Cami

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Esta bien. Con tu papa fuimos al centro a una junta y nos quedamos en un hotel porque ya era tarde para regresar. Mañana a la noche volvemos y vamos a festejar tu final de segundo año.

Después de leer el mensaje de mi mama, me sentí mas sola. No podía creer como había arruinado todo con Fede.

Subí hacia la terraza en busca de un poco de paz, pero fue un error. La luz de uno de los cuartos de la casa de los chicos estaba prendida, la del cuarto de Fede.

Fede, estas despierto?

Minutos pasaron y todavía no me había respondido.

Fede ya sé que estas despierto. Podes venir a casa? Estoy sola.

Y seguía sin contestar. Perfecto, noche sola para recordar, pensé.

Fui a mi cuarto y me cambie por algo más cómodo, un short gris y una musculosa al cuerpo azul. Baje las escaleras y lo primero que hice fue dirigirme a la cocina. En mi casa no éramos alcohólicos pero nos gustaba prepararnos algún trago de vez en cuando.

Agarre la botella de Vodka y así sin más fui por mi primer trago, la satisfacción de que arda. Minutos después iba por mi segundo trago y ahí empecé a llorar. Recuerdos venían a mi mente, mi familia destrozada, el funeral, las visitas al psicólogo. Me veo interrumpida porque alguien tocaba la puerta de mi casa.

-Ya voy.- Dije dándole un tercer trago a la botella.- Uf, quien se dignó a aparecer.- Dije mientras dejaba la puerta abierta para que Fede entrase.

-_____ Que... que te paso? Fue por mi culpa?.- Pregunto apenado acercándose a mí que estaba apoyada en la mesa del comedor.

-No sos el centro del mundo Fede. No trates de echarte la culpa.- Dije tocándole el hombro.- La culpa la tengo yo, siempre la tuve yo. No soy buena para nadie.- Dije riendome tratando de parecer fuerte.

-No digas esas cosas.- Dijo con mi botella en su mano.- Ahora vas a subir, te vas a dar una ducha y yo voy a preparar café.

Subí las escaleras y al encontrarme en el espejo de mi baño no creía lo que veía. Una ______ toda despeinada, con el maquillaje por todo la cara mezclado con lágrimas, me apenaba que Fede me haya visto así. Al estar lista baje y me lo encontré esperándome en los sillones. Me senté a su lado sin decir nada y comencé a beber el café. Luego me sentía mucho mejor. Fede se preocupaba por mí, era un buen amigo, podía confiar en él.

-Tengo una historia que contarte. Y espero que después de eso no pienses mal de mí.- Dije mirándolo a los ojos, esperando alguna respuesta suya, como el apretón suave de manos, pero nada paso.- Cami era lo mejor que tenía, de chiquita quería ser ella, era mi modelo a seguir. Ella era un año más grande que yo, así que cuando yo estuve en mi último año de secundaria no tenía a mi protectora de siempre. Empecé a dejar de lado a mis verdaderos amigos y a juntarme con gente, no tan buena, y dentro de ese grupo estaba Tomas. El chico malo, el que andaba en motocicleta, se escapa de las clases pero cuando estaba conmigo era diferente, era dulce. Empezamos una relación, salíamos a bailar y volvíamos de madrugada. Mi familia se empezó a preocupar al igual que Cami que me decía que me aleje de el.- Tome un poco de aire y seguí.- Estaba en una fiesta buscando el baño y al abrir una puerta de una habitación, Tomas lo estaba haciendo con otra chica, del mismo grupo que estaba yo. Le empecé a gritar y él me dijo que estaba con ella al mismo tiempo que conmigo, y lo dijo riéndose. Desesperada llame a la única persona en quien confiaba, Cami.- Lagrimas comenzaban a caer por mis mejillas.- Le pregunte si podía venir a buscarme y me dijo que en minutos estaría ahí. La espere y cuando llego subí al auto y le conté todo. Me dio un abrazo y me dijo que todo iba a estar bien, que solo fuésemos a casa y pensaríamos la venganza. Faltaban dos cuadras para llegar a casa y un auto salió de la nada, choco del lado de Cami muy fuerte.- Comencé a llorar y Fede acaricio mi mano.- Lo único que recuerdo es despertar en el hospital y que mis papas me digan que Cami, mi propia hermana había fallecido en el acto, todo por mi estúpida culpa, por mi estúpido orgullo. Un dia despues cremaron su cuerpo y esparcimos sus cenizas en el mar, asi cuando veia rios o mares nos acordariamos de ella. Lo peor es que no había ningún sospechoso, nadie había visto nada, es por eso que estudio abogacía, para hacer justicia. Volví a juntarme con quienes realmente me querían, ya no iba mas de fiesta, me costaba salir de casa, deje de hacer varias actividades que me recordaban a ella.

Siento unos brazos fuertes me que me sostienen, apoyo mi cabeza en su pecho. Seguí llorando por durante 20 minutos.

-Lo siento, no sabia nada. Por eso estabas rara ese día en tu casa.- Dijo abrazándome.- Gracias por confiar en mi, significa mucho.

-Tambien te quería pedir perdón por lo de hoy a la noche la verdad que no quería..- No me dejo terminar.

-Esta bien, ya paso. Pero de verdad estuve a casi de romperle la cara.- Decir eso provoco que suelte una risita, me sentía bien con el.- No quiero meterme mucho pero creo que hay algo que estas haciendo mal.-

-Ahh si, eso que seria Fedilla?.- Pregunte.

-No creo que tendrías que parar de hacer las cosas que te hacían feliz por una perdida. Es decir, te hacían feliz no? Estoy para ayudarte a volver con esas cosas, si queres.-

-Si quiero, gracias en serio.- Después de un silencio no tan incomodo le pregunte.- Queres ver a mi hermana?.

-Me encantaría.

Después de eso subimos a mi cuarto y le mostré fotos de nosotras y alguna de ella sola.

-Es linda no?.- Le pregunte.

-Igual que la hermana.- Dijo dándome un beso en la frente.- Igual noto algo raro en ella.- Dijo acercándose la foto de Cami sentada en la playa, amaba el agua.

-Sus ojos.- Dije confirmándolo.- Cami tenia un ojo marrón claro y otro celeste, se llama heterocromia del iris. Era increíble mirarla.

Y así paso el tiempo, hablando de mi infancia y de que fueron las cosas que deje de hacer porque me recordaban a ella. Yo tocaba la guitarra y el ukelele, pero lo deje porque Cami era la que siempre cantaba. También la mayoría de sus fotos eran sacadas por mi, me gustaba la fotografía.
Pero contarle todo esto a Fede no se me hizo duro. Me apoyo en cada momento que estaba a punto de llorar y me abrazaba si era necesario.

-Te quedas a dormir?.- Le pregunte metiéndome en mi cama.

-No te molesta?. Capaz duerma en el sillón o...- No lo deje terminar.

-Dale, veni.- Dije haciéndole señas para que se tape conmigo.

Se acostó pegado a mi, pasando su brazo por mis hombros y yo apoye mi cabeza en su pecho.

-Buenas noches Fede.

-Buenas noches ______.

-Gracias, te quiero.

-Y yo mas a vos.- Dijo para terminar dejando un beso en mi cabeza.

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Gracias por leer.

Espero que les guste y si es asi comenten y voten porfiis.

Al fin salio a la luz la historia de Cami.

Vecinos (Fede Vigevani y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora