Capítulo 10

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El resumen de lo que pasó luego:
Después de la caída dramática de mi madre,el secuestrador se dignó a pedir un millón de pesos como rescate a nuestros cuerpecitos,lo que era imposible de recaudar. Florencia perdió la paciencia y le dió un sartenazo en la nuca. La yuta se lo llevó y las gurisas se quedaron a dormir.
¡Me secuestraron!,lo voy a añadir a la lista de cosas para contarle a mis nietos cuando sea una abuelita.
Los pendejos no pudieron quedarse mucho tiempo pero vimos algunas cosas en netflix,me quemaron las cortinas otra vez y casi se corta la luz.
Obviamente les eché la culpa de mi secuestro,si no hubiesemos hecho un desastre y no se hubiera ido la luz,ese "técnico" nunca hubiera cruzado mi puerta ni nos hubiera retenido.
Si,dije la palabra "hubiera" cuatro veces en una misma oración, ¿y saben qué? No está la profesora de idioma español así que me chupa un huevo la gramática ahora mismo.
A las dos de la mañana mi madre los saco a escobazos por la puerta y las chicas y yo nos fuimos a cojer,digo,dormir.

Ahora mismo me estoy despertando y como tengo a Belén acostada en mi culo se me dificulta un poco levantarme pero bueno,la tiré a la mierda,pobre.
-¡La putisíma madre,Irene! ¡¿No podrías ser más suave para despertar a las personas?!-gritó acariciandose una teta. Normal supongo.
-¡No me insultes!-contestó mi madre entrando a mi habitación con una escoba nueva en la mano.
-Disculpe señora.-Belén le hizo una reverencia y mi madre se fue.
-Que loco todo.-dije,luego se escucharon los ronquidos de Florencia abajo de la cama.
-Yo me voy a hacer el desayuno.-corrí rápido afuera del cuarto y bajé a la cocina. Flor era una persona imposible de levantar y si lo lograbas seguro te comías una piña.
Me hice la leche,si,leche de vaca,por favor chicas,horario infantil ahre, y unas tostadas.
Me fui al living cuando escuché como se rompía algo de vidrio en el piso de arriba. Si las perras me rompen el zapatito de cristal que tengo en mi estante les voy a meter los restos por el culo. Ese es un regalo de mi difunto abuelo que me lo fabricó él mismo cuando yo tenía cuatro años,ese zapatito me entraba a la perfección en ese momento. En esa época de mi corta vida me había convertido en fanática de "La Cenicienta". Supongo que el karma que al final recibían las hermanastras y la bruja asquerosa que tenía la princesa de madrastra me causaba una satisfacción impresionante.
Como decía,me fui al living y prendí la tele. Inmediatamente apareció el reportero hablando en la puerta del zoológico,subí el volúmen ya que me interesaba.

-Lo que sucedió esta mañana es que una manada de unos 245 monos tití hiperactivos y extremadamente violentos de aproximadamente medio metro se escaparon del zoológico y andan sueltos por nuestra queridísima ciudad de Buenos Aires. Las autoridades llamaron a todo tipo de veterinarios y especialistas pero aún no saben como hacer para parar este desastre.- fue lo último que escuché antes de apagar la tele y tomar el último trago de leche.
-Suficiente televisión por hoy.-me dije a mi misma. En ese momento,se empezaron a escuchar ruidos raros de afuera.
Las chicas empezaron a bajar las escaleras todas despeinadas y con la ropa desarreglada.
-¿Qué son esos ruidos,Irene?-preguntó Belén.
-Ni idea,ya me fijo.-me paré y corrí las cortinas.
De un momento a otro ví pasar corriendo a Duki.
-¡¡¡AHHHHH!!!-se escuchaba su voz retumbar en la solitaria cuadra. Que raro que no salieran los viejos chotos a armar una guerra de objetos.
Segundos después alrededor de unos 50 monos de medio metro que corrían a toda velocidad levantando nubes de polvo pasaron haciendo los mismos ruidos raros que se escuchaban de lejos.
Por si no entendieron bien lo que está pasando, ¡Mauro está siendo perseguido por una manada de monos tití locos!.
Corrí a la puerta y la abrí.
-¡Mauro!-grité. Este me escuchó,se dió vuelta y corrió a mi casa.
Estaba a punto de entrar cuando un mono se le subió a la cabeza y lo comenzó a golpear.
Belén y Florencia estaban tentadas con todo esto.
Se tropezó conmigo y cayó de cara al suelo,aproveché para agarrar al mono de la cola,darle un par de vueltas en el aire y tirarlo hacia la puerta,impidiendo que entraran otros que se habían dado cuenta de lo que pasaba.
En menos de un minuto tenía la mesa del comedor bloqueando la puerta principal y una manada de monos hiperactivos y enojados intentando entrar.
¿Ni un día tranquila se puede estar?  De todas formas lo que más me preocupaba es que afuera había 50 monos pero habían dicho que en total eran 245.

       Por cierto,¡feliz año nuevo adelantado! No se si mañana voy a poder subir algo. Hasta el próximo cap.

Miradas Oscuras[Duki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora