-Papá, quería decirte algo...
+ ¿Qué quieres?
- No mucho. Conocí a una joven hace unas semanas, parece ser que todo va por buen camino.
+¿Y?
- No creas que te estoy contando mi vida, sé que no te importa en lo más mínimo, pero la invité que viniera a casa, y para nadie es un secreto que no tienes buenos modales y te comportas como niño malcriado. Solo te quería pedir, que si en el momento en que ella llegue estás aquí por favor te comportes, no me hagas quedar en ridículo como sueles hacerlo, nunca te pido nada pero esta vez lo que te pido es muy sencillo y por favor espero que por primera vez hagas algo bueno por mí.
+ ¿Qué por primera vez haga algo bueno por tí? Con todo lo que he hecho y te he enseñado y encima me tratas de mal educado. Y ¿desde cuándo los hijos mandan en la casa?
- Por favor papá, solo te pido eso.
+Haz lo que quieras igual no estaré aquí, la casa es toda tuya, y veamos a ver si te sale lo hombrecito... - Se levanta, toma su bolso y sale de la casa.
Por dentro me consumía la ira, pero me pude controlar...
Salgo de casa y me voy al parque a esperar a Taylor como habíamos quedado.
Llega con su hermoso semblante como siempre y me saluda con un beso en la mejilla.
+Hola Oliver. - Dijo sonriendo.
- Hola Taylor ¿Nos vamos?
+ ¡Por supuesto!Caminamos un largo tiempo hasta que por fin llegamos a casa. Mientras busco las llaves en mi bolsillo puedo ver la cara anciosa de Taylor esperando en la cera. Abro la puerta y lo primero que veo es a mi padre acostado en el sofá, pude sentir como la sangre subía a mi cerebro y volvía a bajar ¿Que no dijo que no iba a estar en casa? Pero eso no fué lo peor... Se percató de que ya me encontraba de vuelta y miró hacia la puerta con una sonrisa repugnante.
Hize un gesto algo grosero y coloque la mano en la espalda de Taylor dándole un pequeño arrimón para que entrara. Pude ver la cara de mi padre quien en segundos estalló en risa, reía y reía hasta quedarse sin aire.
-Esa es... Esa es...- Trataba de hablar, pero la risa se lo impedía.
Noté como a Taylor se le caía la cara de vergüenza, pero no era por el comportamiento de mi padre, no lo era...
-¿Esa es tu novia... La chica con... La chica con la que estás saliendo?- Reía sin poder pronunciar nada. - ¿Ella es tu novia? La puta con la que me acuesto todos los días ¿Es en serio Oliver? Te consideraba poca persona pero tampoco para llegar hasta esos extremos ¿ Y dime Taylor, le cobras lo mismo que a mí, o lo haces gratis por ser tú “noviesito”?
Yo estaba atónito. En aquel momento solo se escuchaba la risa de mi padre. Miré a Taylor y era como si su alma no estuviese en su cuerpo en aquel momento, estaba pálida, muy pálida, y lentamente una lágrima bajo por su mejilla hasta llegar a su barba y desvanecerse en su pecho. Me miró con esa tristeza con que te mira un perrito callejero suplicándote con la mirada que le lleves a casa o queriendo decir que tiene frío y hambre, pero en ese momento lo único frío era la mirada de ella. Intenté hablar pero Taylor se echó a correr incontroladamente sin mirar atrás, y yo, yo solo me quedé ahí parado sin hacer el mínimo movimiento y veía como se marchaba. En ese momento me di cuenta que lo que decía mi padre no era una mentira y mis ojos empezaron a cristalizarse hasta que me eché al piso a llorar. Mi padre también lloraba... Lloraba de tanto reír.Mi padre... Quien no ha hecho más que arruinarme la vida. ¡Es un maldito depravado! Ese que se hace llamar mi padre pero que abusó de mí hasta los nueve años, ese que me dejaba solo sin nada que comer mientras se iba a hacer de las suyas, ese que nunca se preocupó en que yo fuera a la escuela, ese que mejor gastaba en tragos de ron antes que ver a su hijo bien vestido, el que dejaba a su hijo solo en cada cumpleaños porque habían cosas más importantes que hacer, si él, el que dejó que aprendiera las cosas por mi cuenta porque en la vida "nada es fácil" ¡pero mi vida no fuera tan difícil si tú no estuvieras en ella! Y aún así, te sientes dichoso porque yo te llame “padre” pero dime querido padre, mírame y dime ¿Qué sientes al verme? ¿Soy lo que querías que fuera? O dime ¿alguna vez te importó quien yo fuera... ? Y a tí madre donde quiera que te encuentres ¡Gracias! Gracias por enseñar a tu hijo a enfrentar y a entender la vida de la manera más cruel, sin tí, sin mamá... Pero no te odio ni te juzgo. No me acuerdo de tu cara pero ¿Sabes? tampoco quiero acordarme ni pensar en ella, no quiero tener en mi mente a alguien que nunca me tuvo en su corazón.... A mi padre lo abandonaron, a tí te abandonaron, y aún así dejaste que ocurriera lo mismo conmigo y aquí estoy sin tí y sin nadie, pero si más adelante tengo la oportunidad de ser padre ante Dios juraré nunca dejarlo pasar por lo que ustedes me dejaron pasar.
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Un Pasado Destruye Un Presente...
RomanceSabia que todo iba a terminar mal desde el momento en que la vi... siempre tuve ese gran presentimiento. Mi rumbo, siempre ha estado destinado... Oliver, es un chico solitario de 19 años amante de la música y la poesía. Le ha tocado enfrentarse a gr...