¿Por qué estoy aquí?, ¿porqué respiramos?, ¿por qué tienes este libro en tus manos? Soy Bryan Mouque, el chico que desde niño se hace preguntas. Quizá lo hago porque mi mente es tan pequeña que no logra entender con exactitud cómo es el universo; siendo una fábrica infinita de posibilidades, hace que la vida sea una perfecta combinación de coincidencias, como las que les voy a contar: por qué estoy aquí. Mi papá es mexicano y cuando era joven le gustaba correr riesgos, el miedo no significaba nada para el. Como le gustaba cocinar, se fue de México a Europa con tan solo veinte años de edad para trabajar por su cuenta como chef. Primero llegó al norte de Europa para laborar en varios restaurantes, poco a poco fue bajando hasta que llegó a Francia, a una pequeña ciudad llamada Niza, en la que se instaló. Para ese entonces él ya llevaba como diez años viviendo por esas partes del mundo y quería comprar un coche. En Francia son muy rigurosos para esos trámites, por lo que le pidieron que fuera a la escuela de manejo para así obtener su licencia.
Busco un centro de instrucción y fue ahí, en una escuela de manejo, donde conoció a mi mamá, quien estaba haciendo el mismo trámite. Se enamoraron y empezaron a escribir su historia juntos.El 24 de febrero de 1994 se abría un capítulo más para ellos. Juan José y Corinne estaban en su departamento cuando, de la nada, mi mamá le aviso a mi papá que ya era hora de que yo naciera, y rapidísimo la llevo al hospital. Llegué a este mundo a las seis de la mañana en punto, en Niza, Francia. Pero mi destino no era crecer en un lugar rodeado por el mar Mediterráneo, pues a los tres mese de haber nacido mis papás regresaron a México. A mi padre siempre le ha gustado dar giros extremos en su vida. Ellos tuvieron que dejar todo en Francia para venir acá y empezar desde cero, iban solos -con su hijo Bryan- contra el mundo.
"NO TIENES IDEA DE LO MARAVILLOSA QUE FUE MI INFANCIA GRACIAS A ELLA Y LO IMPORTANTE QUE SIGUE SIENDO EN MI VIDA".
En la Ciudad de México hay casas, departamentos y luego están los dúplex, 163 son los chiquititos. Pues a un lugar así llegamos, a una pequeña vivienda por un rumbo llamado Villa Coapa, donde pase mi infancia.
Había muchos edificios y, por lo tanto, un buen de gente y niños, con los que todo el tiempo jugaba. No importaba la hora, siempre que salía de mi casa había personas. Entonces, una fecha como Halloween ¡era genial!, nos juntábamos como veinte años o más para ir a pedir dulces, era un ambiente muy bonito. Y aunque había niños por todos lados, ninguno no podía suplir a la niña más importante: Ashley, mi hermana.No tienes idea de lo maravilloso que fue mi infancia gracias a ella y lo importante que sigue siendo en mi vida.
Ella es dos allá más chicas que yo y éramos inseparables, como mi mano derecha, como Mario y Luigi. Es la persona que ha estado junto a mi siempre; incluso tenemos una foto donde yo voy gateando y ella va detrás de mí, como siguiendo mis pasos o cuidándome. Gran parte de lo que soy de la debo a ella, y quizá yo influí en algo para que sea la chica que es hoy.
Ella estudió teatro y creo que tantas cosas que hicimos de niños tuvieron que ver en su decisión: teníamos una litera y en ella colgábamos una tela, cobija, o lo que encontráramos para simular un telón, colocábamos veinte peluches como espectadores y nos poníamos a actuar frente a ellos. Nos sentíamos tan expertos que hasta había un intermedio en nuestras obras para cambiar de vestuario: Claro que no era nada elaborado, simplemente nos poníamos cualquier cosa que hubiera por ahí, como una camisa en la cabeza o cojines en la panza... Siempre estábamos inventado historias diferentes.
"MEDITO RODEADO DE VEGETACIÓN, PUES CREO QUE HAY ALGUNA CONEXIÓN ENTRE LOS HUMANOS Y LA NATURALEZA; AL FIN Y AL CABO AMBOS SERES VIVOS".
ESTÁS LEYENDO
CD9 "Nuestra Historia"
De TodoCINCO CHICOS, UNA BANDA, MILLONES DE CODERS Pocas veces somos testigos del surgimiento de un fenómeno que traspase fronteras, y eso es en lo que Jos, Alan, Alonso, Bryan y Freddy se han convertido al dar vida a CD9. En este libro oficial, los chico...