Room n.72

Capítulo nueve: Oficial

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Las manos de JunMyeon temblaban. Él no entendía por qué, JongIn no había dicho nada aún, y sin embargo ya luchaba por respirar y su rostro había comenzado a sudar.

"¿Una... persona? JongIn, ¿has visto a una persona?"

Sabía lo exagerada que era su reacción, pero no podía controlarse, ni controlar su cuerpo. Solo por la maldita duda de que el otro pudiera traicionarlo de esa manera; lo estaba volviendo loco, ahora que su "relación" parecía haber tenido un giro.

JongIn le miró confundido.

"Sí, nos conocimos en el estacionamiento subterráneo y..."

"¡No!"

El pálido chico saltó a sus pies, casi gritando.

"¡Ya basta, JongIn! Dime la verdad, ¡ahora!"

"¿Qué? ¿Qué verdad?"

Se aflojó la corbata y la dejó caer al suelo, desabrochó algunos botones de su camisa mostrando un mínimo dobladillo de piel blanca y sudor.

"¿Esta persona es hombre o mujer?"

Comenzó a caminar de un lado a otro como un loco, jadeando como un esposo que ansiosamente ayuda a su esposa en el parto.

"¿Hombre? ¡¿Mujer?! Yo no... JunMyeon, yo-".

Y JongIn todavía no lo entendía. No entendía el sentido de esa agitación, ni siquiera había mencionado nada.

A menos que...

"Espera, no me digas... ¿ese tipo también te buscó a ti?"

"¿Qué?"

"Si lo hizo... Entonces podríamos reunirnos los tres y hablar de ello, podríamos..."

"¡¿Qué?! ¡No!"

JunMyeon corrió hacia la puerta del baño.

"¡Esto es asqueroso, JongIn!"

Sintió una imperiosa necesidad de lavarse la cara y quitarse la ropa inmediatamente, JongIn le siguió y puso una mano sobre su hombro izquierdo.

"Vamos, cariño... ¿Qué te pasa?"

"¡NO ME LLAMES CARIÑO, MALDITA SEA!"

Pero JunMyeon le devolvió el golpe, se detuvo de espaldas, justo frente a él.

"Dime por qué, JongIn. ¿Por qué me traicionaste?"

"¿Qué...?"

¿Qué?

"¿Perdón? ¿Traicionarte?"

"¡Oh, sí!"

Entonces se volvió y le miró directamente a los ojos. Se mordió el labio y frunció el ceño como si su cerebro palpitara fuertemente contra las paredes de su cráneo, su expresión se tornó de ira y dolor.

"Dijiste que viste a una persona, ¿realmente crees que soy tan estúpido? Al menos podrías habérmelo dicho de otra manera".

Se miraron fijamente durante unos segundos. Mientras tanto, el olor a patatas fritas se había extendido por todas partes, ya que ambos estaban intentando cocinarlas. JongIn abrió la boca y los ojos simultáneamente, impresionado y conmocionado, de repente se dio cuenta de lo que estaba sucediendo.

"Tú crees que yo..."

Se puso las manos en las caderas, suspiró. Echó hacia atrás la cabeza y comenzó a reírse histéricamente, la expresión de JunMyeon cambió.