Deseo sexual | hopev

9.

Taehyung

Las noches se volvieron frías, el deseo de tenerlo de vuelta no desaparecía, por qué sí; a pesar de saber que él era divorciado, además que tenía una hija de cinco años de edad, no logró impedir de que me sintiera atraído por él.
Han pasado varias semanas de las cuales me insinúe, pero a lo visto no le ha tomado importancia, y eso causa mi desesperación; ¿Porque tiene que se tan difícil? ¿Porque simplemente no podemos tener sexo? ¿Porque tengo esta necesidad tan grande de ser follado por el?

A la mierda la cordura, ya no podría esperar más.

Un día por la tarde me dirigí hacia algún centro, ¿Que buscaba? Buscaba provocar a mi jefe, ¿Con qué? Con lencería bebé.

Jung Ho Seok vendría a mi casa esta misma noche por un asunto de negocios. Estaría presente mi padre y algunas personas más, pero aquello no impediría que cancele lo que tenía planeado.

;;

— Quiero este, junto con este. – Le entregue a la cajera la lencería que había escogido, junto con algunos accesorios más. No me importó las miradas que recibía, a final ellos también vienen aquí por las mismas prendas para su pareja.

Regrese a casa algo apurado, pues me había distraído con un pequeño perrito, el cual con inmediatez me encariñe y lo traje a casa, aún no sé que nombre ponerle. Termine de bañarlo y cepillarlo para así dejarlo explorar el lugar.

Tome un baño para después vestirme algo rápido, me bañe en perfume y así salir a abrir la puerta en el momento que sonó.

Horas más tarde..

Tuve que encerrar a mi perro en una de las habitación, ya que este no dejaba de lengüetear a mi jefe, pues aquel último no se quejaba y eso motivó a mi perro a que siguiera, lo cual no me agradó.

Malditos celos, ¿de un perro? Absurdo.

En la mesa solo se hablo de negocios, aquello me aburría, no nací para dirigir una empresa, aún que eso siempre es lo que mi padre quería por ser su único hijo. Mi pasión ha sido ser un gran saxofonista, y eso pienso estudiar después de que termine mi carrera de administración, lo cual faltan solo dos meses para acabar el último ciclo.

Me acomodé mucho mejor en mi sitio, teniendo una sonrisa divertida en mis labios, de un momento a otro tenía una excelente idea de cómo empezar mi plan; quite despacio mis zapatos dejándolos a un lado. Coloque mi pierna sobre la de mi jefe, soltando risitas al ver su expresión, este intentó quitar pero no lo deje; acerque mi pie a su entrepierna dando leves caricias a esta. Me sorprendió ver que este separó un poco más sus piernas.

Mire hacia los invitados, estos estaban en su mundo hablando de negocios; poco a poco fui bajando hasta estar debajo de la mesa. Me costó desabrochar el cinturón de mi jefe, al lograrlo sonreí quitando a la vez su pantalón; acaricie su polla sobre la tela del bóxer, escuché maldecir a mi jefe, pasé mi lengua sobre la tela que impedía que haga contacto con su polla, baje rápidamente su bóxer, sonriendo al sentir como la extensión de su polla golpeo mi rostro al ser liberada; me coloque de rodillas apoyándome en sus muslos, acerqué mi lengua a su glande dándole una lamida a este; baje mis labios a sus bolas chupándolas al sentirlas duras. Sentí como aquel jalaba mi cabello, provocándome, obligándome a que metiera su polla en mi boca; me deje de rodeos y así lo hice, escuchando como un ronco gemido salió de sus labios. Empecé a hacerle una felación, su polla no cabía por completo en mi boca, haciendo que masturbe lo restante.

Apreté sus muslos logrando meter su pene por completo en mi boca, aguantándome las ganas de vomitar o quitarlo de ahí, disfrute la imagen que este me tenía por lo que acababa de hacer.
Seguí chupando de este hasta qué se corrió, no deje ningún solo rastro de semen, sonriendo al tragármelo por completo.

Humedecí mis labios mientras volvía a mi asiento, evitando reír al notar como el contrario se acomodaba el pantalón.

Mordí mis labios al momento en que todo terminó, me despedí de cada uno mientras estos cruzaban la puerta; cerré esta misma antes que mi jefe saliera.

— TaeHyung, ya tengo que irme, por favor permiso.

— HoSeok hyung, ¿me podría dar su opinión? – Lo mire con inocencia, jugando un poco con mis dedos.

Lo vi asentir, chille emocionado mientras subía corriendo hacia mi habitación; me coloque algo rápido la lencería que había comprado, no quería hacerlo esperar.
Me observe al espejo antes de bajar despacio por las escaleras, tenía mis ojos fijos en el suelo.

— ¿Jefe?

Mis mejillas se tornaron de un rojo intenso al notar como este alzó la vista y me miró mi cuerpo, cada detalle de la lencería que llevaba puesta, sonreí aún con el rubor en mis mejillas al ver sus labios entreabiertos.

¿ Ahora que pensará de mí, HoSeok hyung ?