Varias semanas han pasado desde la pelea en el estacionamiento. No han habido llamadas, ni mensajes, y afortunadamente para ambos, tampoco ha habido encuentros inoportunos.
Según Amanda, sigue siendo ilógica la reacción de Adam cada vez que piensa en ello. Aunque no ha querido admitirlo en voz alta, algo de molestia consigo misma parece estar presente desde ese día.
Para ella, aquel concepto de Adam que poco a poco se iba formado y que la ilusionaba, se rompió estrepitosamente luego del incidente. Ha sido imposible ocultarse a sí misma esa molestia general que la hace refutarse una y otra vez el por qué había salido con él. Incluso había creado la teoría de que si el karma existía, cruzar a Adam en su vida era una lección.
Pero pesé todo, Amanda se ha esmerado en ocupar su mente en otras cosas. Dando gracias, que los exámenes de mitad de semestre han llegado justo a tiempo para distraerla de cualquier cosa que tenga que ver con Adam.
Bajando las escaleras, ya lista para irse a la universidad, Amanda entra a la cocina intentando rememorar cada apunte que ha estudiado durante toda la noche. Sus padres desayunando en el comedor contiguo a la cocina, fue lo primero que noto con solo entrar.
— Buenos días, cariño — La saludan ambos, con solo ver entrar a la jovencita.
— Buenos días mi niña — Prosigue Greta, quien se dispone a colocar otro plato en la mesa.
Pasando entre ellos como un torbellino, dándole un beso en la mejilla a los tres pilares fundamentales en su vida, les da los buenos días para sentarse en la mesa y desayunar algo de cereal.
— ¿Preparada para el examen de hoy?
Sin importar cuantas cosas tuviese Leo en la cabeza, él siempre estaba muy pendiente de la vida académica de Amanda. Pues para él, saber que su hija seguía teniendo uno de los mejores promedios de su promoción, lo hacían sentirse aún más seguro de la excelente líder que un día seria en Thomas Corp.
Amanda miro a su padre al llevarse la primera cucharada de cereal a la boca. Aun no sabía cómo pero su padre siempre parecía tener en cuenta sus exámenes y entregas finales, haciéndola sentir un poco más presionada de lo habitual.
— Claro que está preparada — Responde Fiorella por ella, antes de darle una sonrisa.
Leo miro a su hija, insatisfecho con la respuesta de su esposa, y aguardo a que la jovencita se diera cuenta que lo quería escuchar de su propia boca.
— Si... — Corroboro Amanda, algo dudosa.
— Pues me alegra escucharlo porque aún tengo que demostrarle tus excelentes notas a Fred para que termine de aprobar la breve suspensión académica.
— ¿Qué?. ¿Por qué tienes que hablar con el decano de mi facultad?... ¿Qué suspensión académica?
Si algo parecía odiar Amanda, era los planes sorpresivos que sus padres hacían sobre ciertos aspectos de su vida. A veces, la mayoría en realidad, no se preocupaban en preguntarle su opinión, simplemente daban por sentado que ella haría lo que ellos dispusieran.
— Ya lo conversaremos cuando regreses de la universidad. Ahora solo preocúpate de obtener un sobresaliente en la prueba de hoy.
— Como quieras — Refunfuño en voz alta, levantándose de la mesa.
Su padre y sus planes sin consultar le habían arruinado el poco humor con el que se había levantado luego de varias semanas actuando como Grumpy Cat.
— Vámonos.
Fue lo único que le dijo a Allan, una vez que salió de la casa. No le importaba si el vidrio delantero de la camioneta no estaba del todo limpio, quería que Allan dejase de limpiarlo y se subiera de inmediato para alejarla de su casa, mejor dicho, de su padre.
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El socio de papá ®
RomancePrimera parte de la bilogía "El Socio" Cuando la inocente Amanda Thomas, recibe la llamada de su padre para pedirle se presente a tiempo para una cena de negocios con el nuevo socio de Thomas Corp. por su mente pasan las infinidades de cenas anteri...