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Elisabeth no podia creer lo que estaba pasando, Bastian con otra mujer la había usado y ahora la desechaba.

-Eres un desgraciado!!-grito con rabia y abofetiando a Bastian.

-No seas igualada campesina- dijo Anet, empujandola al suelo, Bastian se vio tentando a ayudar a Elisabeth y tomar del cabello a la niña mimada. Pero sabia que no podia hacerlo, asi que decidio hacer lo ultimo que podría hacer para salvarla.

-No pudiste ser tan bruta de creerte todo lo que te dije, crees que en serio puedo quererte? Ja ja Yo no me enamoro bruta.

La mirada de Elisabeth estaba empañada por un dolor inmenso que jamas olvidaria, no fue capas de levantarse, solo se quedo en el suelo derramando las lagrimas que la estaban ahogando por dentro. Bastian y Anet se marcharon, el con el corazón estrujado y odiando día a dia mas a la desgraciada mujer que caminaba a su lado, Anet no tan convencida pero satisfecha por lo sucedido regreso junto a su esposo que con desespero la llamaba.

-Aqui estoy Ronald no seas tan impasiente.

-Donde estabas? No quiero que vuelvas a alejarte- intento sonar lo mas autoritario que pudo pero no funciono mucho.

- Me agobia estar las 24horas aqui, necesito un momento para mi.

-Necesito un heredero- Anet palidecio al escucharlo.

-Aun es pronto.

-No, ya es tarde, ven...hoy quizás sea la ultima ves que pueda tocarte- Con asco y rabia nuevamente se entrego al anciano de su marido, a Ronald le costo culminar ya su corazon y fuerzas se estan terminando, pero el estaba seguro que su semilla ya estaba dentro de Anet.

Dos semanas después....

El dia llego, el ultimo respiro del Conde termino postrado en sus aposentos de la mansion Tudors de la mano de su joven esposa y el doctor.
Anet contuvo su felicidad debía aparentar frente a los extraños, pero le era dificil contener la alegria de saberse libre de ese viejo y de todos, ahora ella era la Condesa de Tudors y era ella la que mandaba, ya no debía obedecer a nadi.
Alfin podria vivir su amor con Bastian.

-Condesa le doy mis condolencias, se que se debe sentir sola y desprotegida pero estoy seguro que el conde debe haber dejado todo arreglado para usted- las palabras del medico y de algunos conocidos del fallesido. Ninguno imaginaba que ella ya tenia todo solucionado, que jamas estaria sola y desprotegida junto a su amado Bastian.

Pero en la mansion Tudors, nadie veia con buenos ojos el fallecimiento del conde, todos sabian que la joven condesa seria una verdadera bruja y aun peor pensaba Bastian. Solo se le ocurrian maneras de matar a Anet y no perjudicar a Elisabeth y a su futuro hijo que venía en camino.

La rebelión del esclavoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora