💋C U A T R O

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"Oh you want what you can't have but you've got all the things you need."

Copia barata de Logan Paul: ¿Quieres ir por un helado?

Yo: Lo siento no puedo. 

-Ya esta. - dijo Lina al terminar el papeleo para la preparatoria a la que atendería.

-¿Esta cerca? - pregunté. -¿Voy a caminar todos los días? ¿Qué tan grande es? ¿Cúantos estudiantes hay en m -

-Una pregunta a la vez, Skyla. - Me interrumpio Lina. - Si, esta algo cerca. No, no tienes que caminar, puedes irte en el coche. Esta bastante grande. Y no tengo ni la más remota idea de cuantos estudiantes hay en tus clases, pero seguramente serán alrededor de veinte.

-¿Crees que Alex se enojará conmigo? - pregunté.

-No lo sé, cariño. Tú lo conoces mejor que yo. Pero creo que entenderá.

Asentí con la cabeza. Se sentía bien finalmente tener personas que me entendieran además de Alex y Mia a mi alrededor.

-Gracias, Lina. - dije y regresé a mi habitación.

Tomé mi celular de mi escritorio y llamé a Mamá. Le conté todo sobre nuestra vida en casa de Papá. Me hizo un millón de preguntas y trató de convencerme de que estaría mejor con ella y Tom, pero sabía que no era así. Tom no era un mal padrastro, pero tampoco era el mejor, y jamás remplazaría a mi papá. Me había cansado de que tratara constanmente de tomar su lugar. Me había cansado de los problemas en casa.

Sabía que con Papá las cosas cambiarían, y por una vez en mi vida estaba en lo correcto. La casa era más tranquila. No me podía cansar de las cenas familiares que hacía mucho no tenía. Lina y Papá eran increíbles en la cocina. El ambiente simplemente era mejor en casa de Papá. Se notaba que él y Lina se amaban, pero también se notaba que nos amaba.

-¿Ya sabes a que preparatoria vas a ir? - preguntó Mamá.

-No. - contesté.

Jamás había sido buena mintiendo, pero enserio no quería contarle a Mamá antes de contarle a Alex. Me sentiría como una traidora.

-Pues tienes que comenzar a buscar una, Skyla. - dijo con el tono de voz que usaba cuando hablabamos de Papá. -Dile a tu padre que necesitas una educación.

-Estoy bastante segura de que él sabe eso. - dije. Me dí cuenta de que mi propio tono de voz había cambiado. Hablar acerca de él con Mamá jamás era placentero. - De hecho él y Lina nos enseñaron las preparatorias de la ciudad y las clases que ofrecen. Encontré una que parece ofrecer un buen programa de artes. - Sabía que no era una buena idea hablar de mis planes con ella hasta haber hablado con Alex. De hecho no era una buena idea hablar de mis planes con ella del todo.

-Skyla, el arte no es tan importante como tu educación. Deja de basarte en el programa de arte que ofrecen y concentrate en lo que de verdad importa. Debes saber si tiene buenos maestros, si las instalaciones son buenas y confiables, cuantas clases tienes que tomar, que actividades extracurriculares ofrecen... - Discutir con Mamá no valía la pena. Eso lo había aprendido con el paso de los años. -¿Skye? ¿Estás esuchando? - Siempre había querido que las cosas simplemente volvieran a ser como alguna vez habían sido, pero en ese momento me arrepentí de todas las noches que había pasado llorando, de todas las veces que había pensado que mi vida sería mejor con los dos juntos, de todas las veces que había tratado de convencer a Papá de regresar a casa, pero más que nada de todo el tiempo que había desperdiciado tratando de complacer a Mamá. Jamás sería lo que ella quería que fuera, y ya era tiempo de que lo aceptara.

-No importa si lo estoy haciendo o no, ya sé todo lo que vas a decir. Sé que no te importa mi pasión por el arte. Sé que no entiendes que tengo muy claro lo que quiero hacer con mi vida. Sé que no tienes ni la menor idea de quien es mi artista favorito. Sé que quieres que sea una empresaria o lo que sea. Sé que lo que soy, literalmente, no te importa y que quieres que lo cambie pero no lo voy a hacer. Sé que lo que yo quiero no te importa. ¿O no es así, Olivia O'Brien? Perdon, Olivia Richter. 

Hubo silencio por unos minutos y finalmente terminé la llamada cuando perdí la esperanza de obtener una respuesta. Traté de contener las lágrimas pero fue imposible. A pesar de todo lo que había pasado, me importaba lo que Mamá pensaba de mi, y me dolía decepcionarla. 

Alex llamó a mi puerta y sin esperar por una respuesta entró a mi habitación. Me voltee hacia la ventana y limpié mis lágrimas. 

-¿Qué fue todo eso? - dijo - Te escuchabas hasta la cocina.

-Nada. - dije volviéndome hacia él, sonriendo.  Aún no estaba lista para contarle. -Vamos por un helado. Quiero que conozcas a alguien.

Encendí mi celular y le mandé un mensaje a Ethan.

Yo: Cambié de opinion. Nos vemos ahí en 15 mins. Llevaré compañia.

-¿A quien vamos a ver? - preguntó Alex.

-Callate y camina.

Alex siguió preguntando y yo lo seguí ignorandolo. Después de caminar por un rato finalmente llegamos. La verdad no sé porque acepté ir por un helado después de todo lo que había pasado en casa. Creo que esperaba que Ethan y mi hermano ayudarán a sacarlo de mi mente.

-Llegamos. - dije.

Miré a mi alrededor tratando de encontrar a Ethan, pero parecía que aún no estaba ahí. Alex y yo ordenamos nuestros helados y elegimos un lugar para sentarnos. Unos minutos después llegó Ethan. Nos vio y se acercó.

-Hola, Sky.

-Hola. - dije sonriendo. Voltee a ver a Alex quien parecía confundido y recordé que no conocía a Ethan. - Ethan, este es Alex, mi hermano. Alex, Ethan.

Alex, Ethan y yo pasamos la tarde conversando. Alex y Ethan parecían agradarse, lo cual me hacía feliz. Sabía que Alex necesitaba un buen amigo, y tal vez Ethan podría serlo.

Cartas AnonimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora