Capítulo 101: No te vayas - Parte uno.

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Kat.

Regrese a casa. Papá y Carlos estaban en la sala viendo televisión, así que me acerque a ellos y me quedé ahí por un momento, me seguía sintiendo cansada; entonces más tarde me despedí y subí a mi habitación para proponerme dormir.
Cambie mi ropa por mi pijama, levanté las cobijas y me introduje bajo de ellas.

•••

-¿Mamá? ¿Qué haces aquí? -pregunté después de verla frente a mi, estaba bastante confundida, sabía que ella ya pertenecía a otro mundo.

-Vengo a despedirme de ti.

-¿A despedirte? Se supone que tú ya te marchaste hace tiempo -mencioné aún más confundida.

-Sí, pero seguía aquí... cuidando de ustedes. Déjame decirte que estoy feliz de que hayas podido hacer las pases con tu padre. Los tres merecen estar juntos, más ahora.

-Creo que mucho tuvo que ver Drake.

-Hablando de Drake... no sabes lo feliz que me hace, también, saber que serán padres; aunque sigo sin entender porqué están separados -dijo.

-Mentiras, solo eso.

-Pero ya te explico todo, ¿no? ¿Por qué no lo perdonaste? -preguntó.

-Por qué no es tan fácil mamá, supongo que tú debes entenderme. Pasamos por algo similar...

-Sí, tal vez. Aunque a pesar de todo, yo siempre perdone a tu padre -comentó.

-Es que no lo entiendo... -interrumpió.

-No hay mucho que entender, hija. Considero que lucharon mucho por llegar hasta aquí, como para que lo pierdan de la nada... no deberías dejarlo ir.

-Él dijo que estará siempre para mí.

-Tal vez sí, pero no de la manera que tú esperas.

-¿A qué te refieres?

-Se irá, lejos... dice que son cosas del trabajo pero también lo está tomando como pretexto para huir de sus heridas -explicó.

-¿A dónde irá? -pregunte confundida.

-Tengo que irme, cariño -beso mi frente-. Sigue luchando, te amo.

-No, mamá. Espera... -y entonces se desvaneció.

Desperté exaltada, mi corazón latía muy rápido y mi respiración era muy constante. No entendía nada, pero sabía que esto había sido una señal.
Quería tratar de seguir durmiendo y la verdad es que me estaba costando mucho trabajo, estuve dando un par de vueltas en la cama, aunque era algo complicado con esta panza de 6 meses.
De repente sonó mi celular, me senté en la cama, había pasado solamente media hora de que me quedé dormida y soñé con mi madre. Tomé el celular y era Robin, contesté.

-¿Bueno? -respondí con mi voz un poco ronca.

-Kat, ¿estás bien? -preguntó.

-Sí. Solo que acabo de despertar -tocí un poco para que cambiará mi voz.

-Lamento haberte despertado -se disculpó.

-Descuida... ¿todo está bien?

-Kat... tal vez no sea yo la indicada para decirte esto, pero Drake planea irse y quizás no regrese por un largo tiempo -comenzó a decir-. Sé los problemas que han tenido pero si sabes la verdad y aún lo amas, ¿por qué no se dan otra oportunidad? Pueden ser muy felices los tres, ¡no lo dejes ir!

-¿A qué hora sale su vuelo?

-Mañana, a las tres de la tarde.

-Aeropuerto Internacional John F. Kennedy -se apresuró a decir-. ¡Por favor prométeme que harás algo!

-Lo intentaré.

-Bien. Descansa.

-También tú -colgué.

Deje el celular en el buró de a un lado y la verdad es que ya estaba muy inquieta... el sueño con mamá y ahora esto me habían puesto a pensar mucho. Me acomode de nuevo en la cama y trate de volver a dormir, aunque debo admitir que me costó un poco de trabajo.

Drake.

Empaque lo necesario después de llamar a mamá. Cuándo terminé, baje para cenar algo y decirle a Linda mis planes. Tampoco estaba totalmente de acuerdo pero me apoyaba, regrese a la habitación para disponerme a dormir. Me acomode en la cama y al instante me quedé dormido.

Al día siguiente.

Mi alarma sonó temprano, aún tenía algunas cosas pendientes por hacer. Desayuné, salí al supermercado para dejarle algo de despensa a Linda, sobretodo la comida para los cachorros. Regrese y me di un baño, baje las maletas y las metí en el auto. Me dispuse a esperar en la sala a que me diera la hora apropiada para irme.
Tomé mi celular y al desbloquearlo encontré de fondo de pantalla una foto de ella, aún no la había cambiado y seguía sin hacerme a la idea de irme y dejarla ir... abrí el chat y regrese a los primeros mensajes que solíamos mandarnos, era feliz, demasiado feliz.

Habíamos acordado no hablarnos dentro del colegio, solo por mensajes de texto y con nombres diferentes. Ella era Miranda y yo su hermano Carlos, la semana se me había hecho muy aburrida, de cierto modo ella le daba un sentido diferente.
Así que no lo dude y le envié un mensaje para citarla en la plaza cerca del colegio; era sábado y podíamos aprovechar.

¿Qué tal si nos vemos en la plaza que está cerca del colegio? Estoy aburrido y esta semana se me ha hecho ¡ETERNA! Si aceptas nos vemos a las 4pm. Te quiere Carlos.
Enviado a las 13:58pm

¡Claro! Entonces nos vemos a las 4 jaja te quiero más. :)
Enviado a las 13:58pm

No tardó en contestar y entonces me apure para ir a nuestro encuentro. Ese día la invite al cine y no la estábamos pasando muy bien, al final del día... por fin la bese por primera vez.

Algunas lágrimas rodaron por mis mejillas al recordar, las limpie y fui con Linda para despedirme. Tomé mis maletas y salí rumbo al aeropuerto.

•••

Me encontraba en la sala de espera para abordar, de repente se escuchó en el altavoz: pasajeros con destino a Los Ángeles, favor de abordar por la puerta 3.
Me levanté de mi lugar, tomé mis maletas y lentamente camine hasta la puerta 3, la fila era larga, así que me formé, a lo lejos escuche mi nombre con una voz agitada... pero no hice caso creí estar alucinando, aunque era insistente, volteé y ahí estaba... aún con su voz agitada y repitiendo Drake, no te vayas, por favor, no te vayas.

Continuará...

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Del Odio al Amor. | Drake Bell [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora