Friends [Yoonseok]

E P Í L O G O

El calor veraniego comenzaba a sentirse a mediados de agosto. Un joven de cabello castaño se encontraba sentado en el sillón de su casa mientras escuchaba hip hop a través de sus viejos auriculares; mirando su móvil a la espera de un mensaje de texto.

Faltaban sólo diez minutos para las tres de la tarde cuando notó que un chico de cabellera oscura tocó el timbre de su hogar.

El pelinegro miró la hora en su celular para cerciorarse que estaba a tiempo para la tan ansiada cita con su novio.

Sólo tuvieron que pasar unos cuantos segundos para que Yoongi se parara a revisar por la mirilla.

Los ojos de Yoongi vagaron al chico de lentes y playera blanca que se encontraba mirando a todas partes en la espera a que alguien se dignara a atenderle. El castaño seguía preguntándose por qué siempre se veía tan nervioso al tocar la puerta, le resultaba sumamente tierno.

Finalmente decidió abrir la puerta.

"Hey" saludó con su habitual tono desinteresado.

El pelinegro alzó la mirada. Conocía esa voz.

Y Hoseok seguía sintiéndose como la primera vez que hicieron contacto visual...

Jung le sonrió como siempre en respuesta. Ese acto, a pesar de ser tan común y simple, aún hacía el futuro de Yoongi más brillante.

"¡Feliz aniversario!" gritó Hoseok con emoción, abriendo sus brazos exageradamente.

Y sí, definitivamente utilizaba demasiados signos de exclamación en la vida real.

Yoongi se acercó y rodeó su torso. Y era extraño, porque a pesar del tiempo que pasaron separados por diversos problemas, fue muy fácil para Min acostumbrarse a la cercanía de Jung Hoseok. Fue muy fácil enamorarse de él.

"Qué emoción" respondió monótono. "Pasa, moriré de calor aquí..." dijo separándose de su torso y tomándolo de la mano. "Ma, ya llegó Hoseokie" anunció sin elevar la voz lo suficiente.

La señora Min asomó la cabeza desde la cocina e hizo una pequeña reverencia dedicándole una sonrisa.

"Buenas tardes" dijo el mayor con un poco de timidez. Yoongi simplemente rodó los ojos y procedió a regresar a su cómodo asiento. "Traje papas fritas, videojuegos y algunas películas" avisó acompañando al más bajo.

"Bien; sólo espera a que mamá se vaya..." soltó por lo bajo y algo avergonzado.

"Si esperas que me vaya para que follen en mi sillón nuevo estás muy equivocado, pequeño" intervino la mujer sacando unas palomitas del microondas. Yoongi rodó los ojos por segunda ocasión, acostumbrado a los comentarios fuera de lugar de su madre; por su parte, Hoseok palideció y se removió en su lugar incómodo. "¿Quieres, Hoseokie?" ofreció la mujer sentándose a la derecha de su hijo, a lo que el joven negó con el cabeza, aún demasiado avergonzado para hablar.

"Lo estás asustando" dijo Yoongi mirándola mal. "Dijiste que irías con Jiyaeng..." le recordó Yoongi frunciendo el ceño.

"Sí, pero dijo que pasaría por mí" respondió la dueña de la casa.

"Mamá..." la llamó provocando que dejara de prestar atención a las palomitas. "El centro comercial está a dos cuadras, por dios".

"Bueno, ¿y qué?" suelta la mujer con molestia, el castaño sólo rueda los ojos una vez más y pasa un brazo por los hombros de Hoseok dejando caer su cabeza hacia atrás. "No pienses mal, Hoseok. No soy una vaga como el muchachito..." comentó mirando directamente al bajito. "Pero prefiero ahorrar ese tiempo para recordarle a mi único hijo que preferiría que mantenga el lugar en orden. Mira que decirme: ma, necesito la casa sola para cuando Hoseokie llegue" dijo la mujer imitando terriblemente a su hijo, "es un sinvergüenza, no sé qué le viste".