plus; taehyung+jisoo

kth ♡ kjs

Cerca de las seis de la tarde, después de varios cambios de ropa y un millón de fotos quizás, como mínimo, comieron algo de lo que Tae había llevado y emprendieron camino a su hogar. Esta vez Jisoo no se durmió, sin embargo se dedicó a mirar el paisaje rural por medio de la ventanilla. 

Cuando quiso bajarla, el brazo de Taehyung le frenó. En realidad, ella paró de hacerlo por el susto que su tacto le ocasionó. El castaño carcajeó.

  — ¿Estás ignorándome por alguna razón? 

Jisoo abrió los ojos aún más, sorprendida y negó reiteradas veces haciendo reír al mayor otra vez. — No, no...Solo estoy cansada, supongo. Y no quiero que me saques fotos durmiendo.  

  — Yo no haría algo así. — Murmuró y la pelinegra sonrió, dándole la espalda a la ventana esta vez y cerrando sus ojos en dirección a Taehyung, este la miró de reojo y copió su gesto. — Además no te ves mal así. Incluso puedo decir que luces adorable con el cabello revuelto y esa cara de loca tan característica tuya.

Entonces Jisoo hizo un puchero sorprendiendo al contrario, quien a pesar de saber que no debía apartar la vista del camino no podía evitarlo. 

  — ¿Estaré viendo una fase tuya nunca antes desbloqueada? — Preguntó un poco burlón, bajando la velocidad del vehículo. 

— Tal vez. — Susurró y una risa apenas audible escapó de sus labios. Fue tan suave para Taehyung que hasta jura haber sentido aquello como una caricia, tembló en su lugar y suspiró.

Jisoo siempre causaba sensaciones nuevas en él pero nunca se había sentido tan abrumado. No era la primera vez que pasaban tanto tiempo juntos sin embargo nunca antes se había sentido tan íntimo, tan suyo. 

  — Duerme, apenas lleguemos a tu casa te despertaré. — Sugirió Tae pero no recibió ninguna respuesta, giró su rostro y la pelinegra estaba totalmente relajada, por lo que no tardó en darse cuenta de que se había dormido. ¿Realmente se había distraído tanto tiempo? ¿O era solo que la menor estaba muy agotada? 

Negando un par de veces e intentando mantener su mente en blanco se enderezó en su asiento, atento al camino. 

( . . . )

Se desperezó tanto como pudo, sin embargo sentía algo que no le dejaba estirarse en su totalidad. Abrió los ojos, encontrándose con la oscuridad, no podía ver nada. Fue fácil para Jisoo darse  cuenta de que estaba sobre su cama. Estiró su brazo, sabiendo de memoria donde estaba el interruptor de luz y lo encendió, cerrando los ojos con fuerza al sentir el cambio drástico. 

Algunos segundos después se apoyó sobre sus codos y notó cual era la razón de su incomodidad. Estaba con la misma ropa que había usado para salir, pero ¿por qué? ¿Taehyung la había llevado hasta allí? 

Todo su cuerpo estaba adolorido y se quejó, no podía creer que por unas simples fotos se sentía como que había corrido un maratón. Bueno...habían sido quizás más de cien fotos pero aún así no era excusa.

Su celular seguía en su bolsillo y doblándose de una manera muy extraña quizás su mano llegó hasta él y lo desbloqueó, buscando la hora. 4:32 a.m.

- Gracias por dejarme en cama, Taehyungie - envió por whatsapp y dejando el aparato en su cama, caminó hasta el baño para poder lavar su cara. Ya no tenía sueño y sabía que por más de que lo intentara con todo su ser no conseguiría dormirse otra vez. 

Se duchó, eligió un vestuario algo flojo y agarró su celular nuevamente para llevarlo con ella hacia el comedor. Planeaba preparase un desayuno potente puesto a que lo último que recuerda haber comido eran los sandwiches de Taehyung.

Revisando sus notificaciones se sorprendió un poco cuando vio la de Taehyung entre ellas. 

- No hay de qué, nos vemos ahora.

Frunció el ceño y tecleó rápido. - ¿Qué haces despierto? 

El tick azul no tardó en mostrarse y pudo ver a su amigo en linea. 

- Estoy despertando y como no tengo nada que hacer, le doy  unos últimos arreglos a las fotos. Quedaron geniales.

Y Jisoo por alguna razón desconfió de la respuesta. 

- ¿Ya están todas?

- Sí, te las llevo listas para entregar. Prepara los otros trabajos así entregas todos juntos. 

Le dejó en visto, recordando que quizás no tenía tanto tiempo para un desayuno elaborado. Se sirvió un poco de yogur y mientras bebía de el subió las escaleras, volviendo a su habitación. Juntó su dibujo del perro junto a su caligrama de perro y los colocó dentro de una carpeta, y no, la carpeta no tenía diseño de perros a pesar de que Jisoo hubiese deseado que sea así. 

Su celular sirvió de distracción hasta las siete, que fue la hora en la que Taehyung llegó. Su sonrisa era única, él realmente estaba orgulloso de su trabajo y Jisoo a pesar de no haber visto nada, se sintió orgullosa también.

  — De verdad gracias Taehyung. No sé qué haría sin ti. — Murmuró abrazándolo con fuerza, besando su mejilla un par de veces. Tuvo que hacer puntas de pie para lograr aquello pero no le importó. 

— Siempre puedes contar conmigo, Jisoo. — Murmuró y talló sus ojos, acción que pasó desapercibida por la menor. —  ¿A qué hora debes entregar el trabajo?

— A las diez, falta aún. ¿Quieres salir a desayunar y festejar mi futuro diez? 

— Me gustaría pero tengo unas cosas que hacer, sin embargo, para las diez prometo estar contigo. Revisa las fotos y dejame un mensaje. ¿Sí?

La pelinegra hizo un puchero y asintió, tomando con fuerza la carpeta de fotos que Taehyung le había dado. 

— Nos vemos, linda. — Susurró contra su cabeza y dejó un beso en ella antes de irse. La menor suspiró y se dirigió hacia el comedor, sentándose en unas de las columnas y sacando las fotos, era hora de ver la magia de Taehyung. 

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Confieso que no recordaba la contraseña de la cuenta, matenme.