Cosas lindas. [l.s]

|Oops-Hi|

The X Factor. Louis estaba realmente nervioso, acaba de dar su audición frente al jurado y delante de un montón de gente que había sido mejor que él, y tal vez las personas que se presentaron después también lo eran. No debía de ser muy negativo, pero los nervios le estaban ganando, de verdad quería pertenecer al programa.

La espera no era su fuerte, entonces para calmar un poco sus nervios y perder tiempo, decidió ir al baño a lavarse la cara. Tal vez y así se calmaba y dejaba de pensar tan negativo. Su madre le estaría regañando al igual que sus hermanas por estar tan asustado y preocupado.

Iba tan distraído pensando en sus cosas que no notó que el único baño del lugar estaba ocupado y que la persona dentro justo iba saliendo, por lo que sin querer, Louis empujó la puerta golpeando con ella a quién sea que estuviera del otro lado. Con rapidez entró y vió a un chico (que recordaba haber visto en las audiciones), tirado en el piso, sobandose una parte de la frente.

Louis no conseguía palabras para demostrar lo apenado que estaba, pero un "Oops" salió de sus labios. El chico, que tenia una melena rizada muy salvaje, levantó la mirada haciendo notar sus ojos claramente verdes.

Ambos, por un momento se quedaron así, viendose sin decir nada. Louis pensaba que nadie podía tener unos ojos tan malditamente lindos, y si alguien más los tenía, no podian lucir tan perfectos como en aquel chico.

Un ligero y tímido "Hi" le despertó. El chico rizado estaba aún en el suelo, por lo que Louis le tendió una mano y le ayudó a pararse. No supo por qué, pero el sostener su mano, aunque sea por un segundo, le hizo llenar de energía y calidez.

El chico de intensos ojos verdes y rizos salvajes aún llevaba su mano en la frente, por lo que Louis intentó acercar su propia mano para ver que tan grave había sido el golpe, pero el castaño se alejó un poco, así que Tomlinson simplemente susurró un "lo siento" muy apenado.

"No te preocupes, sé que fue un accidente" dijo el rizado mientras alejaba un mechón de su frente con la mano que ocultaba el golpe, dejando ver una zona roja (el golpe). El chico sonrió, como si realmente no le importara, y tal vez era así. Pero el simple hecho de que sonriera tan ligera y sinceramente, le hizo pensar a Louis que no importaban ya todas aquellas cosas que él hubiera visto en el pasado, nada era rival a la lindura y perfección de esa sencilla sonrisa.

El chico de ojos verdes se giró para irse, entonces reaccionando rápido, Louis gritó: "Soy Louis... Louis Tomlinson" el rizado giró para verle, "Lo sé.. yo soy... Harry. Harry Styles" Louis no pudo evitar sonreír con grandeza. Sabía su nombre, aquel chico sabía su nombre y él el suyo. Y era perfecto.

Ese mismo día, cuando nombraron a los que estarían en el programa y sólo esas personas quedaron en el escenario, Louis pudo ver al rizado. No lo había buscado, pero sus ojos fueron instantáneamente a él cuando giró la cabeza.

Estaba hablando con un chico rubio, y mientras lo hacía, sonreía tanto que se marcaban unos hoyuelos en sus mejillas.

Allí, Louis se dio cuenta de dos cosas.

Uno: que Harry era real y malditamente lindo, nadie podía negarlo. Quien lo hiciera era un tonto ciego.

Y dos: que necesitaba ver esa sonrisa y esos hoyuelos en aquellas mejillas todos los días de su vida.