Deseo sexual | hopev

Epígolo

Este capítulo es dedicado a cinco preciosa chicas.

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Hoseok

Detuve cada uno de mis movimiento al oírlo pronunciar dichas palabras.

— Taehyung, creo que..

Una fuerte cachetada recibió mi mejilla después de pronuncia dichas palabras.

— Tú solo cállate y bésame. – Exclamó.

Cerré mis ojos, tratando de eliminar todo pensamiento contradictorio a lo que estaba por hacer; solté un suspiro al estar más aliviado.

Me volví a perder en sus besos, embriagándome con el sabor de sus labios, disfrutando cada mordida suya, maltratando y tratando a su manera a mis pobres labios.
Termine por arrancar la delgada prenda suya; para después bajar mis labios a su cuello, mordisqueándolo y chupándolo un poco, constantes sonrisas se formaban sobre mis labios al sentirlo retorcerse de placer.

— Oh hyung, todo es tan.. ah..

Sentí su fuerte agarre en mis cabellos al momento en que chupe sus pequeños pezones rosados, lo mordí despacio uno de estos para hacer lo mismo con el otro.
Algo apresurado tome su miembro entre mi mano y así masturbarlo, volví a sus labios, besándolo llenándolo de todo el deseo e excitación que sentía en el momento.

— ¡Hyung! ¡Hyung! ...

Aquellos gemidos iban a volverme loco, me ponían tan duro oírlos; sin poder aguantar más, me separé de este y así desabrochar mi cinturón y bajar mi pantalón a la vez, dejando expuesto el gran bulto que me cargaba dentro de mi bóxer.
Lo vi morderse los labios, tomando su miembro entre sí y  masturbarse a si mismo.

No existe otra imagen más excitante que esa.

— Oh Dios, Hyung, follame ya..

Si eso quería, eso le daría.

Baje mi bóxer dejando al descubierto mi polla, separé sus piernas con algo de dureza, introduciendo despacio la punta de mi miembro dentro de su entrada.

— Solo dime si te duele.. - Hable algo preocupado, por el estado en que se encontraba.

Separé sus brazos y a la vez entrelacé mis dedos con los suyos, transmitiéndole confianza en ese simple gesto.

Y así fui introduciéndome poco a poco dentro de él, observar su rostro de deseo con algo de dolor a la vez, no tenía precio alguno. Al entrar por completo, no me moví para así esperar a que este se acostumbrara a mi tamaño. Cuando sentí sus caderas bajar, logrando autopenetrarse un poco, gruñí de satisfacción por aquello, dándome el pase para empezar a mover mis caderas en un movimiento lento pero pasional, estar dentro suyo era el paraíso, sentir como su interior apretando mi polla al pasar de las penetraciones, tome nuevamente su miembro entre mi mano y así volver a masturbarlo al ritmo de las embestidas que le proporcionaba.
Lo sentí tensarse para después correrse en un agudo gemido sobre mi mano, no deje de embestirlo aumentando cada vez más el ritmo, buscando mi liberación en este.

— Oh Hoseok, más rápido.. sí ah..

Lo obedecí, como siempre hasta ahora lo estaba haciendo, lo embestí con más rapidez y fuerza, escuchando el golpe de nuestros cuerpos, el morboso sonido que hacían mis testículos al chocar con su firme trasero, aquel chapoteo por el sudor proveniente de nuestros cuerpos.

Mis embestidas aumentaron, al igual que el segundo orgasmo de Taehyung.

Al pasar cortos minutos, aún sin detenerme sentí una punzada en mi miembro, tensándome a la vez, sintiendo como llegaba yo al jodido orgasmo.
Expulse mi semen dentro de él, soltando un gruñido de satisfacción al ser liberado; salí despacio de él colocándome a un lado suyo, tratando de mantener mi respiración normal, aún que era algo casi imposible gracias a la maravilló aventura que habíamos tenido en tan sólo segundos atrás.

— Taehyung, eso fue.. wao.

— Lo sé hyung...

Tome despacio sus delicadas mejillas, observándolo a detalle un momento, así como lo tuve en frente el primer día en que lo conocí, solo que en esta ocasión lo encontraba a mi lado así como su madre lo trajo al mundo.

Taehyung, Taehyung..

¿Qué más podría decir de este ser tan perfecto?

Bese esos suaves labios, cerrando mis ojos al sentir el contacto, estos eran los labios que me volverían loco en cualquier circunstancia, Taehyung me estaba teniendo en la palma de su mano; ¿ilógico? Sí, ya que son pocos días los que llevamos charlando, conociéndonos, y míranos ahora, envueltos en sudor por la gran follada que tuvimos.

Constantemente me pregunto.

¿Qué efecto tan grande tiene Taehyung en
mi?

Estúpido, es muy estúpido pensar eso de unos de mis socios, por que ¿Quien sabe? Acaso se que le gusto? Quizás sólo esto sea sexo y ya. Sin sentimientos de por medio.
Es muy extraña la relación que llevamos, demasiado para exagerar.

Lo que sí tendré en claro siempre.

Es lo atrevido que puede ser Taehyung en toda situación, exigente y fiel a lo que dice además.

Era evidente que caería a sus encantos.

¿Pues quien no?

Una relación entre el jefe y su nuevo socio, increíble.

Fin.

Yyyy, así acaba esto, lxs amo.
Ando enferma, pero pasará, cumplí mi palabra de publicar aun que sea unos minutos tarde.

Hasta la próxima historia. 🌟

Atte: Anna.