Friends [Yoonseok]

T R E I N T A

Y como le había prometido, Yoongi se encontraba cruzando el portón de la casa de los Park. Trotó los escalones que daban a la puerta principal y vacilante tocó el timbre mientras observaba la punta de sus zapatillas en un signo de nerviosismo.

El sonido de la puerta siendo abierta lo sacó de sus pensamientos y levantó la mirada encontrándose con nadie más que Kim Seokwoo con un rostro de confusión pura no muy diferente al suyo.

"Oh, cielos" susurró Yoongi para sí mismo y a punto de correr las cinco cuadras que le separaban de su casa.

"Hey" murmuró Rowoon con un ligero sonrojo mientras alzaba la diestra.

Yoongi, debatiéndose entre huir y conservarse con vida, puesto que apostaba sus pocos ahorros a que cierta chica de cabello morado se encontraba dentro de esa casa, o afrontar, lastimosamente, su destino y actuar con madurez.

"¿Qué tal?" respondió con mayor incomodidad.

Antes de darle tiempo de responder, Jimin logró asomarse y sonrió al instante.

"Creí que no vendrías" confesó con alivio. "Ven" ordenó e hizo señas para que pasara.

Rowoon se removió en su lugar, abriéndole el paso y Yoongi se adentró intentando hacerse pequeño y desaparecer.

Como predijo, Shin Naesung se encontraba echada en el sillón haciendo zapping con notable desinterés. Al sentir de la presencia de alguien más se sentó correctamente y sus ojos se abrieron como platos.

Seokwoo cerró la puerta y fue en ese momento que Yoongi realmente temió por su vida, porque se encontraba encerrado con tres personas a las que les había hecho tanto daño y...

"¿Yoongi, estás bien?" preguntó Jimin claramente preocupado. "Te ves más pálido que de costumbre..."

"Y está sudando" señaló Naesung llevándose una paleta que se encontró en la mesita de té a la boca.

"¿Estás enfermo?" se atrevió a preguntar el más alto.

Yoongi, un poco -muy- asustado, negó con la cabeza. Y dios, todo era tan vergonzoso. Tener que convivir con sus ex mejores amigos con los que terminó tan mal lo hacía sentir enfermo, efectivamente. Si bien tenía deseos de arreglar su desastrosa vida, no se sentía listo.

"Bien, siéntate" dijo Jimin tomándolo del brazo. ¿Por qué Yoongi tenía que hacer un show siempre?

Naesung acomodó los cojines mientras el más bajo lo encaminaba hasta el sofá.

"Iré a la cocina a traerte un té..." avisó Jimin haciendo obvio su plan de dejarlos solos y desapareció del salón principal, adentrándose a la cocina y cerrando la puerta con llave tras él.

La habitación se hubiera quedado en un silencio sepulcral de no ser por la televisión, la cual trasmitía uno de esos dramas repetidos.

"Esa es la parte en que se entera que no es su hija, ¿no?" dice, obviamente, Seokwoo.

La puerta de la cocina se abre con fuerza dejando ver al pequeño de cabellos anaranjados claramente molesto mientras camina directamente hasta el televisor, desconectándolo.

"No mames, Rowoon" dice fastidiado. "¿Podrían hacer las paces y dejar de actuar como pendejos?" suplicó.

"Lo dice por ti, Ro" murmura la morena con diversión.

"Ah, váyanse a la mierda, idiotas" dijo Jimin y volvió a la cocina.

Min, quien seguía sentado -y tal vez, esperando ese té-, aclaró su garganta, llamando la atención de los presentes.