-Vamos hacia mi despacho, dice aquel señor dirigiéndose a la puerta de lo que se supone debe ser su despacho.
ya comenzaba a darme escalofríos, esto es un poco raro, y que pueda ver a Daniel aún lo hacía más raro.
volteo a ver a Daniel y el me hace una seña de que lo siga, sin más nada qué hacer empiezo a caminar detrás de el señor, llegamos a un cuarto muy ordenado, con algunos libros y un escritorio.
-A qué le debo su visita queridos Jóvenes. Dice él señor misterioso.
-Pues como puede ver nosotros venim...
-¿Cómo es que puede verlo?, digo interrumpiendo a Daniel, el cual me da una mirada asesina., pero la curiosidad me estaba matando, se supone que nadie lo podía ver, y esto me parecía un poco fuera de lugar.
-Pues como verás Isabella, yo tengo algunos dones que me permiten hacerlo.
-¿usted es síquico?.
-No.
-¿y qué es usted entonces?
-eso lo sabrás después, sólo díganme a qué vinieron, tengo más cosas qué hacer, por cierto, mi nombre es Nicolás.
-queremos hablar sobre una dirección, dijo Daniel antes de que yo hablara.
-¿Qué dirección?.
-mire,mi nombre es Daniel y yo desper...
-si, sé quién eres y qué te pasó, Daniel es interrumpido por Nicolás. Yo lo miro y le doy una sonrisa triunfante.
-sólo cuéntenme porqué están aquí.
-encontramos su dirección en mi ataúd, pero lo más extraño era que mi cuerpo ya no estaba ahí.
-¿tú cuerpo no estaba en el ataúd?
-No.
-oh, estás metido en un grave problema Daniel, eso que tú cuerpo haya desaparecido sólo significa una cosa.
-¿qué?, dijimos los dos al unísono.
-No estás muerto.
-eso, ya lo sabía.
-ah si, ¿Cómo?
-un señor me lo dijo el día de mi entierro.
-No puede ser.
-¿qué?
-¿Cómo era ese señor?
-pues era blanco, bajito, no tenía mucho pelo.
-Hugo.
-¿Quién?.
-Mira Daniel, tú no estás muerto, pero es cómo si lo estuvieras, estás en una clase de limbo dónde están los muertos pero no muertos, bueno no sé si me entiendas, pero prácticamente ahora eres un fantasma, estás en un sueño tan profundo que tú cuerpo y mente piensan que ya haz muerto.
Un escalofrío pasa por mi cuerpo, creo que eh tenido demasiadas experiencias inexplicables estos últimos días.
-¿tiene cura?, le digo Al señor Nicolás con la esperanza de que me diera un si, la verdad no quería que Daniel se quedase así todo el tiempo.
-bueno, las cosas son muy difíciles de comprender, miren, hay personas y cosas que no son tan normales cómo ustedes creen, hay espíritus y personas que son reales y malas, y se encuentran a nuestro alrededor, ese señor que encontraste es una de esas personas.
algo tienes que haber hecho Daniel o en algo tiene que ver para que le hicieran esto, necesitas saber cuál fue la razón, encontrar tu cuerpo y hablar con la persona indicada para que te ayude a Salvar tu vida.
Pero una cosa si es muy importante.
-¿cuál?, volvimos a repetir al mismo tiempo.
-La única que te puede ayudar en todo eso es Isabella, sin ella no puedes hacer nada, ella te ayudará a encontrar a la persona que te dirá toda la verdad y también te ayudará a encontrar tu cuerpo y volver a ser el mismo de antes.
Daniel me mira.
¿Qué?, ¿qué tengo yo que ver en todo esto?, me propuse a ayudar a Daniel pero ya las cosas se estaban complicando. ¿Cómo que no lo podía hacerlo sin mí?.
-¿porqué?, le digo un poco alterada.
-Isabella, yo mismo que sé mucho de esto y tengo experiencia no puedo explicarte bien, es algo muy extraño, tú eres importante Isabella, eres la única salvación de Daniel y pronto sabrás porqué.
-Nos tenemos que ir, fue un gusto hablar con usted. le digo al señor Nicolás y me dispongo a salir de ahí lo más rápido que puedo, necesitaba un poco de aire, las cosas no estaban saliendo cómo me las esperaba, esto ya estaba pasando un poco los límites.
-Isabella, ¿estás bien?, me dice Daniel caminando a mi dirección.
-Daniel, necesito tiempo para pensar en todo esto, la verdad es que no sé si pueda ayudarte, tengo que tomarlo con calma y pensar todo claramente, ahora mismo estoy muy cansada y necesito ir a mi casa.
-Está bien Isabella, no te voy a presionar, tú eres la que decides lo que realmente quieres hacer.
-llegaré a tu casa después que las cosas estén más calmada, por ahora te pido paciencia.
-está bien, es lo último que escucho y desaparece.
Daniel, Daniel, qué me estás haciendo, todo cambió desde que apareciste en mi vida, esto es una locura, pero no sé porqué siento esa necesidad de quererte ayudar y verte bien, estoy muy confundida, no es normal sentir estas cosas.
Ahora sólo necesito un buen baño, necesito descansar.
Mientras tanto, en otra parte de el mundo....
-Ya la encontré, Owner.
Muy buen trabajo mi pequeño servidor, sabía que eras de fiar, por fin la encontramos, después de tanto, al fin la tenemos.
