Part 8: Like real people do

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DOS SEMANAS DESPUÉS

NARRA EMMA

Desperté esa mañana y comencé a preparar mi mochila para ir a la escuela, fui a la cocina y me encontré a Marto desayunando con Simón.

-Buenos días, chicos.-les dije con mi mochila sobre mis hombros, sacudí el cabello de Marto y besé la mejilla de Simón.

-¿Te vas ya?-me preguntó Simón y yo asentí

-Sólo voy a entregar un ensayo y después...-miré mi reloj- Vacaciones.-suspiré

-Pero estás en pijama.-dijo y Marto rió

-Linda pijama, por cierto.-me dijo Marto y los reímos

-¿Cómo es que ustedes ya pasaron todas las materias y yo no?-dije pensativa

-Porque somos geniales.-dijo Marto y yo negué con una sonrisa, ambos chicos se miraron por un momento

-¿Quieres que te acompañe?-se ofreció Simón

-¿No tienes problema con acompañarme?-pregunté y él negó, miré que él también estaba en pijama

-Para nada.-dijo tomando su taza de café- Después de usted, señorita.-me dijo haciéndome sonreír 

-No quemes el departamento.-le dije a Marto antes de que ambos saliéramos al elevador

-¡Con cuidado, chicos!-nos dijo

Ambos entramos al elevador sin hablar, al menos no hasta que Simón aclaró la garganta haciendo que lo mirara.

-¿Qué?-le dije y él me miró extrañado

-¿De qué?-dijo con gracia y ambos reímos

-Nada... Sólo que siempre haces eso cuando quieres llamar mi atención.-le dije cuando se abrieron las puertas del elevador y caminamos por el recibidor

-¿En serio hago eso?-dijo frunciendo el ceño y yo asentí- No lo había notado...-rascó su nuca despeinando más su cabello

-By the way...-agregué- Linda pijama.-y quité la alarma del auto, ambos entramos

-Es extraño cuando me hablas en otro idioma.-me dijo mientras yo manejaba, hice una mueca

-No siempre puedo controlarlo.-dije entre una leve risa -Pero si te molesta, puedo evitarlo...-dije- Tratar de evitarlo...-corregí pero Simón intervino rápido

-No me molesta, para nada... Está perfecto... No me incomoda.-soltó una risa nerviosa haciendo que lo mirara

-¿Todo bien?-le pregunté y él se removió en el asiento- Sabes que puedes hablarme de lo que quieras.-dije tocando su mano

-En realidad, sí quiero hablarte de algo...-dijo mientras nos detuvimos en un semáforo, asentí

-Pues... adelante.-le dije con una sonrisa para animarlo, él aclaró de nuevo la garganta

-¿Recuerdas que te hable de la novia de Marto y... de nuestros amigos de toda la vida?-asentí

-Ahá...-dije mientras llegábamos a otro semáforo pero después fruncí el ceño- ¿Pasó algo?, ¿Están bien?-pregunté lentamente

-Sí y sí.-dijo y reí un poco

-A ver, explícame.-le pedí con un toque de humor, él sonrió un poco

-Marto les escribió un par de cartas desde que llegamos, y... ellos quieren venir.-dijo de golpe al final, fruncí un poco el ceño

-Y... ¿Eso te preocupa o te alegra, Monchi?-pregunté con media sonrisa al notar su nerviosismo, él se percató de ello

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