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La panza de Taehyung ya se comenzaba a notar. Aunque no era más que una leve hinchazón que lo mantenía preocupado. ¿Por qué su bebé de seis meses tenía el mismo tamaño que unos gases? Su hermano Baekhyun, que sólo tenía un mes y medio más, tenía una barriga de un tamaño impresionante. Aunque claro, Baekhyun iba a tener dos hermosas niñas gemelas, mientras que él...

Bueno, hoy iban a intentar descubrirlo nuevamente. Parecía que su bebé no quería ser visto. Quería ser tan sorpresa como su propia existencia. Si no fuera por Baekhyun, creería que ahora mismo tenía gases.

- Ya sabes que esto va a estar un poco frío.

Él asintió y sintió como ponían el frío gel sobre su estómago. Ese día había decidido ir solo. Sehun tenía algo que hacer y él prefería que el mayor no lo pusiera como la prioridad. Cada vez que lo veía acompañándolo no podía evitar sentirse culpable. Sobre todo cuando veía la forma en la que se interesaba de su hermano mayor. Luhan se había quedado con ellos, mientras que sus padres resolvían un asunto de gran relevancia.

- ¿Cómo está?

- Perfecto para ser visto - dijo el doctor con una gran sonrisa -, ¿está bien si le digo su sexo?

- Por favor - susurró.

El doctor le fue señalando donde debía mirar y un par de cosas, antes de mirarlo seriamente.

- Es un niño fuerte y sano.

Las lágrimas comenzaron a rodar por las mejillas del moreno. Iba a tener un pequeño niño. Su retoño, su pequeño consentido. ¿Qué nombre debería ponerle? ¿Debía ser alguno mezclado con su propio nombre? ¿O quizás algo que le recordase a Jungkook?

Entonces recordó aquella vez en su casa cuando Jungkook y él comenzaron a hablar de lo que esperaban para el futuro. Jungkook deseaba tener una hija, pero tenía claro que si tenía un hijo, debía ponerle Jeonghan, en honor a un pequeño niño que conoció cuando era más joven y, que según el de grandes ojos, había cambiado su vida.

- Mi pequeño Jeonghan - susurró.

El médico sonrió y se limitó a pasar la grabación a un CD para, más tarde, limpiar la panza del moreno.

Taehyung salió entonces del hospital y caminó hacia el parque más cercano. Una vez allí, se sentó en la primera banca que encontró y miró su celular. Se había sentido tan tentado a escribirle al menor. Pero ya no tenía su número, ya no había forma de que lo hiciera. Aquello lo alegraba y le frustraba a la vez. Quería escuchar su voz, saber si es feliz ahora que ya no está en su vida. Le gustaría saber cuánto le costó olvidar aquella noche que a él lo ha marcado tanto. Quizás incluso comentarle acerca de la existencia de Jeonghan.

Llevó una mano a su estómago.

- ¿Te gusta tu nombre? Jeonghan - dijo -. Tu papá amaba ese nombre. Algún día, cuando seas mayor te contaré la razón.

"O quizás el propio Jungkook se la pueda contar" le traicionó su propia mente. No. Jeonghan no sería un Jeon, no podía hacerse daño pensando en esa posibilidad. Su hijo estaba destinado a llamarse... Hirai.

Suspiró. Si sólo Sehun no hubiese dicho esa mentira, ahora él podría ser libre. Podría desentenderse y pasar a otro amor, en lugar de estar atado a él.

Su móvil comenzó a sonar. Un número desconocido se veía en la pantalla y su corazón se agitó.

Kookie... I need you! [KOOKV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora