Muerto

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La luz blanquecina le encegueció los ojos por un minuto, sus oídos no captaban bien el sonido, cuando fue consciente de si mismo noto que estaba en cuatro, desnudo, en un lugar cálido.

- Veo que has despertado-. Escuchó a la vez que los vulgares gemidos de Moblit resonaban en el lugar, guiándose por el sonido volteo donde ellos y observó la escena.

Por la boca recibía el falo de un sujeto gordo, sonreía mientras le lamía y su saliva se desbordaba de su boca al igual que un liquido blanco de su trasero, este ultimo además yacía rojo y lleno de marcas de mordidas.

-Es tu turno pequeña zorra-. Escuchó de nuevo de la misma voz, buscó con los ojos el dueño de aquel sonido y se encontró con un hombre rubio de barba de candado muy bien recortada, de musculatura increíble. Tenía tatuado Guerrero en su pecho.

La enorme mano de aquel se deslizó por la entrada de Eren embadurnandola de lubricante,  hizo lo mismo con su miembro y lo enfiló en aquel hueco rosado. Esbozó una sonrisa, reptaron sus manos por toda la espalda, rasguñandola. Entró del golpe en el niño. El dolor era insoportable,  el menor removía sus extremidades atadas buscando zafarse de todo, noto a su vez que su cadera estaba amarrada impidiendo que la moviese sosteniéndola arriba, la polla del rubio desgarraba su interior, no había sido preparado adecuadamente, la sangre fluía por sus morenos muslos, las lágrimas se deslizaban por sus mejillas y se mordía los labios con fuerza.

El tiempo paso y el "Guerrero"  acabó.

Su martirio había terminado.

Se sentía de lo peor, no sabía ni porque estaba pasando todo esto. Se acordó de Armin, ellos dos solo querían conocer el mundo, deseos infantiles a inocentes.

Armin estaba muerto.

Él estaba sufriendo.

Quería morirse.

Sus sueños, su mejor amigo, las esperanzas.

Todo estaba muerto.

Y así,  llegaron mas sujetos, dispuestos a saciarse con Moblit y él. No recuerda con exactitud cuantos fueron quienes profanaron su cuerpo, su estómago estaba hinchado de tanto semen que había recibido, su piel rasguñada, llena de moretones, su rostro inflamado de tantos golpes que habían caído en su cara. 

Y él no podía evitarlo.

Después de varias horas que al pobre muchacho se le hicieron eternas, cayó inconsciente. Su cuerpo ya no lo sentía, dejo de gritar, dejo de pelear, sus ojos perdieron el brillo, sus ganas de seguir adelante fueron  pisoteadas.

Cuando menos lo esperó todo se volvió negro y pudo descansar.



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Hola humanas y si un chico me lee humanos!!!

He vuelto, me odian lo se, pero aquí estoy. No se imaginan lo que me ha pasado, no les importe quizá pero les cuento!
El 1ro de noviembre, fui a una presentación coral de mi escuela en México (el cch azcapo) hacia cch sur. Todo bien padre hasta que me roban el cel. Tenía trabajos pa salvar el semestre, del colegio y todo se derrumbo. Bueno, me conseguí otro uno caquita pero bonito y servía. Bueno, después como de dos semanas me lo roban también,  se me acerca un tipo en el metro y me dice "me das la hora" y yo de 'claro, buen hombre' y ahí capté que valí, le di la hora al hombre sonriendo con nervios y el cuate este me responde "nop, ya sabes a que vengo" je, le pedí quitarle el chip y la memoria. Y hasta hace poco conseguí otro cel, Buano,  solo espero poder seguir aquí, ya no más robos a gente pobre, me roban otro cel y pus ya me quede sin cel. Pero aquí esta otro cap. Agradezco a quienes hayan leído toda mi anécdota. Y tranquiloas (asi lo escribo) ya casi se acaba la desgracia

Me enamoré de Ella, es decir: Él  Editando Donde viven las historias. Descúbrelo ahora