Capitulo 23

46 6 0
                                    

Dos semanas después...

Los cambios en mi departamento fueron muy provechosos, además de que con Matt aquí, el ánimo está más positivo y me rodea una Chloe más feliz.

Entre Matt y yo remodelamos su habitación, y principalmente cambiamos su cama, por una a la que él pudiera estar cómodamente, además de cambiar la mesa rosa de dibujar por un escritorio grande y blanco, en el que tanto Matt como Chloe puedan adaptarse.

Con Matt aquí mis noches son más tranquilas y puedo dedicarle tiempo a mis obligaciones mientras Matt cuida a Chloe.

En cuanto a mi sobrino, estamos todos muy ansiosos por que llegue, incluso Chloe me pregunta cuando ella lo podrá ver. Solo faltan unas dos semanas y Nathan esta vuelto un caos, desde que Sarah respira hondo está el preguntándole si ya va a nacer. No se ha afeitado desde hace unos días, porque tiene miedo de distraerse y que el niño quiera nacer. Es muy divertido de ver.

Según el doctor él bebé debe nacer el 3 abril. Pleno miércoles.

La relación con Hendrick ha mejorado, reinventamos un horario y puedo decir que estoy muy a gusto. Ahora hay más confianza entre los dos y el trabajo se hace más ameno.

Saliendo de la ducha encuentro a Matt y a Chloe durmiendo en su regazo en mi cama, como suelen hacer. Hasta aproximadamente las doce que Matt despierta y se lleva a Chloe a su habitación.

Mientras me visto enciendo el ordenador y chequeo que tengo un nuevo Messenger de Hendrick. Tan puntual como siempre.

-Buenos días Smith.

-Buenas noches Hendrick.

La zona horaria en Londres es cinco horas más que aquí en Canadá. Aquí son las once de la noche y allá son las cuatro de la mañana. Si, Hendrick es muy madrugador.

-¿Todo bien en su día?

-Sí, todo bien. Esperando a mi sobrino con ansias.

-O si, cierto. Ya falta poco para que nazca.

-Asi es. ¿Qué tal es suyo?

-Smith, no tengo sobrinos. Mis hermanos son muy jóvenes.

-Eso no. Me refiero a su día.

-¡Oh valla! Bueno, ayer por fin firme mi divorcio.

-Al parecer lo hace muy feliz.

-No se imagina cuánto. Supe que ese matrimonio me traería problemas desde que mi padre empezó a constatarlo. Soy un hombre libre.

-¿Su papá le dijo con quién casarse? ¿No tiene usted treinta y tres años?

-En realidad tengo treinta y cuatro. Mi papá tiene planes de retirarse muy pronto, y aseguró que no lo haría hasta que yo estuviera casado. Empezó a presionarme, y básicamente empezó a presentarme amigos de la familia con hijas de edad suficiente para casarse. Yo estaba cansado de todo ese drama, conocí a una y, básicamente tres meses después me casé con ella. No la conocía ni me interesaba, simplemente quería terminar con todo aquello. Hace unos seis meses descubrí que falsificaba mis firmas y me sacaba grandes cantidades de dinero, además de que se veía con otra persona. Por suerte nunca deseé tener hijos con ella. Ayer finalmente pude firmar mi divorcio.

-Valla, pasó por una situación bastante incomoda. Si ayer pudo firmar su divorcio, entonces fue un gran día.

-Lo fue. ¿Qué hay de usted? ¿Alguna mala experiencia?

-En realidad no. Pero en mi caso mi mamá es la que me insiste en que cuanto antes debo encontrar al hombre de mis sueños. No me veo casada aun, ella tendrá que esperar.

-Creo que estoy un poco confundido, Smith. ¿Hombre de sus sueños? ¿Casada?

Sabía perfectamente que él no sabía que yo era mujer, y como siempre, me ponía en una situación bastante divertida.

-Soy mujer, Hendrick. ¿No sabía?

Su respuesta tardó exactamente unos ocho minutos en llegar. Siempre me llena de diversión aclararles a las personas que soy mujer, pero ahora mismo me estoy controlando para no largar una risotada y despertar a Matt y a Chloe.

-Sinceramente me ha tomado por sorpresa. Usted nunca había mencionado ese detalle.

-Pensé que sabía. Además pensé que lo había percibido en mis respuestas.

-Definitivamente eso explica la rapidez con la que hace los proyectos. Estoy muy sorprendido. Entonces su nombre es ¿Kendall?

-Efectivamente si, ese es mi nombre. Culpe a mi madre por eso, esperaba un varón. Mi segundo nombre es Jane por si se siente más cómodo.

-¿Kendall Jane? Esto me tomará días somatizarlo. No me malinterprete.

-Descuide, Hendrick. Me pasa más veces de las que usted puede imaginarse.

-Bueno, basta de apellidos Kendall. Mi nombre es Hunter. ¿Cuántos años tiene?

-Tengo 27, Hunter Hendrick.- su respuesta nuevamente tardo en llegar, pero supongo que debe estar acomodándose a la idea de que soy mujer.

Luego de dar por terminada nuestra conversación bastante comunicativa, empezamos a trabajar y a las una, terminamos. Para el eran las seis de la mañana, hora de empezar su día, y para mí, finalmente, acababa de terminar.

~*~

Las semanas pasaron más rápido de lo que pude notar, y toda nuestra atención estaba puesta en la panza de Sarah. Esos últimos días mi sobrino no paraba de patear y aunque para nosotros resultara una ternura, Sarah y sus muecas de dolor, no opinaban lo mismo.

Ya eran las seis de la tarde, y Sarah me había llamado diciéndome que aunque el bebé esta con sus nueve meses recién cumplidos, ella no sentía absolutamente nada, y el ginecólogo le había dicho que es algo normal. Mis conocimientos sobre embriología son nulos, pero me puse a investigar un poco y generalmente es normal que los bebés se tarden de uno a dos días.

Nathan no fue a la oficina hoy porque dijo que no se concentraría sabiendo que su hijo va a llegar, y efectivamente, el está ansioso.

Los tengo a todos verdaderamente mortificados porque nadie, absolutamente nadie, sabe el nombre que escogí para el bebé.

...

Eran casi las dos de la mañana, y mi departamento parecía un camping. Lucas seguía en mi departamento esperando noticias de Sarah, Matt estaba de aquí para allá, Angie estaba ansiosa masticando hielo, incluso Chloe estaba desesperada en su rinconcito, yo por mi parte estaba recostada en el sillón cuando recibo una llamada de una Sarah gritando que 'rompió fuente' y un Nathan de fondo lanzando un grito para nada masculino.

...

Pasaron unas cuatro horas, cuando un Nathan con la cara bastante llorosa y sonrosada apareció con el bebito en sus brazos, y empezó el recorrido de conocerlo y para que yo dijera el nombre del bebé.

El pequeño puso sus ojos llorosos en mí, y no pude evitar derretirme al verlo.

-Hola pequeño Jordan, eres muy guapo.- Nathan me lo puso entre los brazos, y luego de yo darle un beso, se lo entregue a Nathan.

-Ve, lleva a Jordan con su mami.

-Me encantó su nombre.

-Lo sé, Nath.

Todo el día terminó lleno de alegría por el nuevo miembro de la familia Smith.

Te Encontraré. *Editando*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora