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Capitulo no apto para menores, pero ya si quieren saltarse mis advertencias :/ en fin, pueden saltarse este capitulo si así lo desean XD no se perderán de mucho... solo a nuestros personajes jugando al toca toca :v
Hades me miro con sus orbes dorados oscurecidos por el placer, su ceño yacía fruncido por lo que a el no le gustaba la idea de que lo dejase con las ganas.
—No tan rapi...
Mis palabras fueron interrumpidas cuando Hades ataco mi cuello con sus carnosos labios. Sus labios repartían cálidos besos que acarician mi fría piel sacándome pequeños gemidos de placer. Lleve mis manos a su pelo negro con ansias separándolo de mi cuello y juntándolo agresivamente con mis labios en un beso necesitado y demandante. Sus manos se deslizaron por mis omóplatos hasta la zona baja de mi espalda que, esta al sentir su toque se arqueo más a su cuerpo. Sus manos siguieron bajando hasta llegar a mis muslos y alzarlos para después que estos se cruzaran alrededor de su cintura sintiendo una presión contra mi vientre bajo. Gemí en su oído acercándome más a su cuerpo con necesidad, todo él me estaba volviendo loca de una manera especial. Cada toque, cada caricia, cada beso, era fuego que recorría mi cuerpo y lo encendía de una manera placentera y única.
Nuestros labios se conectaron en un beso que demostraba todo lo que sentíamos el uno por el otro, un beso lento que demostraba el amor que sentíamos. Nada de esto se sentía mal o incomodo y por eso lo supe, supe en ese momento en el que nos besábamos con la luna sobre nuestras cabezas, iluminando nuestro alrededor siendo de testigo de nuestro amor y el agua sobre nuestros calientes cuerpos. Supe que lo amaba y que el también lo hacía.
Hades rompió el beso dedicándome una tierna mirada. Sus hermosos ojos no hacían más que brillar dedicándome en secreto miles de promesas que, estaba segura y él se encargaría de cumplir.
— ¿Estás segura de que quieres hacer esto? — las palabras fueron susurradas directamente a mi oído erizando cada poro de mi piel. Poco a poco estaba perdiendo la cordura, me sentía desfallecer. No sabía cómo me sentía, no sabía que sentir, pero si de algo estaba segura es que no quería abandonar este sentimiento. No quería parar.
Mire sus ojos con burla, hace pocos minutos el parecía muy decidido a pasar por alto mis palabras. Aun así mi traicionero cuerpo se pego mas al suyo notando que, efectivamente una presión colisionaba con mi vientre. Sabía lo que quería, pero Hades era un ser que no se conformaba solo con actos, él quería oírme decirlo, suplicar lo que los dos deseábamos con ansias.
—Tu solo sigue y no pares— murmure contra sus labios antes de unirlos en un beso necesitado. Sus manos se trasladaron a mi trasero acunándolo levemente mientras que aun sujetándome y con mis piernas alrededor de su cadera empezó a caminar hasta que mi espalda termino chocando con una de las enormes piedras de la cascada. Sus manos recorrieron mi cuerpo con delicadeza, sus labios besaron mi clavícula repartiendo cálidos besos que no hacían más que desesperarme. Cuando pensé que mi liberación llegaría Hades se detuvo. Entre jadeos lo mire fulminándolo ¿Por qué se detenía?
Pero todas mis suplicas fueron calladas cuando de una estocada su masculinidad entro en mi deslizándose por mis estrechas paredes. Mis uñas se clavaron en su espalda dejando que pequeños hilos de sangre corrieran por su piel. Hades pareció no importarle, el seguía aun sin moverse temiendo que por su arrebato me hubiera hecho daño. Mis caderas se movieron provocativamente alentando a Hades que de inmediato empezó a salir y entrar en mi cuerpo tocando los puntos necesarios para enloquecerme. Gemí cuando su cálida boca atrapo en el acto la cima de mis fruncidos y adoloridos pechos. Succiono y lamio la zona deleitándose con el sabor de mi cuerpo mientras que su otra mano se encargaba de mi otro pecho. Estaba sumergida en una nube de placer, nuestros gemidos no hacían más que resonar por el eco del bosque. Solo estábamos nosotros dos saciando nuestros más placenteros y deseados cuerpos. Dos seres sobrenaturales disfrutando de su infinito amor. Todo se sentía tan bien, tan correcto.
—Te Amo Hades- pronuncie en un gemido cuando de nuevo su cuerpo entro en mi con fuerza.
—Hasta el infinito y más allá Raven, yo también te amo.
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Infectados [EN EDICIÓN]
Ciencia FicciónEl mundo estaba tranquilo hasta que ellos llegaron. Todos vivian felices hasta que se contagiaron. Ahora en bestias se han convertido matando a todo ser vivo. Y las personas restantes en muros se han refugiado con la promesa de no volver a salir de...