Consiguiendo Un Novio Para Noche Buena.

6 de Diciembre

Aún sigo conmocionada Ruggero Pasquarelli se ofreció básicamente a fingir ser mi novio en la cena, era algo obvio que no lo iba a obligar a ser mi novio oficial, le dije que en cuanto tuviera el guion se lo daría, el único problema verdadero era Candelaria, frente a ella al menos debíamos fingir que había atracción para que no le fuera con el chisme a Chiara.

Esta mañana al poner un solo pie dentro del instituto todos voltearon a verme ya que Ruggero se encontraba esperándome frente a la puerta con una rosa en la mano luego tomo mi mochila y me acompañó hasta la puerta de mi aula en donde se despidió de mi dándome un beso en la frente, bueno no tanto así, en realidad lo que pasó fue que Ruggero si estaba frente a la escuela pero no estaba esperándome a mí, simplemente me saludo amablemente y continuo esperando a sus amigos frente a la escuela y yo fui a mi salón completamente sola.

Al entrar al salón Valentina, Carolina y Katja me llenaron de preguntas y para evitar falsas teorías les conté lo ocurrido el día de ayer, aun así, esto no evitó que ellas sacaran sus teorías diciendo que seguramente Ruggero estaba secretamente enamorado de mí y que al ver esta oportunidad no espero a que otro se le adelantara, que tontería.

—Solo estaba siendo amable conmigo al ofrecerme su ayuda después de oír que estaba en aprietos, eso es todo, además me prometió aprenderse el guion para el día de la cena —Dije como si nada causando un gesto ofendido en ellas.

—¡¿Un guión?! ¡¿Acaso estas loca?! —Me reclamo Valentina completamente alterada a lo que yo me reí de la expresión en sus caras.

—Si como oíste, un guión, no nos podemos arriesgar a meter la pata frente a Chiara o frente a cualquier otra persona de mi familia, debemos procurar que sea la actuación más coherente posible —Les explique y me concentré en elegir los lapiceros que utilizaría para esa clase.

—Tu si que estas mal, tu crush por fin te nota y junto a eso una gran oportunidad de hacer que salga contigo sin necesidad de amarres y lo botas así de fácil —Me reprocho Carolina a lo que yo solamente rodé los ojos.

A la hora del almuerzo mientras comía tranquilamente mi ensalada de frutas la estupidez en persona decidió hacernos una visita.

— ¿QUE CREES QUE HACES? —Me grito Candelaria

—Mmmm... ¿Comer? —Le respondí irónica mis amigas aguantaron la risa.

—Escuchame bien Karol, no te conviene jugar conmigo —Me amenazó

— ¿No me digas?

—No te hagas la chistosa, me enteré que el día de ayer saliste con Ruggero —Sabia que el chisme se correría pero no creí que tan rápido —No se sepas Karol pero el me pertenece.

—Ruggero no es un objeto Candelaria —Le recalqué

—¡Como sea es mío! —Me grito

—Te puedes ir por favor, ya bastante tengo con aguantar tus malditos caprichos en la mansión para que vengas aquí a gritarme —Estaba a punto de lanzarme sobre ella Katu me veía con cara de espanto mientras que Caro y Valu solo esperaban el momento oportuno para comenzar a gritar "Pelea, pelea".

Juro que ya estaba a punto de lanzarme sobre ella para arrancarle esas malditas extensiones de zanahoria, pero en el preciso instante en que iba a saltar alguien me tomo del saco haciendo que me sentara bruscamente de nuevo.

—No vale la pena hacer un teatro —Me dijo Ruggero

—Gracias por defenderme Ruggero pero yo puedo con ella —Dijo Candelaria presumidamente mientras yo apretaba los dientes.

—No yo le decía a Karol que no vale la pena hacer un teatro contigo —Le aclaro el dejando a Candelaria con la boca abierta y a mis amigas y a mi con una sonrisa burlona en la cara.

—¡¿Cómo te atreves?! —Le grito candelaria con indignación —Tu y yo tenemos una conexión especial —Dramatizo

— Yo no recuerdo haberte pedido nunca que fueras mi novia— le dijo serio — Y te agradecería que dejarás en paz a Karol

Candelaria se fue enfurecida de la cafetería no sin antes gritarnos un "ME LAS PAGARAS KAROL" típico de ella.

—No debiste hacer eso —Le dije a el y vi de reojo que Carolina se estampo la mano en la cara

—Pero te estaba molestando —Me dijo confundido

—Si, pero ahora ya no me dejara en paz —Expliqué y fui interrumpida por la voz de valentina

—Pues si Karol no te agradece yo si por que nos diste el mejor espectáculo para el almuerzo —Dijo ella con una sonrisa divertida justo antes de que sonara el timbre.

—Debemos ir a clase, nos vemos luego Ruggero —Me despedí con la mano y salí de la cafetería en dirección al salón.

Las clases pasaron rápido y al salir de la escuela comenzó a nevar, hacía mucho frío, pero yo no me esperaba esa gran sorpresa al salir del colegio.

El problema era el frío porque yo solo tenía un abrigo y la idiota de Candelaria salió antes que yo y debo suponer que al ver que estaba nevando y yo no salía del salón, se le ocurrió la grandiosa idea de inventar alguna mentira al chofer que no me iría con ellos y ahora no tengo en que irme a casa siendo expuesta a una Hipotermia.

— ¿Karol? ¿Por qué aun no te has ido? —Dijo Ruggero detrás de mi

—Bueno al parecer no soy la única ¿Qué haces tú aquí? —Pregunte al girarme de frente a el.

—Pase a la biblioteca por unos libros —Me explico —¿Y tu?

—A candelaria se le ocurrió que dejar contagiarme hipotermia sería buena idea. —Ironice a lo que el soltó una ligera risa.

—Yo te puedo llevar a casa, claro si gustas —Me dijo

—No quiero causar molestias —Dije nerviosa, bien podía llamar a un taxi

—No es ninguna molestia el chofer pasara por mí en 5 min. —Me dijo como si nada.

—¿Seguro? —Pregunte nuevamente

—Claro.

Asentí con la cabeza, y esperamos en silencio y después de cinco minutos estaciono frente a las escaleras de la escuela un auto de color negro, Ruggero camino y amablemente me abrió la puerta para que yo entrara primero.

—Buenas tardes —Salude amablemente al chofer

—Buenas tardes, señorita —Me contesto sin quitar la vista del frente

—Hola Robert, al residencial valle por favor —Le indico al chofer.

—Claro.

—¿Cómo es que sabes en donde vivo? —Le cuestione a lo que el solo rio despreocupado.

—Hay muchas cosas que tu no sabes —Me dijo finalmente y centro su vista en uno de los libros que tenía en las manos.

No dijimos mas durante el camino, hasta que el auto estaciono frente a mi casa y Ruggero levanto la vista.

—Gracia por traerme —Le agradecí con una sonrisa.

—No hay de que, además que buen novio postizo seria si te hubiera dejado sola en la escuela. —Me dijo a modo de broma, pero a mí se me subió el color a las mejillas.

—Claro... Nos vemos mañana Ruggero —Dije finalmente y Sali rápidamente del auto antes de que notara que estaba sonrojada

—Adiós Karol.