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Capítulo 4

-Te dije que te quedaras- Gruñe el macho en la puerta hacia alguien aun costado que los que estaban dentro de la sala no podían ver.

-Corrección- Replica la voz de una mujer cada vez más cerca -Me dijiste que me encerrada hasta que salieran del centro médico, y tu suéltame, no me puedes impedir llegar a mi compañero-

De pronto una mujer aparece a un lado de la nueva especie en la puerta y esta interpone su cuerpo para evitar que entre a la habitación.

-Hola- Dice la mujer sonriendo a las personas dentro de la habitación -¿Todo bien?-

-Cálmate- Dice Mary cuando 690 gruñe a la mujer.

-Si, 690- Coincide la mujer frunciendo el ceño -Cálmate, estoy aquí para ayudarte-

-No necesitamos ayuda- Dice el macho mostrando los dientes -Necesitamos que se vayan y nos dejen solos-

-Ok, veo que no puedo hablar contigo- Dice suspirando antes de mover su vista hacia la mujer que se veía detrás del macho -¿Mary verdad?

-Si- Dice dudosa la joven.

-¿Cómo estas Mary?- Le pregunta sonriendo para darle tranquilidad -¿Estás bien ahí donde estás?-

-No te acerques- Gruñe el macho en la puerta cuando la mujer intenta pasarlo para entrar a la habitación.

-No me gruñas- Le replica la mujer frunciendo el ceño - Y déjame hacer mi trabajo. Esa nueva especie necesita mi ayuda ¿O acaso yo no soy la terapeuta de ustedes?-

-No dejare que te acerques a una especie inestable- Dice el hombre mostrando los dientes.

-Él no es inestable- Dice la mujer poniendo sus manos en la cintura -Lo he estado evaluando y me parece bastante racional, solo está a la defensiva porque lo estamos presionado mucho-

-No me interesa- Dice terco la nueva especie -No te acercaras a él y punto-

-¿Qué te he dicho de darme ordenes?- Dice frunciendo el ceño -Te amo y todo eso, pero no dejare que no me permitas hacer mi trabajo. Ahora si quieres ayudar siéntate en el piso y pon las manos en el suelo, tu estado de alerta solo lo pone más a la defensiva y empeora las cosas-

El macho gruñe, pero hace lo que le dijo, interponiendo su cuerpo frente a la mujer para evitar que entre claro. Suspirando la mujer miro dentro de la habitación, esto sería complicado, sin querer habían complicado las cosas y ahora sería más difícil hacer que 690 confié en ellos, pero siempre podría usar a la mujer para lograr su objetivo, si era su compañera lo tendría comiendo de la mano y haciendo todo lo que ella decía.

-Yo soy Joyce Yards, la Psicóloga de la ONS- Se presenta mirando a las dos personas en la habitación -¿Cuál es tu nombre?-

-María Oliver- Se presenta, intentando pensar porque habían enviado a una Psicóloga a hablar con ella, tal vez piensen que estoy loca.

-Bien María ¿Puedes pedirle que se aparte un poco y se calme?- Pregunta mirando un momento a la nueva especie en posición de ataque antes de volver su vista a ella.

-Por favor 690- Pide María acariciando la espalda -Ellos solo quieren ser nuestros amigos-

690 no deja su posición, pero relaja su cuerpo y apoya sus manos en el piso poniéndose en cuclillas. Joyce sonríe de forma imperceptible, por lo visto no se había equivocado y podía manejar al macho a través de la mujer.

-Supongo que eso es un progreso- Dice antes de mirar para un costado y hablar con alguien que no pueden ver -¿Podrías alcanzarme una silla? Y que nadie entre aquí hasta que desenredemos esto, ya se ha metido la pata lo suficiente-