Del Odio al Amor. | Drake Bell [EDITANDO]

Capítulo 23: Hagamos un trato, seamos amigos.

Anna.

Dio por fin la hora y empezamos a buscar a Drake y a (tn), por todos lados como lo habíamos planeado, pero algo no salió bien ya que después de rato nadie los encontraba. Llame a Drake pero no me contestaba y el chofer nos dijo que teníamos que irnos ya que ese lugar era algo peligroso de noche. Me preocupe, pero no tuvimos más remedio que regresar, ahora ¿qué le diré al director?

Tú.

Después de esa pequeña siesta desperté. Bell ya estaba más tranquilo, yo seguía ahí sin decir nada. Hasta que se acerco a mí y se sentó a mi lado.

Drake: ¿Por qué tan seria (tn)? -se acomodo en el asiento-.

Tú: Porque... así soy.

Drake: Claro que no, eres más divertida. Te conozco -aseguro-.

Tú: -Reí sarcástica-. ¿Otra vez con tus choros?

Drake: Hablo en serio -respondió frío-.

Tú: Haré como que te creo. No puedes decir que me conoces, cuando apenas es la segunda platica "decente" que tenemos.

Drake: Lo sé. Pero siento como si te conociera desde hace mucho tiempo.

Tú: ¿Hablas en serio? -pregunte aburrida-.

Drake: Sí -aseguro con una sonrisa-.

Tú: ¡Pff! A parte sino mal recuerdo, te dije que no me molestaras -me cruce de brazos-.

Drake: Pero eso era hasta ayer.

Tú: Ash, ¿y no puediste haber aguantado un día más?

Drake: ¿Por qué me tratas así? ¿He hecho algo que te moleste? Me gustaría saberlo -cambio el tema radicalmente-.

Tú: Sí, de hecho sí -dije grosera-.

Drake: ¿Qué? Dímelo.

Tú: No sé cómo se le llame, pero como que hipnotizas a las mujeres y no solo a ellas, a todos, para que estén tras de ti... gracias a eso estoy aquí, cuando debería estar en otro lado.

Drake: ¿Has escuchado el dicho "No juzgues a un libro por su portada" ? Eso me pasa a mí, todos me juzgan sin conocerme.

Tú: Yo si te conozco para que veas y más de lo que puedas imaginar. Gracias a Anna -asegure-.

Drake: ¡Claro que no! -dijo ofendido-. Todo lo que lees en revistas no significa nada. Para realmente conocer a alguien hay que tratarlo, así que no puedes decir eso.

Tú: Pues nadie cambiara eso.

Drake: Hagamos un trato, ¿sí? -propuso y yo ya sabía sus "tratos"-.

Tú: ¿Cuál? ¿Qué ahora si por fin me dejes de molestar? -pregunte irónica-.

Drake: (tn) en serio, déjame explicarte por favor -suplico-.

Tú: Esta bien, habla antes de que me arrepienta.

Drake: Permíteme ser tu amigo y sí después de unos meses sigues creyendo que soy 'tan mala persona' pues yo prometo no volverte a 'molestar', pero sino pues seremos amigos, ¿te parece?

Tú: Mmm... ¿puedo decir que no? -me encogí de hombros-.

Drake: (tn)... -alargo-.

Tú: De acuerdo, acepto.

Drake: Gracias -sonrió-.

Pasaron unas horas. La temperatura estaba bajando más y más, comencé a temblar soy una persona demasiado friolenta. Bell se percato de que no paraba de temblar.

Drake: Ponte mi chaqueta -dijo-.

Tú: No, no quiero que te resfríes -me apresure a decir-.

Drake: Por eso no te preocupes, estaré bien -aseguro y se la quito-.

Tú: De verdad no -me ignoro y la puso por encima de mis hombros, yo estaba sentada en el sofá conlos pies pegados a mi cuerpo-.

Drake: (tn)... habíamos quedado en ser amigos -menciono-.

Tú: Sí. Pero, ¿eso que tiene que ver? -pregunte sin entender-.

Drake: Pues que los amigos hacen este tipo de cosas, ¿no?

Tú: De acuerdo, no discutiré más -sonreí, él hizo lo mismo-.

Drake: Gracias. Iré a ver si tienen algo arriba -se levanto-.

Tú: Sí.

Bell fue a buscar cobijas y si encontró algo, al parecer la cabaña estaba abandonada pero estaba amueblada y tenía muchísimas cosas que servían. Yo a pesar de la pequeña siesta que dormí, ya tenía sueño.

Drake: Encontré esta cobija -me la puso encima sin quitarme su chaqueta-.

Tú: Gracias -él sólo sonrió-. Bell tengo sueño -me queje-.

Drake: ¡Por Dios (tn)! Casi acabas de despertar -se sorprendió-.

Tú: -Reí-. Lo sé.

Drake: Bueno pues arriba hay una habitación, si quieres tu duerme ahí -propuso-.

Tú: ¿Y tú? -me preocupe-.

Drake: Duermo aquí en el sillón -señaló-.

Tú: Pero pasaras frío, la temperatura ha bajado mucho y seguirá así -mordí mi labio-.

Drake: No te preocupes -aseguro guiñándome un ojo-.

Tú: Tú te preocupas por mí, ¿por qué yo no? -sonreí y se rindió-.

Drake: Está bien, entonces, ¿por qué no dormimos juntos? Pero claro de diferente lado, tú con la cabeza de un lado y yo del otro -mencionó-.

Tú: Suena bien

Drake: Pues vamos.

Eran aproximadamente las nueve, tomamos nuestras cosas subimos, acomodamos la cama y nos acostamos. Me quede profundamente dormida.

Anna.

Llegamos al colegio y todos bajaron, por suerte el Director no estaba y regresaba hasta mañana en la tarde, pero casi no pude dormir, me atormentaba la idea de que algo les pasara.

Drake.

Al día siguiente...

Desperté temprano eran las ocho, (tn) aún seguía dormida, se veía linda. Después de admirarla por un rato. Busque entre las cosas de (tn) su comida y también saque mi comida. Baje a la cocina para buscar la manera de calentar la comida, quería impresionar a (tn).

Continuará...

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