La nueva casa

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-Muy bien eso es todo - dijo felizmente una mujer de piel morena, un largo cabello lacio color castaño y unos hermosos ojos color azules.

-Estas... segura... amor - respondió jadeante un hombre de piel un poco clara, pelo negro y ojos color marrones.

-Creo que falta unas 10 cajas - menciono la mujer llevándose un dedo al mentón.

Al pobre sujeto casi se le cae la mandíbula al escuchar lo que dijo la mujer pero luego escucho unas risas de parte de esta.

-Jejeje te estoy tomando el pelo tonto - se burlo un poco haciendo que el hombre soltara un suspiro tanto de alivio como de fastidio - anda llamando a nuestro hijo, yo voy subiendo al carro.

La mujer se subió al asiento del copiloto de un carro modelo Station Wagon color blanco.

-¡Lincoln hijo ya nos vamos! - grito el hombre.

En un pequeño cuarto vacio, un niño peliblanco de 11 años que vestía unos jeans azules, un polo anaranjado y un par de tenis, guardaba sus últimas pertenencias en su mochila de Ace Savvy.

-Oh, hola amigos soy Lincoln si pregunta porque mi cuarto esta vacio es porque me voy a mudar - menciono animado a nadie en especifico, el chico tenía esa extraña costumbre.

-Lincoln nos vamos sin ti - bromeo su padre desde afuera.

-Ya voy papá - respondió contento el niño que corrió bajando las escaleras hasta por fin salir del edificio.

Una vez afuera se metió al carro y su padre se aseguro de no dejar nada olvidado antes de entrar al carro.

-Cinturones - dijo el hombre.

-Listos - respondió tanto Lincoln como su madre.

-Bien, despídanse del departamento porque ahora iremos a nuestro nuevo hogar.

El carro se puso en marcha y Lincoln le dio una última mirada a ese pequeño departamento donde vivía con sus padres, sería una mentira si dijera que no iba a extrañar ese lugar ya que hay vivió y creció durante 11 años pero cuando sus padres le dijeron que se iban a mudar a una casa, no un pequeño departamento sino una gran casa, pues la alegría y emoción embargo a Lincoln al imaginarse una gran casa, con un gran cuarto para él, un patio donde jugar y lo mejor de todo un lugar donde podría hacer amigos ya que viviendo en un departamento donde la mayoría de vecinos no tenían hijos o eran personas mayores Lincoln nunca pudo hacer una amigos con quienes jugar o compartir sus comics, bueno tenía amigos en el colegio pero no era lo mismo a tener amigos vecinos.

-Me sorprende que el precio de la casa haya estado tan barato - opino la mujer.

-Ni que lo digas, Es increíble que nadie más la haya comprado - menciono el hombre - aunque no sé porque el de bienes raíces se veía nervioso mientras me daba el tour rápido por la casa.

-Flashback:

-Y aquí está la cocina, hay que pasar rápido a los cuartos - menciono nervioso el vendedor apurando al hombre.

-Umm está bien sigamos - dijo sin prestar mucha atención al vendedor porque relaciono su nerviosismo en un principio con el estrés del trabajo.

Mientras el hombre subía por las escalera hacia los cuartos, el vendedor dio un mirada rápida por la ventana de la cocina viendo la casa que estaba al lado que se mantenía en completo silencio.

-*Menos mal esa familia ruidosa a salido, no quiero perder otro posible comprador* - pensó el vendedor antes de seguir con el tour con la casa.

Ya no soy un LoudDonde viven las historias. Descúbrelo ahora