No habrá sollozos cuando el alba brille ni habrá trastornos en el mes de abril, ya el nocturno celaje derrumbado
estará dormido estrechando el confín.Se habrán enajenado las inquietantes sombras y abre divagado por el mundo
al sentir, el alma fulgurante del
hombre entristecido, que evoca la ausencia del mundo y su sentir.
Evocación de sueños, en el nocturno alcance, y brillan los luceros navegando en su faz, se apagan los cocuyos, meciéndose en el alba esperando la hora que pronto ha de llegar.