Entre mundos (Nathara)

Oscuros part.1

Nathan cayó en un callejón sin saber donde estaba y salió, pasaron unas horas y su estómago reclamó por comida, pero no tenía ni dinero ni nada y vio una tienda, tendría que robar. Un hombre de traje gris iba pasando por ahí hablando por teléfono, Nathan no le hizo caso y se metió a la tienda se volvió invisible y agarró comida. Salió de ahí y se volvió visible con toda la comida, pero en eso se escucharon las alarmas de robo
caminó lo más normal posible, pero si lo cacharon y empezó a correr.
Nathan corrió más rápido y se metió a un callejón creyendo que no lo iban a atrapar, pero unos policías le cerraron el paso y lo amenazaron con las pistolas, Nathan levantó las manos sin poder hacer nada, no podía usar sus dones contra Fains.
Los policías lo arrestaron y lo esposaron, forcejeó contra ellos tratando de liberarse de las esposas de sus manos en su espalda, pero le era imposible y los policías lo metieron a una patrulla
-Nombre niño-dijo un policía
-Ivan
-¿Edad?
-17-dijo serio
-¿Apellido?
Nathan lo vio sin contestar
-No hagas las cosas más difíciles-dijo el policía
Nathan volteo la mirada
-Dejen al chico-dijo otro chico de pelo negro
Nathan lo vio serio sin saber porque abogaba por él. El policía metió a Nathan a una celda al llegar y lo vio mal golpeándolo en el estómago.
Otro policía le soltó una descarga eléctrica, Nathan la soportó y también golpeó a ese policía.
En eso se cerró la puerta de la celda en su cara.
-Llamen al juez
Nathan intentó ver si había alguna salida, ya estaba nervioso
-¿Qué tienes?-le dijo el chico
Nathan lo barrió con la mirada serio.
-Nada
-Por favor dime
-Estoy bien-dijo algo agresivo, pero no estaba nada bien.
El chico se acercó un poco a la celda de Nathan y le tocó el hombro haciéndolo sentirse mejor
Nathan vio al hombre extrañado.
-¿Cómo hiciste eso?
El chico le sonrió macabro
-No eres el único raro aquí
Nathan vio su sonrisa con un pequeño escalofrío, pero no le asustaba y sólo asintió y se sentó mejor.
-Me llamo Cam
-Ivan
-Un gusto-dijo Cam sacando una caja de cigarros pero un policía se la arrancó
Nathan por suerte todavía traía su Fairborn y se lo escondió más.
-¿Cómo terminaste aquí?
-Al parecer violé mi libertad condicional
Nathan alzó las cejas.
-Que mala suerte
-Nos mandara con un juez y de ahí una sentencia
Nathan suspiró.
-Odio los jueces-dijo algo serio
-Ya has ido a la carcel?
-No, pero simplemente no me gustan las juicios
-Bueno, no creo que te vaya tan mal-dijo Cam sonriéndole
-Eso espero, o puede que escape de alguna forma de aquí.
-Ni yo he escapado
Nathan vio a su alrededor tratando de ver por donde.
-¿De qué te ríes?-preguntó viéndolo.
-Ya lo intente niño
Nathan suspiró exasperado, subió su mano hasta su Fairborn con cuidado de no ser visto, iba a salir de ahí de una forma u otra
En eso llego un hombre de traje, Nathan retiró la mano de su Fairborn y miró a otro lado.
-Bien chicos, ambos saben que hicieron mal-dijo el hombre
-Ajá ¿y luego?-Cam se veía desesperado
-Serán llevados al reformatorio Espada & Cruz
Nathan se quedó sentado y buscó algo en su chamarra, y encontró por suerte tres frascos con su bruma y destapó uno suspirando más tranquilo.
Pasó la noche en la que Cam sólo se estaba haciendo menso, pero Nathan si se quedó dormido, soñando con el conflicto de Celeste y Gabriel de si realmente la había querido más.
Cam movió a Nathan cuando amaneció pues los llevarían al reformatorio de Espada & Cruz
Nathan abrió los ojos tomando el Fairborn por debajo de la chamarra, pero quitó su mano al ver a Cam
-Ya nos vamos Ivan
Nathan iba a tratar de escapar y se levantó asintiendo.
Nathan si los veía feo y mejor se dedicó a observar por la ventana. Pasaron horas antes de llegar a una especie de mansión oscura y vieja, Nathan la observó desconfiado, se había metido en grandes problemas y se había prometido no robar más, pero al parecer no pudo cumplirlo.
Los policías bajaron a Cam casi empujándolo y luego regresaron por Nathan, este vio a todos lados tratado de zafarse del agarre de los policías pero lo empujaban hacía la puerta, mejor caminó en vez de resistirse.
En la entraba había una chica de pelo negro que vio a Nathan, ella estaba vestida de negro
-Recuerden, Recetas, Rojas y Residencias-dijo un hombre ya mayor que estaba con la chica
Nathan igual la vio, pero apartó la mirada observando todo sin saber que quería decir el hombre con eso.
-¿Qué quiere decir?-dijo la chica
-Medicamentos sólo con receta, Las rojas son las cámaras, ahora sus artículos prohibidos-dijo el dando una charola llena de armas, pistolas, navajas, cigarros y la chica sacó su teléfono
Nathan se cruzó de brazos, él no recibía ordenes de nadie.
-No hagas más difícil esto-dijo Cam en voz baja
-¿Qué puede hacer un señor de esa edad?-preguntó burlón
En eso el hombre vio a Nathan
-Bueno, un asesino, una piromana y un rebelde, los tres se van con el psiquiatra ahora mismo-ordenó y los policías le quitaron a Nathan el Fairborn
Nathan trató de recuperar el Fairborn golpeando a un policía, en esos momentos, Nathan estaba descontrolado.
En eso el hombre le puso un brazalete de metal en el brazo y este le soltó una descarga eléctrica muy potente, Nathan gritó horrible ante eso y cayó de rodillas tratando hacer que parara el dolor.
Los policías lo cargaron hasta la oficina del psiquiatra.
Nathan se sentía con todo el cuerpo adolorido que no podía ni siquiera caminar.
-¿Estás bien?-dijo otro señor
-Eso...es horrible-dijo viendo el brazalete de metal.
-Tranquilo... el señor Cole es algo extremista
Nathan sólo asintió todavía algo adolorido, no quería que lo llevaran al psiquiatra, no estaba mal.
El psiquiatra tomó el brazalete y movió unos botones
-Listo, ahora no te hará daño mientras estés aquí
Nathan asintió y tenía la mirada en todo menos en el psiquiatra.
-Ivan, ¿cierto?
-Si
-¿Estás aquí por robo?
-De comida
-Bueno, la condena impuesta es dos años aquí o la carcel unos 20 años
Nathan abrió mucho los ojos al oir eso.
-Es demasiado tiempo-dijo alternándose
-Por eso, tienes que portarte bien con buen comportamiento puede que seas libre en un año de aquí
Nathan no podía creer eso, tenía la peor suerte del mundo, a parte que había robado comida.
-¿Ivan?-dijo el psiquiatra
Nathan lo volteo a ver serio y nervioso.
-¿Aceptas el trato?
-Sí...-dijo no muy convencido.