Sing Me ❀KOOKTAE!

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5/5 ¡ MARATHON !

La ciudad de Busan estaba oscurecida y el cielo bañado en estrellas, una brisa suave y fría lo inundaba.

Ese mismo día, que era el último del año. La casa de los Jeon estaba con un montón de gente, los familiares hablaban o bailaban con la música. Niños pequeños jugaban libremente. SoMin —la madre de YoonGi— hablaba animadamente con su hijo y JiMin. Todos disfrutaban.

Por otro lado, en el segundo piso estaba TaeHyung nervioso mientras abrochaba torpemente botón por botón de la camisa de vestir negra de JungKook, con la mirada atenta del mayor.
Al haber terminado de abrochar todos los botones —excepto los últimos tres botones de arriba mostrando parte del tonificado pecho de JungKook—, el rubio se permitió dar la vuelta intentando retirarse de la habitación. Pero no pudo porque el castaño lo había agarrado del brazo suavemente acercándolo.

—Estas demasiado lindo hoy.—dijo JungKook frunciendo el ceño. —Y esos pantalones... Creo que serán mis favoritos.—guiño un ojo.

Cuando el castaño terminó de decir eso, metió sus manos en los bolsillos traseros del rubio lentamente y dio un leve con descaro a sus glúteos por encima de la tela, haciendo sobresaltar a un TaeHyung sonrojado al instante, escondiéndose en el cuello del mayor.

—J-jungKook...

—Vamos abajo, nos esperan.—dijo, mientras se le formaba una sonrisa divertida en los labios, luego se fue del lugar.

Por un lado TaeHyung sentía que iba a morir, su novio, sí, su novio era un descarado siempre cuando estaban en un día importante.
Se mordió el labio inferior intentando alejar cualquier pensamiento impuro.

Se sonrojo violentamente, acomodó su camisa blanca de vestir maga larga y se encaminó escaleras abajo.

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Se marcaba las once cincuenta y siete en el reloj y TaeHyung buscaba a JungKook entre el montón de gente.

Antes se encontraba hablando con SeokJin pero lo dejó hablar con el primo de su novio, Kim NamJoon.

Y justo después de dejar a su hermano  faltaban exactamente tres minutos para marcar la media moche y quería estar con JungKook, entre sus brazos.

—JungHyun. ¿Has visto a JungKook?

—Hum...—miró a todos lados mientras tenía a la pequeña SooYoung en brazos. —No tengo idea de donde pueda estar.

Once cincuenta y nueve.

—Oh, gracias.

TaeHyung se dio por vencido y se dirigió hacia JiMin pasando los últimos segundos del año.

—¡cinco!, ¡cuatro!, ¡tres!, ¡dos!, ¡uno!

Media noche.

Todas las personas empezaron a abrazarse, diciendose feliz año nuevo. Su madre y SeokJin fueron los primeros en ir a dedicarle un feliz año, SunHee después fue y lo abrazo, dijo un montón de palabras lindas para después decir:

—JungKookie te espera arriba.—después guiño un ojo.

TaeHyung decidido se fue hacia el segundo piso. Pasó enfrente del balcón y ahí estaba él, apoyado en la barandilla y al sentir los pasos del menor volteó.

—H-hyung.

TaeHyung avanzó hasta el castaño y luego se abalanzó hacía él abrazándolo por el cuello, dieron una media vuelta quedando TaeHyung con la espalda en el barandal.
Esa noche el viento era fuerte y sus cabellos perfectamente peinados se deshicieron, desordenándolos.

—Feliz año.—dijo JungKook besando las clavículas del menor con ternura.

—Feliz año.—repitió pero murmurándolo.

TaeHyung puso sus manos en la nuca del mayor, perdiéndose en los besos que él proporcionaba en parte de su clavícula y cuello. Las manos de JungKook viajaron debajo de la camisa blanca del menor, acariciando la piel nívea y suave. TaeHyung jadeo por la sensación.

La piel se sentía quemar debajo de su palma, a pesar de que el rubio estuviera frío.

—Te quiero demasiado.—confesó JungKook empezando a besar profundamente los labios del menor.

—Te quiero más y más.—murmuró.

Las manos del mayor seguían donde estaban, los dos cuerpos se balanceaban mientras como escenario fuegos artificiales de muchos colores adornaban el cielo.
JungKook escondió su rostro en el cuello de TaeHyung, aspirando su dulce aroma.

—Yuki tsumoro yō ni tashikame te iru yo...—empezó a cantar el castaño causando que al rubio se le empezará a acelerar el corazón de repente. —...kimi ga kure ta mono iki te ku yūki...

Las manos de TaeHyung pasaron de estar alrededor del cuello hasta el pecho del mayor, en donde apretó la tela de la camisa, aferrándose a él.

—Ah doko made mo maiagaru Crystal...

—Nē nani mo ira nai kara mōsukoshi dake kanjite tai. Can I touch your heart?.

Los ojos del rubio se aguaron, apretó un poco más el agarre en la camiseta para después sentir las caricias del mayor en su piel debajo de su camisa blanca. TaeHyung solo puso su cabeza en el hombro de esté. Pasaron unos segundos hasta que...

—Chīsana egao ga naze ka kurushii...

JungKook sonrió cuándo pudo escuchar cantar a TaeHyung, justo como lo recordaba, su voz podría ser grave pero al momento de cantar —cosa que no sucedía todos los días— se escuchaba muy frágil, como si en cualquier momento fuera a romperse.

—How can I be closer?

—Kono omoi wa naze kotae ga de nai...—definitivamente la voz del rubio era hermosa.

—How I am gonna find it? dō yatte? oh let me know...—y dio por finalizada la canción.

Pequeñas lágrimas salían de los ojitos del menor, JungKook no dudó y beso cada lágrima que salía hasta terminar en esos finos labios rosados, dando inicio a un lindo y nuevo año.

~~~🌸
Crystal Snow.
BTS.