Entrenador Ⓐ

Capítulo 10

Un silbido fuerte y ensordecedor suena en mi oreja izquierda y me levanto.

"¡Sal de la cama! ¡Es hora de hacer tus rutinas diarias!" Un niño de cabello rizado me grita, las venas se muestran en su cuello y el fuerte silbido

que escuché se coloca entre sus dientes.

Miro mi reloj. 5:00?

"¿Por qué estoy despierta a las cinco en punto? ¡Liam no me despierta hasta las seis!" Yo discuto.

Sé que no parece un gran problema, pero vamos! Esa es una hora entera que podría haber tenido que terminar ese sueño que tuve acerca de ir a la

luna.

"¿Te parezco que soy Liam?" El chico de ojos verdes me dice. Él no puede ser mucho más viejo que yo, de hecho, se ve alrededor de la edad de

Liam.

¿Por qué estoy pensando en Liam? Debería estar feliz de que se haya ido. Y tal vez me gustará este nuevo chico , Harry a pesar de que casi me

deja sin aire.

"¡Sal de la cama y vístete!" Él continúa gritándome.

"Está bien, está bien. Dios", me levanto y camino hacia mi armario mientras él sale de mi habitación.

Como un niño, una vez que se va, me doy vuelta y le doy el pájaro.

-----------------------------------------------------------------

"Está bien, Susana. Voy a necesitar que te pongas de espaldas en este tapete", me dice Harry y lo hago antes de que me griten.

Mi madre lo contrató por una razón y esa razón probablemente fue para torturarme. Ella es el diablo que te digo.

"¿Sabes lo que son los abdominales?" pregunta, un hoyuelo mostrando en una de sus mejillas pero no estoy mirando ni nada.

"Sí, ¿qué clase de idiota no?"

"Entonces haz doscientos de ellos".

"Que-"

"No discutas, solo hazlos. Ahora ", me dice Harry con voz fuerte.

Liam no me obligaría a hacer algo. Él me daría una opción y yo escogería de ellos, aunque la otra opción normalmente sería igual de mala o incluso

peor. Ahí voy de nuevo, comparando a Harry con Liam. Ni siquiera debería estar pensando en él. Me odio más de lo que odio hacer esta estúpida

rutina con Harry. Dios solo sabe qué entrenamiento de esclavo tendrá para mí después.

"¡Los perezosos se mueven más rápido que eso, vamos!" Él grita mientras hago mi doceava sentadilla.

"Entonces, ¿por qué no los haces?" Pregunto, medio jadeando.

"Porque no son para mí. ¿Que Preguntas más estúpidas?" Él levanta sus cejas.

"voy a morir " murmuro y el no tiene sentido del humor .

Cuando termino, me pongo de pie y me duele la parte inferior del estómago, pero recuerdo lo que dijo Liam, si duele, está funcionando. Maldita sea,

Susana , estás dejando que tanto Liam como Harry pierdan tu peso. Pensé que el plan era mantener mi sobrepeso y no perder ninguno. ¿Ya sé lo

que quiero más? Maldecir mi habilidad de no tomar decisiones válidas.

"Eso tomó casi treinta minutos".

"¿Es tan malo?"

"No voy a responder eso". él niega con la cabeza y escribe en el portapapeles. No sé por qué, pero sus ojos están hipnotizados por sus mechones