapado.

Ya estaba lista, no se lo que tenía puesto, simplemente sé que estaba vestida y que seguro era bonito porque fué michi quien lo eligió. Bajé y saludé a todos como todas las mañanas, me senté en la mesa y esperé hasta que la tía michi trajera el delicioso desayuno de hoy.

-Permiso, no se entren en mi camino- gritó la tía como en todos los desayunos para que no hubiera un desorden- aquí están mis pancakes mágicos- dijo la tía entusiasmada.

-Hija y ¿a qué se debe tu felicidad? - dijo el abuelo algo extrañado.

-Adivinen a quién le dieron empleo- gritó feliz y todos estábamos felices.

-Que bueno tía- grité mientras sostenía un pedazo de pancake y me lo entraba en la boca- quiero más miel- dije  con la boca llena y escuché que los demás se rieron.

-¿En dónde está Matt? - dijo el abuelo.

- No lo sé,  aún no lo he visto- dijo la tía michi, se escuchaba preocupada- kenzie.

-Si?

-¿Puedes hacerme el favor de traer a Matt? Debo llevarlo al aeropuerto casimente y aun no baja a desayunar.

-No lo sé tía,  el está enojado conmigo, hasta me llamó error e impedimento de su vida, no me hará caso- dije algo triste.

-Oye princesa- me dijo el abuelo- no le hagas caso a lo que te diga matt, el está enojado y cuando las personas se enojan...- lo interrumpí.

-Cuando las personas se enojan revelan todo lo que le querían decir a la otra en el instante que no pudieron- dije triste mientras jugaba con el desayuno.

-No, yo iba a decir que cuando las personas se enojan dicen cosas que le llegan a la mente al instante para tratar de herir a otras, pero en la realidad esa persona te quiere bastante porque comienza a desquitarse contigo para luego arrepentirse y pedir perdón.

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