Mermaids. «JM vs JK»

( 3 )

¢αρíтυlσ 3| мєямαι∂s

     — Un minuto más, solo uno...

     Las agujas del reloj parecían permanecer estáticas solo para joderme, sinceramente, no sabía por qué me molestaba en prestarles tanta atención, si tenía dieciséis años y aún no sabía leer la hora de un reloj analógico.

     Triste, ¿verdad?

     Dejé de rogarle al reloj de pared que adelantase el tiempo y me recosté sobre el respaldo de la silla dándome al fin por vencida.

     Contemplé el techo durante minutos, no podía estar más aburrida. Mientras buscaba imperfecciones en la pintura blanca, caí en la cuenta de que esconderme durante todo el día en aquella sala de estudio no serviría de nada, ya que, no podría evitar a Jungkook el resto del año.

     Compartíamos absolutamente todas las clases menos la de inglés, en la que los alumnos eran divididos en tres niveles: el estándar, los que pertenecían aquí, tenían un nivel bajo bajísimo, lo llamaban “estándar” para no ofender; el intermedio, eran aquellos que podían sobrevivir sin subtítulos; y finalmente el avanzado, lo mismo de antes, solo que los que van a esta clase, entienden inglés de verdad.

     Yo pertenecía al nivel intermedio, y JungKook... Él solo sabía decir “Pardon?”.

     Resoplé cansada en cuanto el recuerdo fugaz de la charla nocturna de ayer con Jimin, se coló en mi mente sin previo aviso, tenía muchas asuntos importantes que resolver y lo sucedido con él la tarde anterior, no me dejaba pensar con claridad.

     “Lo sabrás cuando tengas la medalla colgando de tu cuello”, con solo aquella frase había conseguido dejarme traumatizada hasta el momento. Así era él, de alguna u otra forma, siempre acababa siendo el centro de todo.

      Una corta vibración sobre mi abdomen hizo que me sobresaltara, era obviamente mi móvil, lo tomé del bolsillo de mi chaqueta y lo desbloqueé tras dibujar un simple patrón.

     Tragué saliva al ver la procedencia de la mayor parte de mis notificaciones, tenía cinco llamadas perdidas y veinte mensajes de él. El teléfono volvió a vibrar de nuevo. Veintiuno.

     Estaba definitivamente jodida.

     Jeon Cena: ¿Dónde estás?

     ¿Por qué no has venido a clase?

     ¿Estás bien?

     ¿Becky?

     He llamado a tu casa, pero, creo que tu abuelo o me ignoró o salió a pescar temprano.

Tienes 5 llamadas perdidas.

     Me estás preocupando, ¿va todo bien?

     ¿Lebecca?

     **¿Rebecca?

     Si estabas enferma podrías habérmelo dicho esta mañana, me pasé veinte minutos esperando frente a la puerta de tu casa y ni siquiera abriste la ventana para que pudiera entrar a tu cuarto.

     Me hacía ilusión ir contigo hoy...

     Una marea de culpabilidad me abatió haciéndome entrar en razón. Estaba siendo muy exagerada, todavía no había pasado nada y ya me estaba escondiendo como si fuera una fugitiva. Deslicé mi dedo por la pantalla hasta leer el último mensaje, el que había mandado hacía ya exactamente un minuto.

     Jeon Cena: Las clases son aburridas sin ti, así que iré a la sala de estudio para echarme una siesta, espero que te vayas encontrando mejor.

     — Mierda —dije por lo bajo.

     Antes de que pudiera plantearme comenzar recoger mis cosas para huir por la ventana, la puerta se abrió de par en par dejando ver al chico que llevaba evitando durante todo el día.

     — ¿Becky? Pensaba que estabas enferma... Pero tú... —se había dado cuenta al instante de por qué estaba allí— ¿me estabas evitando?

     No fui capaz de descifrar su expresión, jamás habíamos estado en una situación como aquella. Lo que sí tenía claro, es que no estaba muy contento.

    

Ahm... Ja... Ja... *risa incómoda*, he tardado el doble, hahaha... Rompí mi propio récord y encima ni sale Jimin en el capítulo, hahaha..

POR FAVOR, NO ME MATEN, AÚN NO, estaba con un bloqueo de escritor tremendo y sentía que todo lo que escribía era una mierda tras otra, lo siento muchísimo, sé que lleváis esperando una eternidad para que al final acabe publicando semejante mierda de capítulo, pido perdón de corazón.

Pero, al menos, si los escribo así, puedo actualizar más seguido y avanzar más rápido.