→Capítulo 9

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La mañana estaba templada y los rayos del sol iluminaban con tenuidad, trayendo consigo las pequeñas brisas del otoño que poco a poco se iba acercando. Namjoon se encontraba limpiando unas de las tantas mesas del lugar, lustrándolas con mucho cuidado, junto con la ayuda de sus compañeros. Dejaban preparado la estancia para lo que sería el resto del día, soltando con el pasar de los minutos unos bostezos que iban tomando mayor frecuencia. Seokjin observaba el arduo trabajo de los menores, desde del otro lado del mostrador, notando las caras adormiladas y sin energías de estos mismos. Casi por instinto-de ser el mayor que tiene que protegerlos-o por amabilidad, colocó unos granos en la cafetera mientras que preparaba en silencio unas pequeñas tazas de café, colocándolas sobre una bandeja de cerámica. Llenó las cuatro tazas con el líquido oscuro, cortando este color con una pequeña cantidad de leche. Todavía faltaba media hora para abrir, por lo cual pensó que podrían subir sus ánimos tomando un poco de café para que este les sirviera como combustible para su glucosa. Se acercó al centro del lugar y apoyó la bandeja en una de las mesas que se encontraban allí, llamando la atención de todos los presentes.

-¿Qué haces Seokjin? -Preguntó Jungkook acercándose a la mesa en donde yacían las tazas.

-Vengan chicos, les hice café para que cambien esas caras de zombis.-Dijo como respuesta al castaño, llamando la atención de los menores.

Estos últimos se acercaron, trayendo consigo unas pequeñas risas ante el comentario del mayor de todos. Tomaron de las tazas con suma lentitud, dejándose llevar por el aroma que desprendía, soltando de vez en una cuando unos suspiros al dar un sorbo. Namjoon observó a Jin, sentado en una en la silla a un costado del grupo mientras tecleaba unas cosas en el celular y las anotaba en un cuaderno negro que pertenecía al negocio.

-Creo que también tendrías que tomar un poco- Dijo acercándose mientras le extendía la taza. Casi fue por un instinto o quizás necesidad por querer ver el resplandeciente rostro del mayor.

-Pero te lo hice para ti...-Contestó apenas levanto la mirada, cruzándose con la del menor.-Estoy bien, bébelo tú-Insistió, volviendo con su trabajo.

-Oh vamos, también tienes cara de cansado...Si no bebes yo tampoco lo haré.-Soltó.

Buscaba que el mayor le hiciera caso porque, por más que este último intentara ocultarlo, se notaba en su rostro un cierto cansancio que se reflejaba en sus ojos que eran acompañadas por unas ojeras. El menor se sentía de alguna forma mal por eso y quería a toda costa buscar algo que cambiara aquello.

Seokjin dejó salir una pequeña risa y acto seguido tomó la taza, bebiendo de esta un pequeño sorbo y devolviéndosela al menor.

-Bien...-Dijo como contestación al aquel acto el menor, quedándose un poco inconforme.

Bebió un poco y la dejó sobre la mesa, junto al cuaderno y la lapicera que ocupaban un espacio en esta. Tocó el hombro de Jin, logrando que este lo mirara, y señaló la taza.

-Terminé, tomate el resto antes de que abramos.-Ordenó-con amabilidad-Namjoon mientras se iba hacía otro lugar lejos del mayor.

-¡Hey!-Intentó detenerlo el mayor, pero a cambio solo obtuvo la espalda del menor alejándose conforme iba caminando.

Sonrió al ver la taza y soltó un pequeño bufido. De alguna manera le pareció gracioso-o quizás adorable-aquel acto. Miró la vista por la cual se había dirigido el menor y sonrió nuevamente al ver el pocillo, esta vez, llevándoselo a la boca para consumir el café.

Love you like a coffee 『Namjin』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora