Persiguiendo al Diablo. (Completa). Saga "Intensos"

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Elena

—Pareces asombrada —la voz de tal Andrew es más suave y gentil, se sienta en una silla a mi lado mientras revisa mi temperatura

—Perturbada sería la mejor palabra —la zanahoria parece inquieta observando la escena— ¿No debes trabajar? —en días de semana no tiene tiempo después del almuerzo. Ante su expresión puedo distinguir la verdad—. Ve a trabajar, mucho tiempo has estado aquí, no me voy a morir si no estás

Parece haber un conflicto en él, pero logra acceder a mi petición porque sino la otra opción es echarlo, por suerte escogió la opción pacífica 

—Es un gran placer conocerte —parece muy feliz por este encuentro— , aunque las circunstancias no son las apropiadas —revisa mi temperatura y empieza a escribir en una agenda pequeña— , la fiebre bajará con estas dosis, para la mucosidad te recomendé un jarabe porque no es grave. En esa pequeña lista puedes ver los tiempos de dosis —observa la mesita con las cosas que la zanahoria trajo, selecciona una tableta de pastillas y un jarabe— , son estos, lo demás no son necesarios

—Puedes llevártelos —me vuelvo a recostar en la cama, pero el sujeto coloca una bolsa de comida encima de mi velador

—No puedo irme hasta que termines de comer

No puedo objetarme, tomo asiento mientras tomo esa bolsa, para mi sorpresa descubro un gran plato de sopa caliente

—Es un concentrado de pollo —agrega al pasarme el cubierto descartable— , es de un restaurante cerca a mi trabajo

Este sujeto tiene otra personalidad, se siente confianza y calidez a su lado. 

—Por estos detalles debes ser popular con las mujeres —empiezo a comer el concentrado. Realmente está muy bueno— , además de tu atractivo, eres alguien quien hace sentir comodidad. Tienes esa mirada de un chico quien debes proteger y amar

—Nunca había escuchado algo parecido —es muy sincero al contestar— , como para con chicos solo me dicen cosas hirientes —levanto una ceja al escuchar la parte donde para con muchos varones— . No en ese sentido —corrige casi de inmediato

—Me parece extraño ser la única mujer quien te lo haya dicho —parece avergonzado por algo— , pero puedes contar conmigo —mi declaración lo hace sonreír de una manera tierna— . Prometo decirte las cosas buenas si alguien más no te lo dice

—Eres una persona muy considerada —agradece mis palabras— , Nickolas se preocupa por ti — lo escucho sin opinar— , trata de no malinterpretarlo, él es muy indeciso con algunas cosas

No sé hasta dónde sabe, son gemelos, pero eso no significa el haber compartido todas sus cosas. Andrew se despide haciéndome recordar sobre tomar mis pastillas. De nuevo sola en mi departamento dejo a un lado el bold de concentrado para poder descansar, aunque haya conversado con él de una manera tranquila, se me hizo difícil poder mantenerme despierta. 

Cuando despierto me sorprende ver a la zanahoria en mi pequeño estar, voy hacia ahí con mi manta sobre mis hombros, al acercarme observo a la zanahoria dormida. Me acerco para verificar si duerme, y en efecto, no abre sus ojos o quiere molestarme. Me enderezo y trato de comprenderlo, no es necesario venir a verme, mi salud no va a empeorar por estar sola aquí. 

No es la primera vez enfermándome 

La zanahoria debe estar muy cansada, su locación está lejos y ha estado conmigo en su tiempo de trabajo, ni siquiera son las diez por eso me pregunto si habrá comido. Si se enferma por mi culpa, me voy a joder porque no estoy lista para cargar con esa responsabilidad.