Yo seré tu humanidad

Memorias de una mente perturbada

Killersun.

Las estrellas son las únicas que escuchan mis conversaciones audibles o internas, son las que presencian todos mis actos, que iluminan mis días de paz en que puedo cumplir con mi trabajo, claro para mí lo es, muchos le llaman asesinato, yo, solo limpiar al mundo de los débiles o abominables, ahora me encuentro en mi lugar favorito, una pequeña torre olvidada de la universidad donde nadie jamás se atrevería a visitar por miedo a las ratas o por el rumor de que aquí deambula un fantasma, me encantaría mucho encontrármelo pero claro, eso es imposible, o quizá solo él piensa que mis ojos no son dignos de admirarlo, aquí he instalado una camilla metálica con algunos resortes que encontré ya que este sitio había sido la bodega de tortura cientos de años atrás, el techo hecho cristal está a solo unos 50 cm de mi lugar, eso le da un ambiente espacial, sintiéndome en el espacio sideral observando más de cerca los meteoritos, sí aquí me siento en soledad, esa que tanto me gusta.

Muchos piensan que me complace asesinar, que es lo único que llena mi ser, pero a decir verdad lo hago porque puedo, porque quiero, no porque me masturbe degollando a un profesor o me apetezca la sangre, es verdad que me divierto viéndolos sufrir pero eso es todo y regularmente no me lleva mucho tiempo, no es como si pensará en coleccionar parte de sus cuerpos o sus pertenencias, mi modus operandi es básico, simple, no tengo victimas especiales, no, solo me causa risa verles con miedo, como a todos los ineptos que he asesinado, aunque si, bueno busco algo especial, una persona que sea capaz de hacer brillar mis ojos, mi madre decía que parecía no estar aquí, claro que fue lo único que dijo antes de morir.

¿Qué es la vida?, un suspiro, un destello, es una simple nada, aún recuerdo la primera vez que quite una vida, tenía tres años, mate a una inocente hormiga y recuerdo lo que sentí, no sentí nada, pues nadie siente nada al aplastar una hormiga, al envenenar un mosquito, ¿por qué?, ¿es por su tamaño?, ¿es por su inteligencia inferior?, las personas no sienten nada si aplastan una cucaracha, pero lloran si arrollan accidentalmente un venado, ¿por qué?, ¿cuál es la diferencia?, muchos hacen protestas por los que hacen zapatos con piel de canguro, con piel de serpiente, pero no sienten nada al tragar un pavo asesinado brutalmente en navidad, para mí es así, no hay diferencia, aplastar un insecto, derribar un árbol, asesinar a una persona, para mí es exactamente igual, tres acciones distintas, en realidad son la misma, extinguir una vida.

La primera vez que quité una vida humana, jum, tenía nueve años le rompí la cabeza con una piedra y lo deje abandonado ahí, después volví para tratar de enterrarlo torpemente en un sitio de construcción, al día siguiente el cemento que vertieron encima del lugar hizo de esto, un trabajo muy fácil, dicen que cuando asesinas por primera vez sientes muchas cosas, adrenalina, culpa, frustración, je, yo solo sentí hambre pero deje de sentirla después de la cena y me dispuse a ver mi show favorito de televisión, esa noche dormí como un bebé, para mí tuvo el mismo efecto que aquella hormiga cuando tenía tres años de edad.

Siempre he sido una persona seria, nunca tuve un solo amigo en la vida, todos eran unos idiotas, seres inferiores a mí, cuando tenía 13 años, Kate Douglas me llamó fenómeno, ¡ja!, deje su cabeza cercenada en la puerta de su casa toque el timbre y salí corriendo, su madre fue quien atendió, sé que aún ahora sigue bajo tratamiento psiquiátrico, me consideran genio por mi cociente intelectual de 180, así que termine la universidad a los 18 años, para entonces ya había perdido la cuenta de mis crímenes, pues matar a cientos en una universidad te agota un poco, la señorita Patterson mi profesora de química fue a la primera que asesiné por elección, era una mujer despreciable, ¡ja!, nunca encontraron sus extremidades, ni lo harán, porque tendrían que buscar en el estómago de su perro, Jena Lawler, la porrista de la universidad, aprendió por las malas a nunca llamarme Nerd, tuve una novia una vez, pero la relación nunca funcionó, ella iba a dejarme, decía que yo era una persona fría, que no había forma de hacerme feliz, estaba muy equivocada.