Camino rápidamente y me paro al frente de la banca algo nervioso. Ni siquiera ha notado que estoy en frente de ella.
- Ho... Hola.
Parece ser que no me ha escuchado
- Hola... - dije nuevamente.Levantó la cabeza y me miró como dos personas que no se ven hace tiempo... Fue algo mágico e incómodo a la vez.
- Ahh hola, disculpa estaba algo distraída- dijo rápidamente.
- No te preocupes, ¿ Puedo ayudarte en algo?
- No, ya está.
- Vale mucho gusto me llamo Oliver- le extendí mi mano algo sudada.
- Vaya nombre- exclamó con una bella sonrisa. Taylor, Taylor Miranda así me llamo.
- Que bonito nombre, ¿ Me puedo sentar?
- Pues si, pero ya me tengo que ir, voy algo de prisa. ¡Adiós!- se levanta de la banca y camina a largos pasos.
- ¡Espera! Gusto en conocerte Taylor Miranda - le grité desde la banca. Creo que no me escuchó. Pero que más da.Me levanto de la banca y camino mirando mis pies mientras que en mi mente ocurre una mágica y tonta historia de amor. Dios... No puedo creer que por fin le halla hablado ¡ES EL MEJOR DÍA DE MI VIDA! No cabe la emoción en mi rostro, es tan hermosa, su mirada, su mirada tiene mucho de que contar, solo fueron 3 segundos que la miré fijamente y pude ver un caos, un hermoso caos.
Otro día vagando por estas calles y el tráfico está algo pesado. No quiero ni imaginar todo el escándalo de mi padre al llegar a casa nuevamente sin empleo. Me pregunto ¿Cómo hubiese sido la vida con mamá? ¿Por qué papá se niega a hablarme de ella? ¿Tendré hermanos? La última vez que le pregunté algo al respecto quedé con un zumbido en el oído de tremendo grito, pareciera que todo lo que hiciera le diera rabia, se molesta por todo, se queja a cada rato, por eso prefiero venirme a los parques a buscar aire libre e inspiración para mis canciones y poesías. Aunque mi mente ya tiene una nueva, la mejor de todas. Taylor ¿Como haces para estar todo el tiempo rondando en mi cabeza? Y es que con esa mirada deslumbrante y cautivadora cualquiera podría caer perdido fácilmente como lo estoy yo, su piel canela luce con todo, ni siquiera pude preguntarle su edad, pero bueno Dios, por algo empezamos.
Son las 9:13 am, que rápido va el tiempo, voy caminando por el restaurante Constanza donde creí que conseguiría trabajo, pero bueno, mejores oportunidades vendrán, pero sin embargo, entraré a hablar con el jefe.
- Buenos días! - dije.
- Buenas noches diría yo- contesto el jefe algo serio. Que yo sepa su entrevista era hace una hora y doce minutos.
- Lo siento Sñr Cortés, es que tuve algunos inconvenientes, se que pensará que soy un descarado por venir aquí una hora después de su citación, pero pues, pensé tal vez que aún estarían necesitando un mesero, lo que cuenta es la intención ¿No?.
- Ni siquiera ha empezado su trabajo y ya tiene las primeras fallas, me temo que no le irá bien.
- Discúlpeme Señor, le prometo que no volverá a pasar. Por favor, deme la oportunidad, necesito mucho este trabajo.
- Está bien jovencito, pero primero te tendré que hacer algunas preguntas.
- ¡ok señor! ¡ Muchísimas gracias!.Daré lo mejor de mí, conseguiré el trabajo como pueda.
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Un Pasado Destruye Un Presente...
RomanceSabia que todo iba a terminar mal desde el momento en que la vi... siempre tuve ese gran presentimiento. Mi rumbo, siempre ha estado destinado... Oliver, es un chico solitario de 19 años amante de la música y la poesía. Le ha tocado enfrentarse a gr...