UNILATERAL (Min Yoon Gi)

6

Estaba seguro de que no fue un sueño, yo escuché claramente los pasos, y luego la miré ahí, parecía la chica del hospital.

Pero por qué ellos no la escucharon? Por qué no la vieron?

—ya deja de quemarte el cerebro y desayuna Yoongi –

Mi tenedor se paseaba por todo el plato, pero mi mente estaba desconectada.

—Yoongi! –

—qué? –

—desayuna–

—por qué a mí me obligas a desayunar y a JungKook no le dices nada por faltar a clases?–

—por que para eso tiene a sus padres–

—por qué no puedes hundirte solo? Por qué me tienes que arrastrar junto a ti?– interrogó JungKook ofendido

Todos rieron en la mesa, luego Nam comunicó que tenía que ir a una entrevista de trabajo, Jin dijo que él tenía que ir a trabajar y Hoseok no sé que dijo, pero también tenía que salir. Me dejaron a cargo de JungKook, del irresponsable maknae, que bien...

Mirábamos un aburrido programa en tv, Kook no dejaba de mandar y recibir mensajes con una sonrisa ladina en el rostro

—Yoongi...-

—sí? –

—te molestaría si tuviera que dejarte solo un par de horas?–

—tienes algo que hacer?– pregunté alzando la ceja

—es una chica, sólo... Sólo dos horas vale?–

—por mí no vuelvas –

—de acuerdo–

Tomó sus cosas y salió corriendo del departamento, yo seguí mirando el programa.

Estaba a punto de quedar dormido en el sofá cuando alguien llamó a la puerta. Arrastré los pies hasta ahí y abrí, la chica del hospital estaba parada frente a mí, llevaba ropa casual y tenía un aspecto bastante relajado

—tú, cómo... Cómo diste con migo? Quién eres?–

—antes que nada, hola. Y no seas mal educado, invitame a pasar– dijo adentrándose a mi departamento —quería saber como seguías, eso es todo–

—estoy bien, tú estabas internada ahí también, qué es lo que tenías? –

—nada de importancia, me dieron de alta hoy en la mañana–

—hoy?–

—sí, hoy–

Entonces todo era un sueño, estaba nervioso, por eso creí verla, pero por qué a ella?

—qué te pasa? Has visto un fantasma?–

—si te consideras un fantasma... Sí –

—me da gusto que hayas mejorado, aunque tu humor no sea el más agradable –

La chica se dirigió nuevamente a la puerta y salió con desinterés

—quién eres?–

—Hye– dijo ya alejándose

Cerré con seguro, no quería que esa loca se volviera y entrara. La gente de Seul sí que era rara.